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—¡¿Cómo debería decirle a Yoongi?!—preguntó con desesperación observando a NamJoon y este solo bajó la cabeza con tristeza.—¡Mi sangre es regó la suya en un callejón sin piedad alguna! ¡Él y yo hemos sido amigos, hermanos desde que tengo memoria! No puedo decirle que el enfermo de mi primo atacó a su hermano y probablemente esté muerto. Tengo miedo de que me odie, pero tengo más miedo de callar, quisiera que todos sepan la clase de animal que fue ese maldito, pero mi padre dice que debemos darle la noticia a sus familiares antes de hacerlo.

—Es difícil dar una noticia cuando no sabes qué decir sobre el paradero de la víctima.

—¡Eso dice el rey! Quiere esperar hasta encontrarlo vivo o muerto, pero yo no creo que sea del todo prudente. Lo que no entiendo es porque su madre aún no ha informado sobre su desaparición o se lo ha dicho a su padre e hijo mayor. Quiero contactar con ella, quiero saber si se encuentra bien o necesita ayuda.

—Alteza, su padre le pidió discreción.

—En algo estoy de acuerdo con el Luxure Ω que vino a la capital a vengar a ese omega, mi padre no está tomando bien las decisiones. Solo está dejando a mi primo como un mártir.

Taehyung caminaba de un lado para otro comiendo sus uñas de la incertidumbre mientras Jimin descansaba tranquilamente en el sofá viendo el canal nacional de noticias.

—Tenemos que irnos, debemos mudarnos. En la noche llega Hoseok, le diremos que nos ayude a empacar lo esencial y volveremos a Busan. Jamás debimos salir de ahí.—dijo con desesperación.—No, papá jamás debió sacarte de ahí.—Alzó la mano y tomó a Jimin de una patilla jalándola sin piedad.—Eres un pequeño demonio, ahora entiendo a Homero. Si no fuera porque te gusta resolver el día de personas que probablemente mañana vuelvan a estar en peligro, podríamos seguir pasando desapercibidos, pero seguramente te van a confundir con la o el loco que atacó a esos alfas y nos llevarán a la cárcel. Después, el rey ordenará que nos ejecuten frente una horda de furiosos manifestantes, cortarán nuestros cuellos o seremos quemados como si fuéramos brujas.—Su imaginación había ido demasiado lejos.

El mayor retiró con facilidad la mano del castaño y habló.

—A mí nadie puede tocarme, tú morirás y yo estaré entre la gente observando todo.

El rostro aterrorizado de Taehyung hizo reír con fuerza a Jimin.

—Ya deja de pensar en tonterías. Tú y yo no tenemos nada que ver en ese asunto, el Luxure Ω que atacó a esos hombres los siguió desde el lugar donde ocurrieron los hechos y recuerda que nosotros jamás en nuestra vida hemos puesto un pie en Daegu.

—¡Papá nació allá!

—Por favor, no hagas que te explique a patadas.—advirtió y Taehyung intentó calmarse.

Los dos se quedaron durante quince minutos escuchando todos los detalles de la noticia que más parecía una historia de terror japonés.

—Qué cruel, esa persona realmente fue muy despiadada con ellos.—musitó el menor abrazando un cojín.

—Te puedo asegurar que ellos fueron mucho más sádicos que él. Lo sabes, no somos idiotas con regularidad. Sabemos que tenemos ventaja y no ha habido muchas ocasiones de demostrarlo, pero cuando lastiman algo que nos importa, no hay oportunidades de escapar. Podría apostar este edificio a que si a ellos los hubiesen sacado del país, el resultado sería el mismo.—contó notando la piel erizada del contrario.—¿Qué deben haber hecho para desatar su ira? ¿Matar al hijo de un Luxure Ω? ¿Pareja? ¿Amigo? ¿Familiar? ¿Algún tipo de violencia salvaje contra un indefenso?

—Mejor voy a preparar el desayuno. No quiero pensar demasiado en eso o voy a llorar de la pena por la víctima que aún se desconoce.

Unos segundos después de llegar a la cocina, el timbre sonó e inmediatamente Jimin se levantó de su asiento observando al menor.

—Tae, creo que has invocado al diablo.—susurró y este se encogió de brazos.

—Puede ser Hok, no te alarmes. Iré a ver.—caminó dos pasos y el mayor le advirtió con la mirada que si daba un paso más, estaría en problemas.—Guarda ese color de ojos para el enemigo, gatito; y ya te entendí.

—Quiero que te quedes atrás de mí, y si por algún motivo te pido que vayas a tu cuarto, me obedecerás. Cerrarás con candado, y luego harás lo mismo, pero en el baño. Es ahí donde esperarás mi llamado y si es posible, lleva la máscara que tienes bajo la cama.

Taehyung asintió a regañadientes preguntándose la razón y el porqué la luna le había dado más altura que fuerza y a su amigo, todo lo contrario.

—Huele a alfa, huele a dos alfas.—se corrigió de inmediato Taehyung.

—¿Con qué permiso entraron al edificio y quienes son?—preguntó antes de abrir y escuchó a una persona aclararse la garganta tras la puerta.

—Soy el tipo al que atacaste en la tienda y el que está a mi lado es mi guardia. Resulta que no puedo decírtelo aquí, pero resumiendo, soy algo... alguien importante y quiero que me ayudes con un problemita que me ha surgido.—dijo intentando sonar amable e indefenso.—Se que somos excremento de toro con diarrea para ti, pero prometo que somos indefensos ante ti y respetamos a los de tu casta, aunque la tuya no a la nuestra.—Esto último lo susurró y NamJoon golpeó su hombro.

—Buen día, soy Kim NamJoon, guardia del joven, a pesar de ser alfa dominante necesita ser cuidado por un alfa común y corriente. No representa ningún peligro inminente, lo prometo.

Taehyung se acercó a Jimin con más tranquilidad.

—Seguro viene a decirte que va a tener un bebé tuyo. Jimin, debes hacerte cargo, después de todo no aguantaste un celo tan destructivo con solo haber tocado a ese hombre por gusto.

—Cállate, si dices algo sobre eso no vas a vivir durante mucho tiempo.

Luego de amenazar al menor, Jimin abrió la puerta con cautela y los dejó pasar.

Ninguno de los dos se había visto tan claramente como en ese momento.

Sus ojos conectaron al instante y por un momento, el color de los mismos cambió. Un ligero tono que alarmó a los otros dos individuos en la habitación.

—Se quieren matar.—soltó NamJoon rápidamente.

—Se quieren aparear.—dijo Taehyung al mismo tiempo.

Luxure ΩDonde viven las historias. Descúbrelo ahora