El padre de Leo estaba bastante orgulloso de la relación entre Cristiano y su hijo, le parecía perfecto que su hijo estuviese con alguien que a su parecer era lo mejor para él, aunque Lionel solo pensara en Guillermo todos los días y tratara de fingir que estaba feliz en su “relacion”.
Ese día en particular Cristiano acompaño a Lionel a los entrenamientos, tenían que seguir con su mentira y aún más ahora que se lo habían dicho a Jorge. Cris observaba desde las gradas como el menor entrenaba, le parecía atractivo el verlo haciendo ejercicio pero trataba de no verlo por mucho tiempo, no quería que su corazón saliera lastimado de ahí porque después de todo, el corazón de Leo le pertenece a alguien más, alguien que tiene una pareja y aún así el argentino le buscaba porque lo amaba, pero mientras pensaba en eso le hizo acordarse de ellos y esque, sentía celos por las acciones de Leo hacía Guillermo, pero Leo ya había hecho anterior lo mismo con Cristiano e incluso su respuesta fue similar a la del mensaje de anoche, solo que más fuerte y grosero. Se arrepentía de lo que hizo y Leo le había perdonado, pero aún así sabía que su esperanza de que regresarán de manera formal y real se había desmoronado, pero también tenía en cuenta que el argentino se lo había dicho desde el inicio.
Salieron juntos del campo hablando un poco sobre la noche anterior y Leo mencionando lo mal e incómodo que llegaba a ponerle los comentarios de su padre, aún más con los que se refería a Guillermo de manera grosera y desagradable, como si Lionel nunca le hubiera dicho cuánto amaba al guardameta.
Los chicos llegaron a la casa de Leo donde convivieron juntos la tarde, almorzando y hablando un poco, Leo contándome a Cristiano las actividades que quería comenzar a hacer, entre ellas tocar otro instrumento que no fuera la guitarra, como el teclado o el violín, incluso aprender a bailar, y aunque dijo que lo quería hacer por gusto propio, la realidad era porque lo hacía de vez en cuando con Guillermo, pero ninguno sabía bailar con exactitud, solo lo hacían por diversión pisándose los pies entre ellos mientras reían y se besaban.
—Me encantaría poder bailar el jazz o los vals, incluso algunas baladas, pero con aprender a bailar el danubio azul ó sway me conformaría.—hablo Leo mientras Cristiano lo escuchaba.
—Yo creo que el jazz te que-
El teléfono de Lionel comenzó a sonar por una llamada del número de Hirving, le pareció extraño ya que el mexicano casi siempre le mandaba mensajes pero no tenía ninguno en su bandeja de entrada. Contesto la llamada al primer son y al otro lado de la línea se podía escuchar una respiración agitada.
—Hirving, ¿Paso algo? Vos casi no me haces llamadas.—le parecía algo extraño, pero trataba de pensar en que el mexicano solo le dijera algo insignificante para después colgarle, pero no fue así.
—¿Recuerdas cuando me dijiste que te llamará si algo malo pasaba?—la voz se escuchaba algo entrecortada y ronca.
—Si, eso fue lo que dije ¿Paso algo malo? ¿Saúl y Guille regresaron?
—No, no, ojalá fuera eso, Guillermo está en urgencias, recién entro a cirugía urgente.—Apenas escucho eso, su vista se comenzó a nublar y se sintió un poco mareado mientras que en su pecho sentía una punzada, Cristiano quien se percató de la situación de Leo se acercó para tomarlo de los hombros sosteniendole.
—¿En qué hospital?
—Giovanni Da Procida.
—Menos de tres horas y estoy allá.
Colgó la llamada y subió corriendo a su habitación por una mochila metiendo alguna de sus prendas en esta, Cristiano aún no entendía muy bien lo que sucedía pero logro hacer que Leo se detuviera a hablar con el por un momento para explicarle la situación.
—¿De verdad vas a ir? Está en urgencias, entrando a una operación, no sabes cuánto va a tardar en despertar y tu contrato dice que no puedes faltar un día sin justificarlo antes con el entrenador, te van a correr.
—Lo amo y haré lo que sea por él, y si eso significa dejar mi trabajo, entonces lo dejaré por estar junto a él, no importa si me vuelve a rechazar, me preocupa… además, vos no lo entenderías.—se dió media vuelta para ir a buscar sus tenis que se puso rápidamente. Cristiano se quedó pensando un poco y esque tenía razón, cuando uno ama haría cualquier estupidez por esa persona.
—Minimo déjame acompañarte.—ambos se quedaron viendo, Leo estaba sorprendido por esa respuesta de su parte, de verdad creía que lo dejaría irse.
—¿De verdad?
—Si, porque te quiero y eres mi amigo.
—…—Lionel se le quedó mirando un momento con una ligera sonrisa mientras sus ojos se humedecian.—Gracias…—se lanzo a abrazar por el cuello al mayor mientras sus ojos soltaban pequeñas gotas de lágrima que se seco lo más rápido posible.—Te quiero.—le dió un beso sobre la mejilla y se separó de el para terminar de guardar algunas cosas personales.
Apenas llegaron al aeropuerto había un avión que los dejaba en el lugar donde estaba ubicado el hospital, pero tardaría en llegar el avión. Y la segunda opción era tomar dos aviones, uno a Italia y de ahí a salerno, el cual tomo Leo sin pensarlo, el avión estaba ya estacionado listo para dejar entrar a los pasajeros.
Durante todo el viaje Leo fue nervioso, mordiendo sus uñas y rascándose constantemente las manos mientras Cristiano trataba de tranquilizarle diciéndole que todo estaría bien.Estaba analizando bien a Guillermo de mi historia y me enoje con el bien cabron, todavía de que Leo va a ver si está bien y le pide que le ayude a salir de donde lo tenía Saúl y le pide que sea de manera secreta para que la gente no se entere le dice a Leo que se largue y que nunca lo quiso, y Leo ahí enamorado de él, Leo búscate a alguien mejor, él no te conviene 💔
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𝘔𝘦𝘯𝘵𝘪𝘳𝘢𝘴 𝘗𝘪𝘢𝘥𝘰𝘴𝘢𝘴
FanfictionGuillermo Ochoa y Saúl "Canelo" Álvarez, la pareja perfecta, hombres guapos, famosos y adinerados ¿Que podría estar mal en su relación? Quizás el que Saúl no ama a Guillermo, o que Guillermo tiene a un amante. Muchas cosas están mal en su relación...