Todo parece ser tan tranquilo y sereno desde la distancia dónde está, con la mirada en las luces de la cuidad. El clima está preso de un frío silencioso sin vientos pero con las bajas temperaturas siendo protagonista más aún por ser plena madrugada. Pese a la hora y frío, Lara está en el balcon de la mansión que pertenece a Esteban, lugar el cual está funcionando como morada para Daniel y ella desde lo sucedido aquel día con la explosión de la casa. La residencia, fielmente custodiada está ubicada a las afuera de la cuidad.
Abrazada a su cuerpo, Lara mantiene su mirada a lo lejos, llevando sus pensamientos hacia las personas que no puede ver ahora, cómo su querido hermano, Iván y hasta la inevitable presencia en su corazón de Ethan y los mellizos.
— De los días que estuvimos aquí, nunca dormiste más que dos horas — Reconoce a la perfección la voz de Daniel, quién termina acercándose al balcon, apoyándose sobre las barandas del mismo.
— Lo mismo es contigo— repone la joven, sin mirarlo. Hace tiempo que ha estado aquí, ya la punta de su nariz y sus mejillas comienzan a tornarse de un peculiar tono rojiso.
Daniel, no tiene nada que negar a eso ya que es verdad, ninguno de los dos ha podido dormir bien estos días.
— ¿Qué esperas ver desde aquí?— pregunta, mirando hacia ningún lugar en específico como lo hace Lara pero en dirección a la cuidad.— Extraño mucho mi hogar — confiesa Lara al cabo de unos minutos en silencio.
Daniel, la mira disimuladamente de reojo, viendo esa cansada y triste expresión. Con esto, vuelve a recordar que aunque Lara es solo unos años menor qué él, lo iguala en la dura y fría personalidad y ni hablar de la fuerza que maneja y como pelea pero aún así, criada y educada prácticamente por Travis y consentida por él e Iván, sigue teniendo fuertes sentimientos de apego por su hogar, a la espera de seguir siendo la hermana pequeña e intocable de Travis.
Eso es algo que simplemente Daniel no puede entender ya que Lara es más fuerte de lo que era antes y con todo lo que ellos están haciendo, se está volviendo una chica intocable dentro del mundo de los gaganters pero quizás, Lara aún solo desee ser la hermanita de Travis.— Yo también -Repone Daniel, con la viva imagen de Lía.
— ¿Tu crees que ellos ya sepan que estamos vivos?
Daniel, lleva su mirada a su muñeca dónde ya no tiene puesta la pulsera azul, — Espero que si. De todas formas ya falta menos.
— Ya falta menos— repite largando un pesado suspiro.
— ¿Puedo hacerte una pregunta?— Salta Daniel, al cabo de unos minutos .
— Dependerá cual sea la respuesta.
— ¿Iván...
— No toques ese tema— amenaza Lara pero nada le importa a Daniel.
— Ambos son un par de cobardes— comenta Daniel, sonriendo de lado.
— Eso no es verdad— Se anticipa Lara, con la frente fruncida.
— Ese hombre te gusta— sigue Daniel, — y tú le gustas a él.
Lara, no dice nada y se apoya contra la baranda del balcón como lo hace Daniel.
-Son muchos años amando a una misma persona, ¿Cuánto?— pregunta.
Lara, mantiene su mirada fija hacia el frente con una indescifrable expresión y con esa actitud parece que no tiene intenciones de responder hasta que lo termina haciendo.
— nueve años— responde al fin, — desde la primera vez que lo ví— confiesa.— ¿por qué nunca se lo dijiste?
— porque...— ¿Existe una respuesta que sea válida o es que Daniel tiene razón en llamarlos cobardes? Sin embargo, si puede haber una respuesta, — ...porque él fue el único que nos tendió una mano, nos dió un refugio, un hogar, nos protegió sin conocernos, fue parte de nuestra familia. No quería perder eso .
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A través del Fuego
RomanceLa inocencia y la maldad o ¿es el angel y el demonio? El amor es confundido por el deseo pero lo más peligroso será salir de esa obsesiva venganza que destruirá todo a su pasó. Segunda parte de "A través de tus Ojos".