Los momentos de tranquilidad escaseaban y cuando los había, aprovechábamos con Rasmi para pasar tiempo juntos.
Revisando las finanzas o leyendo folletos de productos lanzados recientemente al mercado, cualquier cosa venía bien para despejarnos en el despacho. Con Cyan durmiendo en la carriola y los niños en el colegio, Rasmi retornó a su rutina de ponerse pesado buscando mimos.
-Tenemos tiempo hasta la cena y ya vimos todos los documentos, ¿qué tal subir a la alcoba un rato mientras dejamos al niño con Gina?- apretándome la cintura, me atrajo hacia el para besarme
-No tienes piedad de tu pobre esposa en las noches que ahora intentas socavarla de día? Estoy dudando de con quien me casé-
-Eres hermosa cuando finges estar enojada. Vamos, dime que sí e iremos a la inauguración de la cafetería de Bel en la capital. Escuché que tiene un nuevo gusto de café con rollos de canela- este bastardo conocía mi debilidad
-Bien, llévate a Cyan que yo te espero arriba-
De vez en cuando no venía mal darle el gusto y sacarnos la frustración que conllevaba preparar el viñedo y el olivar para el invierno.
Me adelanté y al entrar a la habitación, el baúl dentro del armario me atrajo para sacar la caja que nos dejó Nim. Al abrirlo, el grimorio robado a Ursa comenzó a brillar. Las ventanas se abrieron violentamente con el viento que entró en torbellino revolviendo todo.
Hojeándose hasta la mitad, el grimorio atrapó algo que llegó volando para cerrarse. Mi curiosidad fue más grande que al abrirlo nuevamente, hallé una carta color verde dirigida a X.Monroe y cuyo remitente era A.Bennett.
"...Xanabria, bla bla... urgente...Mercado incinerado...bla bla...asilo...templo del dios innombrable...bla bla... Inquisidores muertos...bla bla... Suaya ya no representa un problema... Hay una nueva Gran Madre....bla bla... te ayudaremos a eliminarla..."
-Desgraciadas! Pero van a conocerme, se los juro!- no sabía si enojarme o alegrarme el conocer que tramaban esas arpías en mi contra
De todas las cartas que habían llegado a manos de Nimue, esta era la más informativa. Prácticamente todos los pilares, querían saber quién fue capaz de arrebatarle el título a la que llamaban "Sucia Alfombra" y creyendo que yo no era más que basura, enviaban cartas que jamás llegarían a un destinatario ignorante del asunto para eliminarme.
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Matrimonio por Conveniencia
De TodoHarta de soportar a un marido infiel, una cuñada entrometida y a medio mundo que se puso en su contra, la condesa Miriel optó por planear un divorcio conveniente. -Ella y el conde son unas víboras háganme caso y empaquen sus maletas- planeaba sacar...