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Capítulo 6: Sombras en el Hospital

Capítulo 6: Sombras en el Hospital 

Ubicación: Hospital abandonado a las afueras de Berlín, cerca de una zona boscosa conocida como Grunewald Forest.Hora: Noche cerrada, alrededor de las 11:30 PM. La luna llena se asoma entre las nubes, proyectando sombras inquietantes en el entorno.Clima: Fresco y húmedo, con una ligera neblina cubriendo el suelo. El aire está cargado de un olor a moho y descomposición.Estado del Hospital: El hospital está en ruinas, con ventanas rotas y grafitis en las paredes. La vegetación ha empezado a reclamar el edificio, con enredaderas que trepan por las paredes exteriores. El interior está oscuro, sucio y lleno de escombros.Iluminación: Escasa, con algunas luces intermitentes que parpadean en los pasillos y una que otra lámpara fluorescente todavía encendida, emitiendo un zumbido constante.Silencio: La zona está en un silencio inquietante, roto ocasionalmente por el sonido distante de animales nocturnos y el crujido de las ramas en el viento.Presencia Paranormal: El ambiente está cargado con una sensación de malestar, como si algo oscuro y peligroso acechara en las sombras.

Fénix, Vannesa, y Lucian se encuentran en la entrada principal del hospital. Fénix, con su actitud habitual de liderazgo, observa el edificio con una expresión de concentración mientras da las últimas instrucciones.

Fénix: (mirando hacia el hospital) "Bien, equipo. Este lugar está hecho un desastre, pero no debería ser un problema. Hemos enfrentado cosas peores. Vannesa, tú cubres la retaguardia. Lucian, vas al frente conmigo. Mantén tus ojos y oídos bien abiertos. Aquí dentro podría haber más que solo vampiros."

Vannesa: (asintiendo con firmeza) "Entendido, Fénix. Cualquier cosa fuera de lo común, doy la señal."

Lucian: (ajustándose su equipo, con un toque de nerviosismo) "¿Cómo quieres que procedamos? ¿Sigilo o fuerza bruta?"

Fénix: (esbozando una sonrisa sarcástica) "Por cómo luce este lugar, diría que un enfoque directo funcionará mejor. No hay mucha cobertura y estos pasillos son angostos. Cualquier cosa que esté aquí no tendrá mucho espacio para maniobrar. Manténganse juntos, y no bajen la guardia."

Lucian: (tratando de sonar confiado) "Esto debería ser pan comido. Tres contra un par de chupasangres, ¿qué podría salir mal?"

Fénix: (con un tono relajado, pero firme) "Exactamente. Esto tendría que ser fácil. Pero no subestimemos a nuestros enemigos. Estos vampiros han estado infectando a las personas aquí por meses. Puede que estén mejor organizados de lo que parece. Mantengan la calma y trabajen en equipo."

Vannesa: (con una sonrisa ligera, mirando a Lucian) "No te pongas nervioso, Lucian. Lo tenemos todo bajo control."

Lucian: (forzando una sonrisa) "Sí, claro. Nada de qué preocuparse."

Fénix: (serio) "Recuerden, no es solo eliminarlos, sino también asegurarnos de que no haya más víctimas. Si vemos a alguien infectado, tratamos de neutralizarlos sin causar más daños de los necesarios. Y si encontramos al líder de este nido, lo derribamos sin piedad."

El equipo se prepara para entrar al hospital. Fénix, con su experiencia y confianza, lidera el camino. La puerta chirría al abrirse, revelando un oscuro y ominoso pasillo que se extiende hacia lo desconocido.

Fénix: (mirando a sus compañeros) "Vamos, hagamos esto rápido. Entre más pronto terminemos, más pronto podremos irnos de aquí."

El equipo avanza cautelosamente por el oscuro hospital, sus pasos resonando en los pasillos vacíos. Las paredes, cubiertas de grafitis y moho, emiten un olor a humedad y decadencia. La tensión en el aire es palpable mientras los tres exploran el lugar, con las linternas iluminando solo lo justo para ver algunos metros adelante.