112- La otra persona

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Regulus había estado tratando de ignorar los espantosos ruidos del exterior que no lo dejaban pensar en paz. Todo el tiempo que había pasado en la cueva lo había acostumbrado al silencio y a Kreacher. Había pedido a Kreacher que le llevara un panqué de chocolate y leía tranquilamente sobre la alfombra vieja de la sala mientras jugaba con su viejo tintero.

Las llamas de la chimenea chisporrotearon en verde brillante de repente, dejando pasar a Circe, que estaba completamente inconciente con rastros de un tono violeta en el jumper y algunas lágrimas que caían por sus mejillas.

-¿Qué les pasó?

-¡Tráeme un Dormir Sin Sueños, por piedad!- gruñó Snape mientras acomodaba a Circe en uno de los sillones.

Regulus subió por la escalera oculta y repasó entre los estantes.

-¡Y uno de los frascos morados! ¡Y uno de gotero que está encima, el verde! ¡Ah, y el otro que tiene corcho, está sobrepuesto!

Tomó todo lo que le había pedido y bajó contando los escalones para no caer, dejó todo junto a Snape y estaba a nada de preguntar cuando otra orden le fue dada.

-¡Un cepillo!

-¡No hace falta que grites, estoy detrás de ti!

Regulus ahora estaba intrigado, así que de igual forma fue a buscar el cepillo y volvió, cuando lo hizo los rastros violetas habían desaparecido.

-¿Qué les pasó?- volvió a preguntar- ¡Si esa vieja cabra les hizo algo, lo mataré!

-Pues vete formando- Severus dijo con ironía y Regulus sonrió.- Se le ocurrió decirle que me había pedido que lo matara antes de que Draco pudiera hacerlo, comenzó a reclamarle, compararlo con el Jefe y todo salió de su control. Es esa estúpida maldición, no creí que pudiera hacer eso.

-¿Cuál era? ¿Conderam corda?

-¡Esa, justo esa!- gruñó exasperado mientras cerraba todos los frascos que había usado.

-¿Por qué se la lanzaron? ¿Cómo pasó?

-En el Departamento de Misterios, por la espalda, pero igual lograron el efecto esperado- Severus tomó entonces el cepillo y comenzó a cepillar el cabello de Circe en donde antes habían estado las manchas violetas- No sabemos quién, pero la razón la sospecho. Albus consiguió que le retiraran el detector por su buen manejo de la magia que tiene, por lo que debió avisar lo que ella era y el Ministerio está lleno de mortífagos, era una forma de bloquear la amenaza.

-¿Cuál amenaza?

-Es una Magnificus, Reg.

-¡¿Quieres decir que es como Merlín?!

-Exacto, brujas y magos sometidos a la reacción de sus impulsos y los peligros de su entorno, magia completamente regulada dependiendo del contexto. Ahora imagina lo que pasó cuando tuvo que enfrentarse a una bola de mortífagos, ¡Claro que si alguien lo sabía, querría detenerla!

-¿Fue grave?

-¡Destrozó los músculos de Barty hace un año y dejó a un par sangrando moribundos entre las heridas hechas por sus propias uñas! Hace magia sin varita, incluso la complicada, tú no sabes la cantidad de cosas que es capaz de hacer.

-Y ahora suenas como un padre orgulloso, te aseguro que nadie lo sabía, si lo hicieran la confianza que tiene el Jefe en ti se desvanecería.

-Es que él no lo sabe porque los culpables están en Azkaban- Snape terminó de deshacer el nudo en el cabello de Circe- Me matará si sabe que arruiné su cabello una vez más.

Harry Potter y la Princesa de Slytherin 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora