Cuatro barras de proteína al año es todo lo que Tessa puede permitirse.
A veces intenta salir de la colonia junto a J en búsqueda de algo que crezca en la naturaleza y que pudiera comer. Por desgracia, todo era venenoso o robótico.
Lo bueno es que se encontró nuevamente con una cucaracha robótica. Es poco probable que sea la misma que tuvo hace tiempo, pero a la humanidad le gusta pensar que es la misma.
Decidió llamarla "Nifty".
A J le aterra Nifty. Según ella, esas cucarachas sirven para limpiar restos de cuerpos de drones muertos, cuyos cuerpos son devorados.
J cuenta cómo presenció a muchas de esas cucarachas comiéndose los cuerpos de sus hermanos murder drones caídos. La primera vez solo tenía meses de haber sido creada, y esto le generó un trauma, pues le aterraba la idea de ser comida por esos insectos.
Aun así, Tessa conservó a Nifty, porque era demasiado útil. Se comunicaba con mensajes, entraba en lugares pequeños, y rápidamente se volvió muy unida a Tessa.
Podrían llamarla insensible, pero considerando que fueron los murder drones quienes mataron a sus amigos frente a ella, y aun así se hizo amiga de una, ya no suena tan mal.
Tessa se alegra de tener a Nifty, pues fue ella quien encontró al nuevo integrante de la familia. Era un murder drone macho, alto y con cabellos suaves y plateados. Además, estaba medio muerto.
No fueron humanos, aunque le doliera; sabía que no hubo ataque que pudiera dejar a un murder drone así de herido.
Estaba solo con su exoesqueleto. Aun así, debería regenerarse, a menos que... le hayan dañado el núcleo.
El núcleo es más que el corazón de los drones; es su todo. Mientras viva el núcleo, vive el drone.
Algunos dicen que los humanos somos solo un cerebro en un traje de carne. Siguiendo esa lógica, los drones son núcleos en un cuerpo de metal.
No pude dejarlo allí. Lo llevé a la colonia con ayuda de J. Fue necesario, ya que los murder drones son demasiado pesados y yo necesito guardar energía.
En el laboratorio pude confirmar mis sospechas.
—¿Por qué le hicieron esto? —preguntó J.
—No lo sé, J. Según la información de su cuello, es un modelo relativamente nuevo. Tal vez... haya sido por su personalidad.
—Tal vez cometió un pecado y este es su castigo.
—Sea cual sea la razón, lo mejor será preguntarle.
Tessa demoró mucho y fue un trabajo arduo. Ocho horas de reparar el delicado núcleo. Un paso en falso y, según el tatuaje de su espalda, N moriría para siempre.
Al final todo salió bien. N logró encender su pantalla y regenerar su cuerpo.
Apenas se encendió, lo hizo de un sobresalto, levantando sus manos con la intención de defenderse de un ataque, y con lágrimas virtuales, gritó:
—¡Perdóname, Z, no me desmanteles! ... ¿Um? —Cuando N se dio cuenta de que Z no estaba, se relajó, y al notar la presencia de Tessa y J, se alegró mucho—. Hola, me llamo N, ¿son nuevas en la colonia?
—Esta no es tu colonia... Te encontramos en la nieve, al borde de la muerte. Logramos repararte, pero casi no la cuentas —explicó Tessa sin rodeos—. Tal vez suene muy repentino, pero, ¿quién es Z?
La sonrisa de N se desvaneció. Sus ojos se achicaron ante el miedo. Abrazó sus piernas, como un niño asustado, y contó:
—Z es mi líder de escuadrón. Un murder drone muy fuerte y orgulloso, en especial porque fue quien mató a la última de los humanos, quien le dio el golpe de gracia y la hizo gritar más tiempo.
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Batalla por Copper 9 || [MURDER DRONES AU]
FanfictionUn AU que responde la pregunta: ¿Qué pasaría si la humanidad fuera el villano en Murder Drones?