Capítulo 45:Confrontación en Berlín part-1

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Capítulo 45:Confrontación en Berlín part-1

En el caos de la pelea, Fénix se mueve con una agilidad inhumana, utilizando su simbionte para esquivar los ataques brutales de Darem. Cada golpe de la bayoneta corta el aire, apenas rozando su piel. Fénix sonríe de lado, disfrutando del peligro, su tono sarcástico no abandona su voz.

Darem: (con voz firme y cargada de fervor) "Porque nuestro Dios es fuego consumidor."

Darem lanza un ataque feroz, con la bayoneta en alto, intentando cortar la cabeza de Fénix de un solo tajo. La hoja brilla con la luz fluorescente del centro comercial, descendiendo con toda la fuerza de su convicción. Sin embargo, la cabeza de Fénix no se separa de su cuerpo; una franja negra y viscosa, parecida a un tentáculo, mantiene la carne conectada, regenerándose al instante.

Fénix: (riendo, con un tono burlón) "¿De verdad pensaste que sería tan fácil, santo guerrero?"

En ese momento, Fénix aprovecha la sorpresa de Darem y lanza un poderoso golpe a las costillas de su oponente, hundiéndole el puño con una fuerza que hace crujir los huesos. Darem se tambalea por un instante, pero antes de caer, Fénix lanza un tentáculo de simbionte que se enrosca alrededor de su brazo, inmovilizándolo.

Fénix: (con una sonrisa maliciosa) "Vamos, Darem. No te frustres... solo estamos calentando."

Darem, con una rápida reacción, gira la bayoneta en su mano y corta el tentáculo que lo sostiene. Acto seguido, da un paso hacia Fénix, desenvainando su segunda bayoneta con una velocidad fulminante. Sin vacilar, ataca directamente el corazón de Fénix, perforando su pecho. El sonido de la carne rasgándose se mezcla con el grito de dolor de Fénix.

Darem: (con calma imperturbable, casi como si recitara un salmo) "Así caerán los malvados en manos del justo."

Fénix mira la hoja atravesando su pecho, siente la punta fría perforar su corazón, pero su rostro solo se transforma en una mueca de desafío.

Fénix: (escupiendo sangre, sin perder la sonrisa) "¿Malvado, dices? Qué aburrido... pensaba que eras más original."

Siente el poder del simbionte agitarse en su interior, fusionándose, reparando el daño. Un tentáculo se mueve por dentro de su cuerpo, buscando el filo de la bayoneta que atraviesa su corazón. Su piel hierve por la energía regenerativa del simbionte, y una carcajada escapa de sus labios.

Fénix: (burlón) "¿Es todo lo que tienes, Darem? Estoy empezando a pensar que esta fiesta será más corta de lo que esperaba."

En el rincón oscuro del centro comercial, Tharos observa la pelea con una expresión de frío interés. La iluminación parpadeante de los fluorescentes refleja en su rostro, y sus ojos no se apartan de la brutal confrontación entre Fénix y Darem.

Tharos: (murmurando para sí mismo, con una sonrisa malévola) "Vaya, parece que Fénix ha encontrado un adversario a su altura."

La pelea se desarrolla con una intensidad implacable. Darem, con su habilidad y precisión, empieza a identificar las debilidades en la defensa de Fénix. Después de un intercambio de golpes y movimientos frenéticos, Darem se enfoca en las extremidades de su oponente, buscando el punto débil.

Darem, con una precisión letal, realiza un corte en el brazo derecho de Fénix. La bayoneta corta la carne con facilidad, y el brazo se desprende en un ángulo grotesco, cayendo al suelo con un sonido sordo. Sin embargo, la reacción de Fénix es casi instantánea. La herida comienza a cerrarse rápidamente, el tentáculo del simbionte emerge del muñón, regenerando el brazo con una rapidez sobrenatural.

Fénix: (con voz cargada de sarcasmo) "¿Eso es todo lo que tienes? El circo no ha terminado."

Aprovechando la distracción de Darem al observar el brazo regenerado, Fénix contraataca con un golpe derecho directo en la mandíbula de su enemigo. La fuerza del golpe es tremenda, enviando a Darem a volar por el aire y estrellándose contra una de las paredes cercanas. La mandíbula de Darem se desdibuja por el impacto, y la bayoneta cae de su mano, resonando en el suelo.

