Esencias Mágicas [Completa]

58.Soledad

La rutina de Richard, después de rigurosas semanas de adaptación consistían en despertarse antes del amanecer, cuando el bosque estaba en su momento más tranquilo. Aprovechaba la calma y el frescor de la madrugada para iniciar su día con una mente clara y enfocada. Utilizaba una roca plana o se recargaba bajo uno de los majestuosos árboles de hojas azules y cerraba los ojos. En ese lugar, practicaba la meditación profunda, concentrándose en su respiración y en el flujo de energía dentro de su cuerpo. Visualizaba sus emociones como un río turbulento y trabajaba incansablemente para calmarlas y controlarlas. Esta práctica fue fundamental para estabilizar su magia oscura inestable y su salud mental.

Después de meditar, Richard realizaba un riguroso entrenamiento físico. Correr largas distancias a través del bosque, saltar sobre raíces y esquivar ramas bajas. Practicar escalada en los árboles más altos para mejorar su agilidad y fuerza. Su rutina incluía flexiones, abdominales y ejercicios con pesas improvisadas hechas de piedras. Este entrenamiento lo fortalecía tanto física como mentalmente, preparándolo para cualquier desafío que pudiese enfrentar.

Cuando el sol estaba en su punto más alto, salía a cazar, armado con un arco y flechas que había fabricado él mismo. Se movía sigilosamente por el bosque, observando a su presa con paciencia y precisión. A menudo cazaba ciervos, conejos y aves, asegurándose de no sobrecargar los recursos del bosque. También recolecta bayas, frutas y raíces comestibles que encontraba en su camino. La caza y la recolección no solo le proporcionan alimento, sino que también le enseñaban a ser autosuficiente y a respetar el equilibrio natural del bosque.

Cuando regresaba a su campamento, preparaba su comida en una pequeña cueva oculta. Usaba piedras para encender un fuego y cocinaba su caza en una parrilla rudimentaria hecha de ramas fuertes. Se aseguraba de que Cloud también estuviese alimentado, aunque con porciones controladas. La preparación de alimentos era un proceso que le daba un sentido de rutina y normalidad en su día a día.

Por las tardes, dedicaba tiempo al entrenamiento de combate. Simulaba batallas contra enemigos invisibles, utilizando su magia de luz y su magia oscura, trabajando en controlarlas y combinarlas de manera efectiva. También entrenaba con una espada de madera, perfeccionando su técnica y reflejos. Este entrenamiento era intenso y agotador, pero le permitía canalizar su frustración y su energía en algo productivo.

En algunas ocasiones Cloud lo veía entrenar por las tardes, y notaba que la magia se intentaba combinar y tenía un color gris a casi distinguirse, pero el chico ni cuenta se daba.

Cuando el sol comenzaba a ponerse, trabajaba en mejorar su refugio. Construía y reparaba trampas alrededor de su campamento para protegerse de animales salvajes y posibles intrusos. También recolectaba madera y hojas para reforzar su cueva y creaba herramientas útiles. Esta actividad le brindaba un sentido de propósito y lo mantenía enfocado en su objetivo de supervivencia y automejora.

Finalmente, cuando la noche caía, Richard volvía a meditar, permitiendo que la tranquilidad del bosque nocturno lo envolviese. Reflexionaba sobre su día y sus progresos, buscando en su interior la fuerza y la determinación para seguir adelante. 

Richard estaba sentado junto a una fogata, observando las llamas danzar bajo el cielo estrellado. El campamento estaba en una pequeña clara en el bosque, un lugar tranquilo donde podía concentrarse en su entrenamiento. A su lado, Cloud, su dragón, se acurrucaba con sus escamas brillando suavemente a la luz del fuego.Había sido una noche difícil. Los pensamientos de duda y el peso de sus responsabilidades como Lux Carrier lo abrumaban. Richard suspiró y lanzó una piedra al fuego, observando cómo las chispas se elevaban en el aire.

—Sabes, Cloud, algunas veces me pregunto si todo esto vale la pena. —dijo, sin esperar respuesta. Cloud levantó la cabeza y lo miró con sus ojos fijos y profundos, como si comprendiera cada palabra.