2.11

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Lisa



Estoy harta de volver a casa y encontrar al maldito chico que hizo que Jungkook, se olvidara de mí en tan poco tiempo.

Llego al cuarto donde se encuentra mi pareja junto a Taeyang y Hoseok, al parecer, estan revisando algunas cintas de grabación ya que, uno de los rusos no aparece por ningún lugar. Entro sin pedir permiso y me coloco atrás de mi pareja llevando mis manos hasta sus hombros dejando pequeñas caricias en ellos.

-Hola, hermosa -me saluda.

Alza una de sus manos y la coloca sobre la mía.

-Hola -respondo coquetamente. -Podemos ir a nuestra casa. Odio encontrarme con la puta de Hoseok -menciono, molesta.

-Su nombre es Jimin -dice Hoseok, a la defensiva observándome seriamente.

-Dame un momento, Lisa -me pide. -Necesito ver las cintas de grabación. Revisa el día que atacaron el furgón de Jeon, seguro y hallamos algo -se dirige al imbécil de Hoseok.

Me alejo de mi pareja y tomo asiento, molesta.

-Eso fue hace más de una semana -le recuerda Hoseok.

-Me importa una mierda, haz lo que pido -le exige mi pareja.

El video comienza a reproducirse, no pasa nada lo único que se ve son a los malditos rusos degenerados paseándose por la casa hasta que la sombra de un hombre con capucha negra se impulsa para saltar el muro del jardín de la casa, con el cuerpo de un muerto a un metro de distancia.

-¡Detenlo! -grita Taeyang, mientras Hoseok pausa el video.

-Es él, seguramente es él -dice Hoseok.

-Acércalo más -ordena mi pareja.

-Parece un ladrón, jefe -habla Taeyang.

-¿Quién se atrevería a entrar a la casa de Tempo? -pregunta Hoseok.

-Alguien que está loco o que quiere algo que está dentro -respondo, ganándome la atención de los tres hombres.

-No pensaras que es el fantasma de Jeon ¿O sí? -pregunta, curioso Taeyang.

-Jungkook, está muerto, pero no hay que descartar cualquier hombre que trabajo para él. Sus hombres son leales a él -menciona Hoseok, causándome risa.

-Lo contrario a ti, nada de lealtad. ¿No, Hoseok? -me burlo de él.

-Duplica la seguridad, no quiero que ni un centavo salga de esta casa. ¡¿Me escucharon?! -grita mi pareja, molesto. -Nos vamos en diez minutos -se dirige a mí, para luego salir del cuarto.

Pienso mientras observo la silueta del tipo en la pantalla, vaya que está loco al entrar a esta casa repleta de rusos asesinos, lo que está dentro de la casa debe ser demasiado importante para él, para arriesgarse de esa manera a entrar aquí.

-No puede ser -gesticulo, ganándome la atención de Hoseok y Taeyang.

-¿Sucede algo? -pregunta Taeyang.

Me pongo de pie, niego y salgo del cuarto.


Solo puede ser él, nada más que él, estoy segura que es él, sus hombros y sus largas piernas me lo confirman físicamente, pero su estupidez de venir a este lugar me lo confirma más que nada.
Está en claro que el maldito chico lo ha flechado bien, debo encontrarlo y sacarle la verdad, si no me teme está vez sí lo hará.

-Alto allí, gordito -llamo su atención, el cual no se detiene y continúa caminando. -¿Acaso no escuchas? Dije que te detengas -digo, mientras camino atrás de él.

-En primera tengo mi nombre y estoy seguro que no es ese, en segunda no tengo porque obedecerte. Ahora, si me permites debo irme -lo escucho hablar.

Admiro la forma en la que se defiende, pero esto no se quedará así, debo saber la verdad.

-¿Dónde escondes a Jeon? -interrogo, mientras lo acorralo contra la pared.

-Debes estar loca -se burla.

-¡Deja de reírte y dime de una puta vez! -grito, molesta.

-No lo sé, estaba en Grecia, no tengo idea dónde Namjoon enterró sus restos. Seguro y se calcino ¡No lo sé! -dice el chico desesperado.

-Deja de jugar -le pido, furiosa.

-Escucha, no sé de qué me hablas, lo único que sé es que estás loca -añade.

Me canso de ser buena, alzo mi mano y cuando estoy a punto de golpearlo, la voz de mi pareja me lo impide.

-Detente, Lisa. Aléjate de él, te quiero afuera en cinco minutos -escucho su voz.

Ni siquiera lo veo, solo asiento.

Enamorado De Un NarcotraficanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora