Capítulo 28

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Samuel: (La beso con muchas ganas, con deseo y mucha fuerza) Ay... mi brujita, te extrañe tanto. La bese suave, con mis labios acariciaba los de ella y empecé a bajarle despacio el cierre y vi que estaba mas que dispuesta para mi.

Andrea: Mientras me besaba con suavidad, mis manos le desabrochaba sus botones uno a uno. En seguida me puse encima de él, mientras lo besaba mis manos fueron a su pantalón, le empecé a quitar su correa y le desabroche, podía sentirlo con mis manos lo excitado que estaba.

Samuel: Esta mujer me está volviendo loco, no aguanto mas y la beso muy fuerte, sin dejarla respirar, me la quiero comer. Ella se aleja despacio, me mira y me sonríe, me pone sus manos por mi cara me besa despacio. Le respondo de la misma manera. Le voy subiendo el traje que llevaba hasta quitárselo, la veo con una tanga, que solo cubre lo necesario. Me levante con ella encima y la acomode en el sofá, me quito el pantalón, me acuesto encima de ella, la tenia de frente a mí, mis manos acarician sus muslo, me acosté a su lado con mi mano empecé acariciar su abdomen y de pronto baje un poco mas, comienzo a acariciar su parte intima. Te gusta.

Andrea: (Con la voz excitada). Si. Este hombre me hace perder la cabeza, que esta haciendo este hombre, esta haciendo acelerar mi respiración y mi corazón late muy fuerte. Estoy demasiada excitada. Siento como me empieza a quitar el sostén y lo empiezo a besar con mucha fuerza y pasión. Con una de mis manos acaricio su espalda y con la otra su cabeza. Veo como hace a un lado mi tanga y me sigue acariciando mi parte, me esta volviendo loca de placer.

Samuel: Me di cuenta que estaba lista para estar dentro de ella. Me acomodo encima de ella y empezó a besarla con desesperación, solo espera su aprobación, cuando siento que su mano baja poco a poco mi bóxer, hay decidió empezar lo que nuestros cuerpos nos pedían, acariciaba todo su cuerpo. La observo veo como cierra los ojos y como respira con dificultad, después de que su cuerpo cumple su objetivo de llegar al clímax, la acomodo en el sofá y allí descansamos abrazados.

Andrea: Lo besaba con mucha fuerza, mis manos estaban en su espalda. empecé a acariciar su abdomen hasta llegar a su bóxer y comencé a bajarlo era inevitable no sentir ni ver como este hombre ya estaba mas que dispuesto para mi. Siento como toca mis caderas y todo mi cuerpo, me hace estremecer, hasta el punto de cerrar mis ojos y respirar con dificultad. Allí terminamos junto casi al mismo tiempo. No podía creer que otra vez estaba en sus brazos, fue mágico. Su cuerpo abrazaba el mío. Me siento tan feliz. AMOR... ¡Te Amo!

Samuel: Yo también te amo, brujita. (La abrazo fuerte y le doy un beso en su frente).

Andrea: (Le doy un beso en la mejilla) Fue hermoso mi amor.

Samuel: Hermoso se queda corto, ay brujita me llevas al cielo. (Le doy un beso tierno y le acaricio su pelo).

Andrea: Estamos locos, hacer el amor en la sala. (Le sonríe)

Samuel: Yo estoy loco por ti. (Le doy un beso con mucha desesperación).

Andrea: Me le despego del beso porque siento que mi cuerpo se está calentando. Amor, tranquilízate.

Samuel: No puedo, quiero acerté el amor otra vez. Le empiezo a besar el cuello y a morderla despacio y suave para que no se le quede marca.

Andrea: (Un poco agitada) Yo quiero sentirte... Empecé a besar sus hombros y acariciar su espalda con mis manos y lo empujaba hacia a mí.

Samuel: Segura. Me sentía feliz, saber que ella me estaba deseando tanto como yo.

Andrea: Sí, y no me importa si nos cachan. Sin pensarlo bajo mi mano hasta una de sus nalgas y se la apretó con muchas ganas. Su movimiento es suave y despacio, siento como nuestras partes íntimas se rozan. Yo no paraba de besar sus hombros y pecho. En un momento desesperación le digo. Por favor, no me tortures, me témelo.

Samuel: Escuchar eso de mi brujita me hacía excitar más, sin perder tiempo, me posición y entro en ella. Sentía tanta desesperación por apoderarme de ella que empecé a moverme más rápido y me sentía agitado.

Andrea: Estamos abrazados amándonos, respirándonos frente a frente, sintiendo el aliento del otro, nuestros cuerpos sudaban. Era suya, era de mi bobito, solo él estaba dentro de mí. Lo sentía acá, conmigo de la nada mi cuerpo sentía una descarga de emociones, con el movimiento de mi mugrosito dentro de mí, hasta el punto que me debilite, me quede sin fuerzas, cosa él se dio cuenta.

Samuel: Verla así de exhausta me producía satisfacción, encima de ella termine, con un fuerte suspiro sobre la boca de ella y me acerque a su oído y le susurré. TE AMO. La abrazo tan fuerte, no quiero separarme de ella nunca.

Andrea: Te amo, mi vida. Respondo al abrazo y acaricio su espalda y siento como me pesan los ojos y lo único que quiero es dormir.

Samuel: Amor, no te duermas mejor levantemos y que nos tenemos que vestir.

Andrea: Abro los ojos hasta mas no poder, se me había olvidado por completo que estábamos en la sala. Tienes razón amor. Veo como se levanta sobre mí y lo miro se ve divino. Te ves hermoso, así en cuero.

Samuel: (Sonriendo) Te gusta lo que ves.

Andrea: Todo, me gusta. (Veo como se me acerca).

Samuel: A mí me gusta más lo que yo estoy viendo. Para provocarla, con una mano le acaricio su parte íntima y con la otra su busto.

Andrea: (Sonriendo) Me estas tentando. Veo que quiere jugar, con un poco de bochorno le acaricio su miembro y le digo. Esto me gusta más, pero hay que vestirnos. Me levanto y le doy un beso rapidito y mojado.

Narrador: Andrea se está acomodando su ropa interior, mientras que Samuel la observa cómo se vestía. Andrea le pide que se vista que ya eran las dos de la madrugada. Samuel comienza a ponerse su ropa interior, pero solo pensaba en que quiera pasar toda la noche con ella, no paraba de provocarla. Andrea intentaba controlarlo y mantenerse firme sin flaquear ella, ya que estaba más que dispuesta.

Andrea: Amor, me puedes ayudar con el cierre del vestido. (Señalando el cierre y dándole la espalda para que lo cerrara)

Samuel: Por qué mejor te lo quito de nuevo. (Abrazándola de espalda y tocándole el busto)

Andrea: No me sigas provocando, por favor. Vamos a tener tiempo de sobra. (Dándose la vuelta para quedar frente a frente).

Samuel: Tienes razón. (Acomodando su pelo a un lado y dándole un beso en el cuello).

Andrea: Te amo, goloso. Ni siquiera te has puesto los pantalones.

Samuel: Es que te estaba admirando. Sin pensarlo me pongo los pantalones y me pongo la camisa sin a botonar, la abrazo y la beso despacio sin prisa. Cuando de pronto escucho nuestros nombres.

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Quiero dar las gracias por esos 1k de votos a la estrellita. Les dejo otro capítulo más! Espero que les haya gustado. :-)

Este capítulo se lo dedico a cada uno de ustedes que le a dado click a la estrella y a todos los que comentan. Si quieren dar sugerencias sobre la historia en confianza me las pueden decir.

Un Amor para la Historia #PSF2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora