Una vez acomodamos todos los instrumentos sobre una mesa inmensa, nos alistamos para realizar una vivisección a la psicópata de Corina Banner.
Con las batas y guantes nuevos, esta horrenda bruja conocería a su creador de la forma más lenta y dolorosa posible. Atada a la mesa, le inyecté las dosis suficientes para manipularla. Elvis trataba de escoger que instrumento utilizar y Newton le acercó un bisturí para entrar en calor.
Cuando se enteró que los Banner entraron a casa de los Kiendili y que su hermana Arthemis estaba entre las invitadas, se enfureció. Al saber que iríamos a darle su merecido nos siguió en tanto mi hermano, lo convenció de unirse a una práctica forense para saciar su odio.
Si bien se negó al principio, después aceptó a sabiendas que está experiencia le serviría para sus estudios de cirujano. Lo que no sabía Elvis era que en realidad veníamos por otra cosa; el castigo doble para la lechuza y su dueña.
El abuelo Murray nos explicó que de entre todos los khami del mundo, únicamente los Termesos tenían la rara habilidad de causar un dolor indescriptible a la gran madre cada vez que exterminaban a parte de su aquelarre. Eso debido al perfeccionamiento constante de los Termesos y motivo por el cual, la casa real se dedicó a buscarlos para borrar su paso por la tierra.
Khamis homicidas había mil, pero de la estirpe más letal y que heredaba una sed de sangre atroz, solo nosotros nos levantábamos con el título.
-No podrá emitir queja. Ares, dedícate a la cirugía de estómago, yo iré por su corazón- Newton nos enseñaría lo que aprendió en estas semanas con el Dr Lombroso
-Realizaré la colecistectomía. Tengo curiosidad de ver un hígado en buen estado- Elvis se había cabreado cuando el tío le enseñó a extirpar vesículas porque los cadáveres no mostraban la viveza necesaria para ver la reacción
-Inicia la incisión debajo del borde derecho de la caja torácica no tan lejos, y procura que sea de unas seis pulgadas para extraer la grasa fácilmente. Y tu, haz los honores- mi hermano y Elvis querían ver la cara que pondría esta vieja
-A esta altura ya le habrán hablado de nosotros así que omitiré la presentación. Sra Banner, mucho me temo que el día de hoy va experimentar un dolor peor al que causo. Nuestra tía nos surtió de las drogas suficientes para estudiarla a fondo y como vió, le inyecté tiopental sódico para doparla y bromuro de pancurio que le ha paralizado los músculos- se notaba aterrorizada
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Matrimonio por Conveniencia
RandomHarta de soportar a un marido infiel, una cuñada entrometida y a medio mundo que se puso en su contra, la condesa Miriel optó por planear un divorcio conveniente. -Ella y el conde son unas víboras háganme caso y empaquen sus maletas- planeaba sacar...