Darem: (gemido de dolor, recobrando el aliento) "¡Eres... más fuerte de lo que esperaba!"

El sonido de la bayoneta rompiendo en el suelo resuena por el área, y Darem se levanta tambaleándose, su rostro ensangrentado y su expresión de furia desafiada. Mientras se reincorpora, mira a Fénix con una mezcla de respeto y odio.

Fénix: (sonriendo, con un tono burlón) "Vamos, Darem, ¡ponte en forma! Esto apenas comienza."

Tharos, desde su posición, sonríe con una satisfacción fría, disfrutando del espectáculo mientras la pelea se intensifica. El enfrentamiento entre Fénix y Darem sigue desatando caos, con el sonido de golpes y gritos resonando a lo largo del centro comercial. Tharos sabe que, independientemente del resultado, el combate está cumpliendo su propósito de mostrar el verdadero poder de Fénix y de mantener a Darem en la batalla.

Darem decide cambiar su estrategia. Sabe que sus ataques directos no están funcionando como esperaba y que necesita algo más para superar a Fénix. Con un esfuerzo por concentrarse, Darem intenta una táctica diferente.

Darem: (murmurando para sí mismo, con determinación) "Es hora de un nuevo enfoque."

Darem concentra una gran cantidad de energía en la bayoneta, cubriéndola con una aura letal que parece chisporrotear con electricidad. Con un grito de guerra, lanza un ataque poderoso hacia Fénix, un corte horizontal que parece atravesar el aire con una velocidad aterradora. La bayoneta deja un rastro de luz en su estela, casi como si fuera una extensión de su furia interna.

Fénix, sorprendido por el nuevo ataque, intenta bloquearlo con uno de sus tentáculos de simbionte. Aunque logra desviar la mayor parte del impacto, el corte rasga la piel de su torso, causando una herida profunda. El dolor es palpable, pero el simbionte comienza a cerrar la herida casi inmediatamente.

Fénix: (gruñendo de dolor, pero con una sonrisa de desafío) "¿Eso fue todo? ¿Un truco de luces?"

Darem, viendo que su táctica tiene algo de efecto, intensifica su ataque. Su segunda ofensiva es un ataque descendente, buscando cortar a Fénix por la mitad. Sin embargo, Fénix, aún tambaleándose por el primer golpe, logra esquivar parcialmente el ataque. La bayoneta roza su hombro, pero no logra perforar su cuerpo completamente.

Fénix: (mirando a Darem, su expresión endureciéndose) "Espera, todavía tengo algo que decir."

Con una explosión de fuerza, Fénix se lanza hacia Darem, usando sus tentáculos de simbionte para atacar con precisión. El primer golpe es directo y certero, rompiendo el brazo derecho de Darem con un crujido ensordecedor. Darem cae al suelo, su brazo colgando inerte y torcido en una posición antinatural.

Darem: (gritando de dolor, tratando de mantener su compostura) "¡Esto no es...! ¡No terminará así!"

Sin darle tiempo para recuperarse, Fénix avanza rápidamente y ataca de nuevo. Con un movimiento fluido, usa otro tentáculo para agarrar y romper el brazo izquierdo de Darem. El sonido de huesos fracturados y el grito agudo de Darem resuenan en el centro comercial.

Fénix: (mirando a Darem con desprecio) "¿Qué pasa, Darem? ¿Te has quedado sin trucos?"

Darem, ahora de rodillas y con ambos brazos inertes, mira a Fénix con una mezcla de desesperación y odio. Su respiración es entrecortada, y el sudor y la sangre corren por su rostro.

Darem: (murmurando entre dientes) "No... No puede terminar así."

El combate ha cambiado de forma drástica. Fénix, con una mezcla de confianza renovada y furia contenida, sigue observando a Darem, listo para continuar con la pelea. Mientras tanto, Tharos, en su esquina, observa con una mezcla de satisfacción y atención crítica, sabiendo que el resultado de este enfrentamiento podría cambiar el curso de los eventos.

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