35. El rescate de V

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A la mañana siguiente, Uzi estaba terminando de prepararse para ir a la misión para rescatar a V. Aunque ella no estaba del todo segura de que la blood drone fuera del todo inocente, simplemente no podía decirle que no a la carita de perro de N.

—¿Tienes todo listo? —le pregunta a su amigo, mientras carga con un poco de dificultad la maleta—. Y más importante, ¿tus mejoras funcionan bien?

—Si, ya es la quinta vez que me lo preguntas.

—Es que me preocupo por ti.

N se levanta de la cama. Está más alto que antes. También un poco más corpulento en la zona del pecho, por las nuevas armas que Uzi le ha implantado. Las mejoras han sido más internas que externas.

—Lo sé, gracias —dijo N, tomando a Uzi del brazo antes de que el peso de la maleta la haga caer para atrás—. ¿No crees que son muchas cosas para una misión pacífica? La maleta básicamente duplica tu tamaño.

—Si lo pones en ese modo, pues si. Pero, ¿y si V decide no volver? ¿y si es mala de verdad y tenemos que destruirla en el momento? En esta maleta tengo mis mejores armas y finalmente tengo la oportunidad de probarlas.

N rodó los ojos a un lado. Ya le había dicho a su amiga una y mil veces que no habría necesidad de luchar. Sin embargo, Uzi se mantenía desconfiada.

—Se lo que diras, pero como la mayor y jefa de la colonia mientras que papá se encuentra afuera, es mi deber mantenerlos a salvo y no pienso arriesgarme… Y ya puedes soltar mi maleta.

Apenas N soltó la maleta, Uzi lentamente empezó a inclinarse a un lado. Se hubiera caído, si CYN no la hubiera atrapado en el último momento. Su hermanita menor le quitó la maleta y se la puso. Al igual que N, ella relucía varias mejoras hechas por la de melena morada.

—Descuida, hermanita, yo te lo cargo.

—Un momento, señorita. Si crees que dejaré que vayas a una misión tan peligrosa, pues estás realmente equivocada. Además, ¿a quién le has pedido permiso?

—Le pregunté a N y el dijo que podía.

—Será una misión pacífica, no sé por qué no puede ir. Ha pasado demasiado tiempo dentro de la colonia, le hará bien estirar las piernas.

—No quiero que mi hermanita vaya a donde un monstruo… un posible monstruo come drones, ella es prácticamente una bebe.

—Ya tengo ocho años desde que soy una murder drone, e imagino que tuve que pasar muchos antes de pasar por la fábrica. Técnicamente, soy mayor que tú. Uzi, me alegra cuando te preocupas por mi, pero soy una murder drone, no puedo quedarme dentro de los muros sin hacer nada, al menos quiero ir para cuidarte las espaldas… por favor.

Uzi se cruzó de brazos y miró a otro lado. Pero cuando CYN puso su carita de perro atropellado, ella simplemente no pudo resistirse.

—Tsk, esta bien, esta bien, puedes ir —mira a N con mala cara—. ¿Tú le enseñaste eso?

—No se de que hablas.

—Si, claro.

Uzi rodó los ojos y abandonó la habitación, justo cuando N y CYN chocaron puños con complicidad.

Apenas se escuchó que otra colonia había empezado a ser atacada por V, el equipo de Tessa fue de inmediato a la zona en una de las camionetas de las colonias.

N y CYN estaban sentados y con su cinturón de seguridad, mientras que Uzi y J tenían sus armas cargadas en caso de que una amenaza se presentará. Tessa conducía lo más rápido que podía, pues no perdería la oportunidad de recuperar a su hija.

Batalla por Copper 9 || [MURDER DRONES AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora