Capítulo 49

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Narrador: La noche transcurrió sin ningún contratiempo en el Rancho del Junco. Con excepción de que Andrea y Samuel se fueron a dormir enojados. Flavio e Irina durmieron toda la noche bueno, Irina se levanto a media noche con antojos de comer helado. Arturo y Sofía extrañaban a Arturito que no dormía con ellos, pero la pasaron bien están muy activos durante la noche. Cayetana se fue para el departamento de Nestor a pasar la noche. Leonardo paso la noche en un basurero, pasando frío y necesidades. Isidoro pasa la noche en una de los almacenes donde esconden las armas. A la mañana siguiente.

Andrea: Cuando me levanto en la mañana con rayo del sol me encuentro sola en la habitación, ya Samuel se fue sin despedirse de mí y eso me duele por que no tengo culpa de las cosas que está haciendo mi madre. Me siento triste y no quiero levantar me pero tengo que ir a trabajar al rancho. Suspiró profundamente, me levanto busco la ropa que me voy a poner y me meto al baño. Mientras me baño solo pienso en la actitud que esta tomando Samuel que no me gusta para nada. Mi corazón se hace pedazos porque Samuel no me comprende. No puedo evitar soltar lágrima, salgo del baño, Y me voy a trabajar intento concentrarme, pero imposible y así pasa todo la tarde sin saber nada.

Banco:

Samuel: Me fui temprano porque no quería discutir con Andrea porque no estaba de acuerdo con lo que esta haciendo su madre. Para no pensar en más situación me refugie en el trabajo y me puse a revisar todos los archivos del último año, pero era imposible concentrarme porque me dolía estar enojado con Andrea. Tuve varias reuniones en el banco con la acción esta, pero no estuve atento en nada, sólo pensaba en mi brujita en cómo está pasando su día. Cuando termine de hacer todo lo del banco me fui directo al Rancho del Junco. Me fui directo a buscar a mi brujita a la oficina y toco la puerta, le digo. Andrea, puedo pasar.

Andrea: Escucho como tocan la puerta y su voz es inconfundible y le digo. Pasa amor la puerta está abierta. Un poco molesta le digo. ¿Qué haces aquí?

Samuel: Pues que hago aquí, vine a hablar contigo porque no me gusta estar así contigo. Ya sé que soy un tarado por no comprenderte toda tu madre.

Andrea: Samuel tienes que comprender que es la casa de mi madre y no tengo ni voz ni voto. Ella es la dueña y es la que toma las decisiones en esta casa me gusta o no.

Samuel: Eso yo lo comprendo y te entiendo pero no estoy acuerdo en que ella te manipula y tú siempre estás haciendo lo que ella quiere.

Andrea: Es mi madre y jamás le voy a fallar porque no soportaría que ella me vea como una vez lo hizo con hermanas.

Samuel: Junto mis manos y las coloco cerca de mi cara y le digo. Prométeme que en cuanto lo hacemos vamos a tener un apartamento o una casa, pero no vamos a vivir aquí.

Andrea: Yo no tengo que prometer nada, porque vamos forma nuestra propia familia es lo que importa.

Samuel: Por favor, prométemelo es para sentirme tranquilo. Me le acerco, la abrazos y le digo. Por favor brujita.

Andrea: Veo como se acerca y me abrazo le correspondo el abrazo, pero fuerte y quiero detener el tiempo en este instante. Confía en mí, por favor y no me hagas prometerte algo que va pasar.

Samuel: Vámonos a nuestra habitación quiero estar a solas contigo. Veo como apaga el monitor de su computadora y me sonríe. Le tomó la mano y no vamos a la habitación.

Un Amor para la Historia #PSF2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora