116- Slug Club y el collar

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Luego de firmar el permiso para revisar la Sección Prohibida de la biblioteca y despedir a los niños, Snape se dispuso a llamar a Regulus por el flú. Ciertamente pensar en métodos para intentar asesinar a Dumbledore pero sin asesinarlo no estaba siendo del todo sencillo.

-Casa de los Tonks, Regulus Black.

-Severuuuus- respondió la voz de Regulus del otro lado y pronto apareció en el fuego- ¿Qué tal las cosas en Hogwarts?

-Seguimos viendo opciones, Circe propone tratar de darle un objeto envenenado a alguien que no pueda llevárselo a Dumbledore o algo así, es un intento mediocre y cree que funcionará.

-¿Y a quién sería?

-No lo sabemos, solo ha sido una idea vaga. El Jefe debe creer que Malfoy está verdaderamente intentando asesinar a Dumbledore.

- Enviaré a Kreacher a revisar algunos libros de mi madre, estoy segura de tenía una Enciclopedia de Venenos del Doctor Selwyn.

-¿DE SELWYN? Pero solo había 5 ejemplares en el mundo, el Ministerio los mandó destruir todos, ¿Cómo es que tu madre...?

-Era amigo de la familia, es básicamente una copia del borrador y ella lo atesoraba. Cosas de los Black.

-Eso es más valioso que nuestras vidas...

-Nada lo es, te lo aseguro- una risa se desprendió de Reg- pero te lo enviaré de todas formas, será bueno para cuando te pongan a reconocer un veneno que ya sabías donde estaba- meditó un par de segundos- Lo bueno que eres buen actor.

-¿Buen actor?

-Uno excelente- respondió con una sonrisa- Yo creo que puede ser una buna opción, encuentren a alguien lo suficientemente torpe como para...espera, ¿Por qué no un veneno en algo que se pueda beber?

-¿Y que hacemos con el objeto?

-Hagan varios intentos, una sola amenaza no será suficiente para el Jefe, ¿A dónde tienes la cabeza, Severus?

-Sobre los hombros, idiota. Lo que pasa es que no podemos dejar que los niños lo maten, tengo que hacerlo yo.

-No seas dramático, Dumbledore no se dejaría matar- Regulus rió de nuevo.

-No es una maldita broma, me lo ha pedido explícitamente- respondió bajando la voz.

-¿Fue eso lo que pasó la otra noche, no? Circe descubrió lo que el viejo te había pedido y por eso... ¿Qué te costaba habérmelo dicho? Dijiste que confiabas en mí, te confié mi libertad por años y ahora me ocultas los favores que Dumbledore te pide. ¿Desde cuando somos así?

-No es momento de que te pongas con esto- gruñó exasperado- Yo no te pedí que hicieras tratos con la Muerte, Regulus Black.

-Bien, no lo hiciste, yo fui tonto pensando que te importaría lo suficiente. ¡E hice ese maldito trato para poder terminar con Voldemort de una vez por todas! Estoy de tu lado, siempre he detestado a ese viejo y a todos los que genuinamente persiguen sus ambiciones degeneradas, ¡Dejate ayudar por una maldita vez!

- ¿Y qué vas a hacer? ¿Matar a Dumbledore tú?

-Lo haría en tu lugar y lo sabes, pero estamos hundidos en estos planes de ese viejo y lo que conviene ahora mismo es seguir su plan.

-Igual va a morir, se puso el anillo de los Gaunt, tenía una maldición y la he detenido pero igual tiene como un año de vida. La piedra del anillo era oscura, él dice que es la Piedra de la Resurrección y contenía un horrocrux que ya fue destruido.

-¡Fabuloso!- aplaudió Regulus- Uno menos. Llevamos tres: el cuaderno, la piedra, el guardapelo, ¡Podemos hacerlo! Y sé lo que estás pensando, yo también quiero que esto termine.

Harry Potter y la Princesa de Slytherin 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora