Un corazón podrido

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El día anterior en el club Sharonet...

Una explosión debajo de la mesa de los novios, seguida de otras en los lugares designados a los invitados de la novia, arrojó el terror entre la multitud.

Los gritos e intentos de escape resultaron infructuosos al agolparse un mar de gente que intentaban abrir las puertas de emergencia a patadas pero estaban bloqueadas.

Tratar de moverse comenzó a ser imposible cuando las llamas y el humo se propagaron por todo el salón de fiestas

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Tratar de moverse comenzó a ser imposible cuando las llamas y el humo se propagaron por todo el salón de fiestas.

Minutos antes, las familias socias del club se levantaron de a una para retirarse en silencio como mostrando que la fiesta no era de su agrado por lo que nadie sospechó de su huida pero al encontrar las salidas cerradas al momento de la explosión, la sospecha se acrecentó cuando del otro lado de las puertas, los invitados de los novios escuchaban como los socios trababan con llave los únicos medios de escape.

-Esos bastardos intentan incinerarnos! Pásame el mástil que voy a darles su merecido!- Portgas con ayuda de los marinos tomaron los adornos de metal para romper las puertas

*Boom!*

Otra explosión del lado de los baños hizo que todos giraran buscando a su capitán que salió corriendo de entre las llamas.

-Busquemos otra forma de salir. Mojen trapos en la fuente y úsenlos para cubrirse el rostro!- la novia que usaba su velo para cubrirse del humo, ordenaba a sus hombres que hacer

-Creo que no se va poder. Es hora que mueran asquerosos muertos de hambre jajaja!- Lady Tamara se paró detrás de la novia con una pistola

-Por dios, quiere matar al capitán!- no sólo la policía, sino que también los piratas quedaron atónitos ante la imagen de la mujer amenzando a la novia

-Nadie saldrá de aquí y menos tú pirata de pacotilla!- la vizcondesa Jazmín permanecía sentada en medio del fuego bebiendo champagne

-Nadie saldrá de aquí y menos tú pirata de pacotilla!- la vizcondesa Jazmín permanecía sentada en medio del fuego bebiendo champagne

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-Ahhh!- las llamas parecían estar siendo controladas por algo para rodear a las más de 100 personas en círculo hasta acorralarlas

-Suéltame vieja bruja!- Frank estaba siendo retenido por lady Helen

Matrimonio por Conveniencia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora