102- La tarde anterior

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La escuela sin Dumbledore no se sentía en lo absoluto diferente. No era como que el director fuera muy cercano a los estudiantes cuyo apellido no fuera Potter y se llamaran Harry James y ese año incluso esa atención estaba dejando mucho que desear.

La noticia desagradable y predecible estaba pegada ya en el pizarrón de la sala común para cuando se levantaron:

Dolores Jane Umbridge (Suma Inquisidora) sustituye a Albus Dumbledore como director del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.

Esta orden se ajusta al Decreto de Enseñanza n.°28. Firmado:

Cornelius Oswald Fudge ministro de Magia

Circe lo vió de salida de la Sala Común, era sábado y sabía que todos dormirían hasta tarde. Quiá fuera por eso que Snape y Minnie le habían pedido que fuera al despacho de él para mantener una conversación sobre lo que Dumbledore le había dicho. Llamó a la puerta.

-Adelante- se escuchó a McGonagall.

Abrió la puerta y se topó con sus Jefes de Casa favoritos, les dedicó una media sonrisa y tomó asiento en una de las sillas del escritorio. No necesitaba preguntar lo que querían saber, así que simplemente comenzó a hablar

Dos días antes...

Circe tomaba un paseo a la orilla del Bosque Prohibido mientras meditaba su reciente descubrimiento cuando vió a Dumbledore caminando en su dirección. Rodó los ojos inmediatamente.

-Vaya día maravilloso para una buena caminata- dijo el viejo tranquilamente.

-A solas, preferentemente- Circe dijo fríamente.

-A veces hablar de lo que nos tiene molestos es de gran ayuda para comprender de mejor forma las cosas.

-No quiere hacer esto, señor. De verdad.

Pero Dumbledore parecía estar seguro de que era le mejor opción.

"Que no diga que no se lo advertí"

-Bueno, entonces explíqueme por qué decidió inventarse una protección de sangre. Y no, no me mire de esa manera como que no entiende de lo que estoy hablando. No nos hagamos los inocentes, usted y yo sabemos que no existe tal protección de sangre sobre Harry.

-Tu madre...

-Exacto, si dicha protección de sangre fuera verdad, usted no habría tenido problema en que trajéramos a Harry a vivir al castillo desde que era un bebé. La protección de sangre serviría no solo con Petunia, sino conmigo. Si lo mantenía a mi lado hubiera estado igual de protegido o incluso más.

-¿Has sacado esto de algún libro, no?

-En efecto, señor. Ningún tipo de protección se vincula a la sangre, a la muerte y al sacrificio de un voluntario si. Lo cual me lleva a pensar en otra cosa, de acuerdo a todos, usted mismo se ofreció a ser el Guardían de mis padres, pero al final eligieron a Peter y usted hizo ese encantamiento, ¿o me equivoco?

-Yo lo hice, así es.

-Por lo tanto, sabía que Sirius Black era inocente. Un recuerdo suyo y él no hubiera pasado 12 años en prisión. Sabemos el poder que tiene, de haber querido lo hubiera dejado libre en un santiamén- Circe hablaba con calma, atando los hilos de nuevo a como los tenía en su cabeza- pero no lo hizo, ¿Por qué? No me responda, quería alejar a Harry. Sabía lo que estaba viviendo, lo sabía por Minerva y por Figg y decidió ocultarlo porque justo eso servía para su propósito. El bien mayor o como quiera llamarlo.

-A veces el fin justifica los medios.

-Así, Harry no conocería nada mejor que el mundo mágico, por lo que lo defendería a uñas y dientes y encontraría un hombro confiable sobre el cual llorar en usted, así que también le tendría devoción.

Harry Potter y la Princesa de Slytherin 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora