A través del Fuego

Capítulo 31: Hasta encontrarla...

Ya es media noche en la ciudad de los Ángeles y tal cual lo había dicho Leo, la cuidad se ha convertido en un infierno para cualquier grupo o banda que haya mantenido algún tipo de relación o tan solo haber cruzado una palabra, con Trevor y Zac.

Desde que el sol se ocultó, se han producido disturbio tras disturbio, en los barrios bajos, en cada club y bar que aparece dentro de la información que tiene Connor, hasta la policía intenta hacer su aparición pero no pueden detener lo que está sucediendo, atreverse siquiera a intervenir en el camino de los Dickson y compañía, no es buena idea...

A medida que pasan las horas sin noticias de Lía, Daniel va perdiendo un poco más de su seria personalidad cada vez que ingresa a un club buscando una sola pista que la lleve a ella.
Demaciado rápido se acostumbra a la sombría forma que tienen de manejarse los hombres en la organización  y ya no le queda ni un poco de paciencia o siquiera, compasión sabiendo que Lía está en peligro con Trevor.
Nada la lleva a ella, todos terminan siendo pistas falsas o ¿es que aún no han llegado a las personas correctas?

— Por favor...- hay un hombre frente a él, de rodillas e incapaz de poder moverse ya que esta siendo sujetado por Jack. — Yo no sé donde esta...por favor, tengo una hija

Daniel, lo mira a los ojos fríamente, sin demostrar alguna emoción.
— ¿Cuántos años tiene su hija?

— dieciséis.

— Lia, apenas tiene dieciocho años, ¿no le parece que ella puede llegar a ser su hija?

El individuo frente a Daniel, no sabe siquiera que responder a esto ya que sabe que él tiene motivos para estar así.

— Saquen a todos y destruyan el club— ordena Daniel, cada vez más roto por no encontrarla y de fondo puede oír la risita burlona de Jack y lo que sigue son fuertes ruidos, cumpliendo su orden.

— Nadie la ha encontrado aún— Habla Joel, llegando junto a Daniel. El ruido de las sirenas de la policía comienzan a sentirse cada vez más cerca, es más, el pobre departamento de policía tiene mucho trabajo está noche tratando de capturar siquiera a uno de los hombres que está con Daniel, buscando a Lía.

-Connor, sabe que hay un club que pertenece a Trevor. Allí es donde siempre estaba él y Zac. Tu tío lo va a encontrar primero y...

— Dijiste que había un hombre— corta Daniel, — El que estaba con Zac aquél día que nos encontramos con él— lo mira fijamente, — ¿Dónde está?— ruge, con la mandíbula tensa.

— ahh...Connor lo tiene— Contesta Joel, dudando si hace bien en decirlo en el estado que está Daniel.

— ¿Qué sabes de él?

Joel, hace un mueca de disgusto por estar dudando de sus acciones hasta que termina disipando la posibilidad de mentirle a Daniel, ya que al final, trabaja para él.
— Tiene una familia- comenta el joven.

Daniel, desvía la mirada hacia la salida del bar donde ve a Jack salir con una tranquila expresión acomodándose los guantes negros sobre sus manos.

— Ninguno hablo— Dice Jack, —¿Siguiente parada?

Se trababa de un secuestro anunciado, Connor y él sabían que Trevor la buscaba específicamente a ella, como si tratara de cobrarse lo que no pudo hacerle a Malia.
No pensó que se sentiría así pero cada minuto que pasa se convierte en un infierno para él.
La quiere a salvo ahora, la necesita como un deseo que no puede contralar.
No era del todo conciente lo profundo que se metió Lía en él, hasta ahora, que corre la posibilidad de que le hagan daño.
No puede permitir que le pase nada, asi que debe jugar las mismas cartas que Trevor.