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Capítulo 44: El Fugitivo Part-15

Capítulo 44: El Fugitivo Part-15

Tharos se encuentra en un pasillo oscuro, con el teléfono pegado a su oreja, mientras observa las cámaras de seguridad que muestran un almacén vacío. Su voz suena tensa al otro lado de la línea.

Tharos:
—Fénix, tenemos un problema. El científico... se ha escapado.

La voz de Fénix responde desde el otro extremo, llena de frustración.
Fénix:
—¿Cómo demonios pasó eso? ¡Lo tenías encadenado! ¿Qué clase de idiota deja escapar a un hombre sin una pierna?

Tharos:
—¡Eh! No fue mi culpa, maldición. Parece que alguien le ayudó. No lo sé, pero está libre, y ahora anda por ahí.

Fénix cierra los ojos por un momento, apretando el puente de su nariz, claramente irritado.
Fénix:
—¡Maldición! —Murmura para sí mismo mientras se levanta de la silla bruscamente.

Enid, quien estaba aún en la habitación, observa la reacción de Fénix con curiosidad.
Enid:
—¿Ya te vas? ¿No íbamos a hablar más sobre tu "plan"?

Fénix se gira hacia ella, con una expresión que mezcla cansancio y determinación.
Fénix:
—Tengo algo que hacer.

Enid se cruza de brazos, con una mirada severa.
Enid:
—¿Algo que hacer? ¿Como el genocidio que estás por cometer?

Fénix se detiene en la puerta, su mano sobre el pomo, y responde con un tono frío.
Fénix:
—Es la única manera, Enid.

Sin esperar una respuesta, Fénix sale de la habitación y se lleva el teléfono nuevamente al oído.
Fénix:
—¿Dónde diablos está el tipo, Tharos? ¿Dónde se supone que está ahora?

Tharos se toma un momento para revisar su tablet, que muestra varias pantallas de vigilancia de la ciudad.
Tharos:
—El último lugar donde lo vieron fue en... el centro comercial Mall of Berlin.

Detalles del Centro Comercial: Mall of BerlinUbicación: Leipziger Platz 12, 10117 Berlín, Alemania.Descripción: Uno de los centros comerciales más grandes de Berlín, conocido por su arquitectura moderna y elegante, con una combinación de tiendas de lujo, marcas internacionales y opciones de comida.Características: El centro comercial cuenta con cuatro niveles, un techo de vidrio que permite la entrada de luz natural, múltiples entradas y salidas, y una gran plaza central con una fuente decorativa. Hay pasillos largos y amplios, escaleras mecánicas, ascensores panorámicos y estacionamientos subterráneos.

Fénix se dirige al estacionamiento subterráneo del Mall of Berlin, acelerando en su auto negro, mientras su mente corre con posibles escenarios. Aparca cerca de una de las entradas principales y se baja del auto, con su expresión endurecida. Sus pasos resuenan en el eco del estacionamiento vacío, y la puerta de entrada al centro comercial se abre automáticamente al detectar su presencia.

Dentro, el centro comercial está lleno de gente. Familias, parejas, turistas y trabajadores caminan de un lado a otro, ajenos al caos que podría desatarse en cualquier momento. Fénix observa rápidamente el área, buscando algún rastro del científico fugitivo. El lugar es un laberinto de tiendas, con varios niveles interconectados por escaleras mecánicas y ascensores panorámicos.

Fénix habla en voz baja, a través de un auricular conectado a su teléfono.
Fénix:
—Tharos, dime que tienes algo más. Este lugar está lleno de gente.