Capítulo 51

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Samuel: Gracias, señorita. Tener que esperar dos días es demasiado para mi. Que voy hacer sin ella, como la voy a encontrar en un país que nunca e visitado. Pero escucho una voz que me interrumpe en mis pensamientos. Me volteo a ver.

Andrea: Me sorprendo al verlo cuando salgo del pasillo y lo llame. Samuel. Se voltea cuando lo llamo, salgo corriendo lo abrazo fuerte y le digo con un nudo en la garganta. Perdóname, mi amor. Soy una idiota, no estoy pensando en ti, ni en mi. Lo miro a los ojos, veo que tiene los ojos llenos de lagrimas y le digo. Perdón, no sabia lo que hacia, jamás me quiero separar de ti.

Samuel: Con un nudo en la garganta, no pude evitar soltar lagrimas y le digo. Tenemos muchas cosas de que hablar.

Andrea: No pude evitar llorar. Claro que si, a donde vamos hablar.

Samuel: Le tomo la mano y le digo. No se por lo pronto vamos nos en mi moto.

Andrea: Me limpio mis mejillas y le digo. Espera, dame un momento. Me voy donde la azafata y le digo que mi maleta esta en el avión doy mis datos para cuando regresen me llamen para buscar mi maleta. Me le acerco de nuevo y le digo. Ahora si, nos podemos ir. Le tomo la mano y nos vamos para el estacionamiento. Nos montamos en su moto, nos pusimos los cascos y el acelero la moto, no sabia para donde me iba a llevar, sentía el aire y la velocidad iba aumentando, me dio miedo lo abrace fuerte. Mis pensamientos solo estaban en que le iba a decir a Samuel y que el me quería decir él. De lo que estaba segura es que no quería perder a mi mugrosito bello.

Samuel: Nos montamos en la motora, me sentía feliz por un lado, pero por el otro triste porque no me gusto la reacción de mi brújula. De lo que si estoy seguro es que no quiero perderla, porque se que es el amor de mi vida. Sin darme cuenta subo mucho la velocidad, me percato porque Andrea me abraza muy fuerte casi me deja sin respiración. Bajo un poco la velocidad y decido ir para e área de la playa, el mar tiene la virtud de darme paz. Así que me voy rumbo al área de la playa.

Andrea: Vamos por el área de la playa, estábamos cerca de la casa de la playa, se estacionó en la playas y nos bajamos de la moto, le digo. Porque me trajiste a esta lugar.

Samuel: Es un sitio tranquilo, donde podemos hablar. ¿Porque hiciste eso?

Andrea: Un poco molesta le digo. Porque no es justo que me pongas a elegir entre mi madre y tu, son amores distinto. Me toma la mano y nos vamos caminando por la playa.

Samuel: Le tomo la mano y me la llevo cerca de la playa. Mi intención no fue ponerte a elegir, pero no quiero que tu madre se meta en nuestra relación. Con mis manos le tomo la cara para que me mire a los ojos. Yo no quiero que elijas solo quiero que tu madre deje de molestarnos, que nos de nuestro espacio, no puede estar manipulándote.

Andrea: Te puedo entender, pero también entiéndeme es la casa de mi madre.

Samuel: Eso no te lo discuto, pero meter a Arturito a dormir con nosotros. A mi no me molesta es mi sobrino, pero ella debió consultarnos primero, no te parece.

Andrea: Nos sentamos en la arena mirando el mar. Lo mejor es que nos demos un tiempo para pensar y reflexionar si estamos preparados para casarnos. Podía sentir la brisa del mar dándome en el rostro, respire profundo puedo sentir el olor del mar, el mar tiene la virtud de calmarme.

Un Amor para la Historia #PSF2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora