Harta de soportar a un marido infiel, una cuñada entrometida y a medio mundo que se puso en su contra, la condesa Miriel optó por planear un divorcio conveniente.
-Ella y el conde son unas víboras háganme caso y empaquen sus maletas- planeaba sacar...
El bautismo de Cyan y Phio, sumado a la bendición de alianzas para Newton y Paulette fue en un día lluvioso. Belphy le pidió al reverendo LaVey que fuera el quien les diera la bendición en vista que el cura que querían tanto Rasmi como los demás, estaba trabajando en Clover y su agenda estaba apretada.
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Era un obispo llamado Salazar y al cual le tenían bastante estima al ser quien bautizó a mi marido y a sus amigos jinns. Cuando se desocupara, prometió venir de visita para bendecir la casa ya que decían que con solo tirar agua bendita, ahuyentaba a los demonios.
La cena con los Kiendili y la fiesta de bautismo sería en nuestra finca por lo que había mucha gente en casa. Babydoll y Murray vinieron exclusivamente como los padrinos de ambos niños de paso, saludaban a sus nietos.
El reverendo les entregó una medalla de oro de la diosa de la luz a cada uno y una vela consagrada en una iglesia repleta de otros niños. Aquí solo había un viejo presbítero que oficiaba de vez en cuando la misa y al anunciar la llegada de un reverendo, amigo de Salazar, aquellas familias con hijos sin bautizar llegaron en manada.
Al acabar la ceremonia, tanto los Kiendili como nosotros atestiguamos el compromiso para luego regresar a la finca para la fiesta. Creí que no daríamos abasto pero la lluvia ayudó bastante a minorizar el escándalo.
-Qué belleza de niña! Felicidades Bel, esta criatura es tu premio por todo tu sacrificio!- alzando en el aire a Phio, Babydoll jugaba con ella
-Este niño está creciendo bien pero...-
Murray levantó a Cyan para verlo a los ojos y al usar su don para soplarle la cara, los ojos azules de Cyan brillaron fugazmente mientras reía.
-Hoo! No puede ser...otro jinn? Rasmi, a que estás jugando? Tanto te gusta la competencia que buscas hacerte de la mayor cantidad de nosotros?- con la copa de vino en mano, Newman le palmeó la espalda
-Eso...yo no fui. Vienen solos y se me pegan, lo juro!-
-Si claro y...abuelo, qué haces?- Bel se extrañó al ver que ahora sostenía a Phio para hacer lo mismo
Aunque esta vez, el brillo en los ojos verdes de la bebé fueron de un tono blanco perlado.
-Ahh...esto se está poniendo raro. No veía esto desde...esta niña es una jinn pero una indefinida. Su don no le fue asignado aún Belphoebe!- lo que dijo Murray nos dejó duros
-Eso es malo?- me puso nerviosa que algo le fuera a ocurrir a la hija de mi comadre
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