Jungkookie Hyung

🌑Estúpido☀️

El golpe en su mejilla causó un pequeño ardor, mas eso no lo detuvo, ya que rápidamente recuperó la postura y lanzó un puñetazo con su zurda directo al abdomen del peli-negro frente a él, quien lo evitó velozmente y logró hacerlo caer contra la mullida colchoneta con una patada que impactó directo en su pantorrilla derecha.

Jungkook soltó una maldición, ya en el suelo. Miró con su ceño fruncido a Yugyeom, quien luego de limpiar el sudor de su frente con su antebrazo, dijo con un tono serio:

-¿Qué te pasa? Estás más distraído de lo normal. Jamás me dejas golpearte tanto.

El contrario desvió su mirada, aclarando su garganta en un intento de pensar con claridad.

-Solo estoy un poco disperso, eso es todo. –Resopló, restándole importancia.

¿Disperso? Claro.

Estaba jodidamente perdido en ese momento.

Lo único que podía pensar era en la preciosa sonrisa de corazón de un hermoso castaño.

Hoseok le gustaba.

¿Hoseok le gustaba?

Tal vez.

¿Podía ser?

No lo sabía, ¿Y quién sabe?

Él no sabe nada.

Su cerebro estaba haciendo corto circuito, y cuando miró hacia su amigo, notó que este parecía sentir la falla de fusibles en su cabeza.

-Ahora me dices, ¿Qué pasa?

Yugyeom tomó asiento junto a él en la colchoneta, mientras tomaba tranquilamente de su botella de agua.

Jeon lo miró inquieto.

¿Debía decirle?

Kim podía ser incluso más idiota que él, aunque a veces era un buen consejero.

Pero, ¿Y si solo se burlaba?

No le sorprendería.

Dejó de debatirse mentalmente, cuando el más alto le observó inquisitivo, casi persuadiéndolo con sus ojos marrones.

-Habla, te escucho.

Jeon tragó con fuerza, y miró sus pies cubiertos por los viejos zapatos deportivos.

-Creo que estoy sintiendo algo por Hoseok. –Confesó temeroso, apretando sus ojos con fuerza.

Se sentía como una niña de secundaria que confiesa su amor secreto, no jodan. Ni siquiera él sabía porqué estaba tan nervioso.

Kim a su lado, solo bufó:

-¿Y hasta ahora lo notas?

Jeon le miró incrédulo, notando la absoluta tranquilidad con la que su amigo había pronunciado aquellas palabras.

-¿Cómo? –Barbulló, disperso.

Yugyeom se inclinó sobre sí mismo, sosteniendo su peso con los brazos hacia atrás, dedicándole una mirada de obviedad al otro peli-negro.

-Oye, sé que soy estúpido. Pero no tan estúpido, porque hasta un estúpido notaría lo estúpido que estás por él.

Y Jungkook se sintió estúpido, porqué no había entendido eso.

¿Cómo que estaba actuando como un estúpido por Hoseok?

No era verdad.

Antes del beso, habían sido simples amigos.

Qué se preocupara siempre por su bienestar y por el de Jungshin era algo normal. También lo era dedicarle tiempo extra, pero era porque Hoseok se lo merecía. Y él veía normal correr para complacer al castaño en cualquier cosa que le hiciera sonreír, al igual que al pequeño Jungshin.