Capítulo 59:El Incidente en Washington-11
- La Oficina Peculiar
De repente, el escenario cambia abruptamente. Fénix y Tharos se encuentran en un lugar inesperado: una oficina amplia, elegantemente decorada con un estilo antiguo pero refinado. Las paredes están cubiertas de estanterías llenas de libros encuadernados en cuero, y el suelo de madera oscura brilla bajo la suave luz dorada de las lámparas de araña. La mesa de caoba en el centro de la sala está impecable, con un conjunto de documentos ordenadamente apilados y una pluma antigua en su tintero. Los dos, vestidos con trajes elegantes y bien cortados, parecen haber entrado en otro mundo, uno en el que las cicatrices de su brutal batalla ya no están presentes.
A su alrededor, como figuras fantasmales que parecen fuera de lugar en este entorno, están Enid, Marcus, Vanessa, y Lucian, sentados en cómodos sillones de cuero, observando con atención a Fénix y Tharos. Ninguno de ellos parece sorprendido, como si fueran testigos de una conversación que habían esperado presenciar.
Fénix, de pie junto a la mesa, se gira para enfrentar a los que están presentes. Su rostro está serio, pero sus ojos reflejan una calidez inusual. Su tono, aunque firme, tiene un matiz de emoción que rara vez muestra.
Fénix, con voz segura: "Ustedes son la razón por la que sigo peleando. Todos ustedes. Enid, Marcus, Vanessa, Lucian... Todos son mi fuerza, mi familia. Es por ustedes que he soportado tanto. Porque quiero un futuro donde todos podamos respirar sin miedo."
Los presentes asienten en silencio. La tensión en el aire es palpable, pero también hay un sentido de unidad, de propósito compartido. Sin embargo, esta declaración de Fénix no hace más que arrancar una risa sarcástica de Tharos.
Tharos, con una sonrisa despectiva: "Bonito discurso, Fénix. Pero no todos estamos aquí por las mismas razones. Lo que tú sientes no tiene nada que ver conmigo."
Fénix no pierde la compostura ante la burla. En cambio, da un paso adelante, cerrando la distancia entre él y Tharos, su mirada perforando la de su oponente.
Fénix, con tono firme y amenazante: "Entonces te daré dos opciones, Tharos. Opción número uno: el simbionte vuelve al cuerpo al que pertenece, vuelve a mí. Opción número dos: mueres aquí mismo."
Por un momento, el silencio en la habitación es absoluto. Tharos observa a Fénix, con los ojos llenos de furia y desprecio. Luego, una carcajada profunda escapa de sus labios.
Tharos, con una sonrisa burlona y despectiva: "¿Volver a ti? ¡Nunca! Prefiero morir antes que ser una parte de ti otra vez, Fénix. ¿De verdad crees que tienes el poder de elegir mi destino?"
La risa de Tharos se hace más fuerte, más intensa, mientras su ira comienza a elevarse. Su cuerpo se sacude con el poder del simbionte que lo posee, y una energía oscura comienza a emanar de él, distorsionando el aire a su alrededor.
Fénix, viéndolo fijamente, sin miedo: "Muy bien. Has hecho tu elección."
De repente, todo cambia. Fénix, moviéndose con una velocidad increíble, lanza su último golpe seguro. Su puño se envuelve en una luz brillante, llena de una energía que se siente como el poder de toda su voluntad, concentrada en un solo punto.
El golpe conecta directamente con el pecho de Tharos, justo donde reside el núcleo del simbionte. La oficina se desvanece instantáneamente, y la realidad regresa con un tirón violento.
- La Realidad
De vuelta en el mundo real, Tharos es enviado volando hacia atrás, su cuerpo rompiendo el suelo de concreto y haciendo temblar los cimientos del lugar. El simbionte grita en un chillido desesperado mientras comienza a disolverse en humo negro, evaporándose en el aire. Tharos cae al suelo, y el símbolo de su poder se desvanece, muriendo lentamente junto a él.
Fénix cae de rodillas al suelo, jadeando y sangrando, apenas consciente. Sus fuerzas lo han abandonado. Observa cómo el simbionte de Tharos se convierte en humo y desaparece, junto con la figura que una vez fue su enemigo.
Fénix, con una sonrisa débil en su rostro, susurra para sí mismo: "Supongo que así termina... después de todo..."
Con esas últimas palabras, Fénix finalmente sucumbe a sus heridas. Su cuerpo se inclina lentamente hacia adelante y cae al suelo, inmóvil. Un silencio profundo llena el espacio.
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code/fenix
Werewolffenix un lycan de un ejercito lycan que fue destruido hace unos cuantos años es reclutado por una organizacion para que sirva en el frente de batalla