Imagínate la siguiente situación:
1 de marzo de 2023. Te despiertas un día como cualquier otro y te encuentras en la puerta de tu casa la hoja de un calendario. El calendario es del mes de marzo de 2023, mes que empieza justo el día en que te encuen...
"Una excelente noticia para amenizar un mes complicado. Diría que lo siento por Flora, pero espero que la situación sea mucho mejor para ella ahora."
Por la mañana, mi única actividad reseñable ha sido donar sangre en una de esas furgonetas que luego te dan un bocata. Me han hecho algunas preguntas, pero no hemos mencionado lo de mi desmayo de hace poco. Admito que me la he jugado un poco y que no me hubiese importado volverme a desmayar. Así el mes pasa lo más rápido posible.
Por lo visto es el día del donante de sangre, así que están muy movilizados. Si alguien me pregunta por qué lo he hecho, contestaré de forma heroica, pero en realidad solo quería que mi destino escogiera entre un desmayo y un bocadillo.
—Eres muy altruista, ¿verdad? —dice Nora cuando paso por el portal. Está sentada en las escaleras, sonriendo.
—Quería ver de qué es este año el bocata —le digo.
—No sé si donar sangre yo también...
—Si lo haces, avisa de que tu sangre está envenenada y que no la pueden mezclar con la sangre normal.
—Ah, eso me gusta más —dice, levantándose y mirándome de cerca—. Es curioso, ¿verdad? Odio algunos de tus comentarios hirientes, y amo otros. ¿Sabes ver la diferencia?
—No, porque no estoy tan mal de la cabeza.
—Los que amo son los que implican que me conoces. Los que odio son los que faltan a la verdad. Y los vacíos que no significan ni una cosa ni la otra... Los amo porque muestran tu lado más oscuro.
—Vale, estás chalada. Este seguro que lo has amado, porque es verdad.
Antes de que Nora me conteste, escuchamos un grito y un portazo, seguido de los pasos de alguien que baja las escaleras con mucha rabia. Es Lucas, con una maleta enorme.
Se detiene en seco cuando nos ve en el portal.
—Eh, vosotros, ¿os queréis sacar una propina? —nos dice.
—Depende de para qué —contesta Nora.
—Tengo cuatro maletas más como esta ahí arriba. Que alguno me ayude a llevarlas al coche que está en la calle de ahí atrás.
—Pero bueno, vecino... —dice Nora—. ¿No has visto lo escuchimizados que estamos nosotros a tu lado? ¿Un hombre tan fuerte como tú no puede llevar unas maletas de nada hasta la calle de ahí atrás?
—Yo es que además acabo de donar sangre y no estoy como para... —empiezo a decir, pero Lucas no tarda en interrumpirme.
—Bueno, pues nada. Tampoco tenía muchas esperanzas. Vaya cuadro...
Se va, y Nora se despide con su mano y una sonrisa, aunque Lucas ya está de espaldas a ella.
—¿Lucas se muda? —se pregunta Nora—. ¿Su mujer lo habrá echado de casa?
—Es lo más probable —digo, como si no lo supiera con certeza—. Esos dos se odian.
—¿Sabes por qué se odian, Izan?
—No me lo digas. Porque no han sabido abrazar lo bueno y también lo malo del otro.
—Te tengo muy bien educado. Buen chico —me intenta acariciar la cabeza, pero yo me aparto. Sus caricias imposibles de esquivar son las de la mejilla, cuando me mira a los ojos. Las demás las tengo más o menos controladas.
—Me voy a mi casa. Adiós. Acuérdate de avisar del veneno de tu sangre si te metes ahí.
—Tranquilo, no pienso donar mi sangre a nadie. No la necesitarán, en eso tienes razón...
Llego a casa y escucho a Lucía hablar por teléfono. Seguro que estará hablando con la Marta, su hermana o su amiga o algo así. Su confidente.
No escucho toda la conversación, aunque pego la oreja al suelo, pero lo que escucho es que al final ha explotado, que no lo podía soportar más y que tenía que irse. Que se ha ido él porque la casa la han conseguido gracias al hermano de Lucía. Y que, por lo visto, esto puede traer algún problema entre sus familias, pero que Lucía necesitaba hacerlo.
Creo que podría contarle algo de esto a Frank. El hermano de Lucía pagó esta casa y además las dos familias podrían tener un conflicto por esta ruptura.
Por la tarde, intento enterarme de cómo repercute esto en Flora cuando vuelve del colegio. No consigo enterarme de nada porque no hablan a gritos. Me gustaría pensar que esto es el final de la violencia y de los gritos en esa casa, pero considerando que la predicción de mañana dice que Flora se esconderá en mi casa... No sé si tener muchas esperanzas.
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El Twitter de Izan durante el día de hoy: https://twitter.com/IzanSecreto/status/1669052024162504704
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