Esencias Mágicas [Completa]

104.La Carrera Comienza

Cuando la cuenta regresiva llegó a cero, una explosión ensordecedora de energía envolvió la pista. Los vehículos se dispararon hacia adelante con una potencia devastadora, mientras las ruedas y flamas quemaban el suelo y los motores gritaban al límite de su capacidad. La pista tembló bajo el peso de las poderosas máquinas que luchaban por posicionarse desde el primer segundo.

El corazón de Todder estaba al máximo. El volante tenía un tubo direccionador que lanzaba el fuego a la máquina provocando micro explosiones. El proceso de admisión constaba del motor tomando aire, puesto que el fuego necesita oxígeno para desarrollarse. Todd tenía el control para alternar con fuego o con ayuda de combustible para mantener la combustión. Al momento del arranque el motor recibió combustión directa del fuego del chico, explotando en velocidad. Los pistones estaban moviéndose monstruosamente dentro de sus áreas, comprimiendo la mezcla de aire y combustión, el motor estaba diseñado para soportar temperaturas abismales de calor. 

En un motor de carreras gríseo, esto comúnmente es provocado por una bujía que genera una chispa. Esta chispa enciende la mezcla de aire y combustible, provocando una rápida explosión. La energía liberada por la combustión empuja el pistón hacia abajo con gran fuerza. 

Utilizando fuego directo para este proceso y la colocación de runas y glifos en los lugares estratégicos, obtenemos un pistón terroríficamente veloz, y multiplicado por dieciocho, la velocidad que se podría obtener superaba los quinientos kilómetros por hora.

Esto sumado con los Turboalimentadores y supercargadores acondicionados para estas abrumadoras máquinas de la velocidad, estarían a la altura de estar cerca de match uno, que es el equivalente a la velocidad del sonido en el aire.

El público estaba enardecido del espectáculo, en abrir y cerrar de ojos ya nos estaban los vehículos y en su lugar había una estela de fuego de todos colores que, si las seguías, encontrarías al volido que la provocaba.

—Muy bien Clyde —hablaba Tom, de los comentaristas—. Muéstranos qué cosas les esperan a los pilotos de fuego.

—Definitivamente no les espera un paseo por el parque, Tom, este tramo de la pista es de los más rectos que les favorecerá si lo dieron todo al principio, vemos que ya están pasando por el primer obstáculo. Reaper acaba de rebasar a Tafty y su bestia, mientras Gareth y Donovan están pegados peleando por el quito puesto. Wyatt está enfocado en alejarse de esos dos, porque la distancia entre él y Draco está siendo muy grande. La hermosa Ashlynn mantiene su puesto, mientras que vemos que pronto Black y Todder se darán un saludo amistoso.

Las pantallas brindaban una vista aérea de los competidores, el público estaba entre gritos, bullicio y porras de apoyo. Se lograba distinguir la silueta del Ryu no Kiba al lado del Fireclaw.

Todder estaba concentrado, de alguna manera le sirvió comenzar en el segundo puesto, el no ver casi ningún vehículo le despejaba el panorama a solo rodar adelante. No veía otra cosa más que el frente. 

Lo estremeció el escuchar un golpeteo en su vidrió lateral, era Black, con deseos de hablar. Todder abrió la ventana.

El ruido que se estaba generando por el viento a altas velocidades era muy fuerte. Al abrir la ventana, el aire entró rápidamente, creando turbulencia y un ruido ensordecedor dentro del vehículo.

—¡Hey! —dijo Todd, intentando ser amistoso.

La fuerza de arrastre al abrir la ventana hizo que el Fireclaw disminuyera un poco la velocidad.

—¡Nos vemos en la meta, novato!

Por inercia la motocicleta de Black se adelantó, y Todder se dio cuenta de que había cometido un error, el problema sería más grande.