A través del Fuego

Capitulo 80: "Te he amado por tanto tiempo"

Ethan, llegó a su mansión anunciando abiertamente que Lara está viva y en el camino se ocupó de hacer una video llamada a sus amigos para contarle lo mismo, con esa gran sonrisa  que regreso a la vida después de todo un año. Si Daniel, está vivo pasa a segundo plano para él ya que lo más importante es su hija. 
No es lo mismo para Connor ya que los hermanos Parisi no aguantaron mucho para decirle y quizás, eso fue un error, ya que apenas le dijeron Connor se puso en marcha para ir con Daniel, interrumpiendo inocente su encuentro, fogoso, con Lia.

Mientras tanto, Travis no ha quitado su mirada de Lara como si sintiera que en cualquier momento se fuera a desvanecer. Está igual que Ethan, ansioso e inquieto por saber el plan que tenían ella y Daniel para hacer tal acción.

La comodidad de su hogar, es algo que simplemente no puede negociar. Lara, se siente tan agusto y pacífica en su casa como hace tiempo no se sentía pero aún falta algo más.

— ¿Iván?— pregunta hacia Travis, tratando de no hacer ninguna expresión que la delate.

— Se fue...

- ¿Qué?— se precipita Lia y tarde se da cuenta de su ansiosa reacción.

Si hay alguien a quien no puede engañar es a Travis. Es así que él puede darse cuenta a la perfección de los sentimientos de su hermana hacia Iván.
— Fue a visitar a su hijo y a sus suegros —termina Travis.

Saber eso tampoco logra tranquilizar el corazón de Lara, de lo contrario vuelve a sentir ese dolor en el pecho, el sentido al vacío de estar lejos de él. Está con su pequeño hijo, el niño que tuvo con Lizzy, su amada esposa. Al menos eso es lo que ella piensa sin saber que en el corazón de Iván, ella ha ocupado ese lugar  primero.

— No le avisaré que estás aquí — suelta Travis, recuperando la atención de Lara .
— Estoy seguro que él querrá estar aquí para escuchar la explicación que tienen. Si eso será por la tarde, tienes el tiempo suficiente para ir por él — termina diciéndole con una sonrisa de lado que sorprende a Lara.

— ¿Tu ...

— Hasta el más tonto se daría cuenta que ustedes se gustan — sigue Travis, acercándose más a ella.

-ahh...yo no..- Tan acostumbrada a negar lo que siente, no se da cuenta que vuelve a negarlo de una manera automática.

— No ganas nada negando algo que es totalmente verdadero.

Lara, es capaz de sostenerle la mirada por unos segundos y agacha la cabeza.
— Lo sé...— susurra.

—Fue muy duro para él perderte de esa manera— sigue Travis,— Verte, le devolverá la paz— Travis, la acerca a él depositando un beso sobre su frente, — como me la devolvió a mi— le regala una cálida sonrisa hasta que la atrae a su cuerpo abrazándola. — Estoy tan feliz de que estés aqui— dice en un tono bajo. — Te quiero, hermana.

Lara, deja escapar un furtiva risa por lo bajo correspondiendole al abrazo de Travis.— Yo  también -murmura la joven, tranquilamente...

Claramente, Travis no la iba a dejar sola nuevamente así que la acompaño a San Francisco, cuidad la cual está Iván.
Llegan a la cuidad al amanecer y terminan esperando a que la mansión dónde está Iván,  su pequeño hijo Tiziano de apenas cuatro años y sus abuelos, despierte totalmente.

Es imposible pasar de ser percibidos allí por la seguridad que hay alrededor de la mansión. Es más, las casas cercanas a la mansión y unos kilómetros más allá de la misma son todas propiedades de Iván, haciendo imposible que alguien se atreva a hacerle daño a su hijo. Aunque, él se ha impuesto a si mismo la culpa de lo que pasó con Lizzy y con ello, se castigo permaneciendo lo más alejado de Tiziano. Por eso vive en otra cuidad para no despertar el bil interés de malas personas. Esto será así, hasta que Tiziano sea un adolescente. Fue la promesa que le hizo a los padres de Lizzy para mantenerlo seguro.