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En una sala privada y lujosamente decorada, lejos de las cámaras y los focos, Jennie, Rose, Namjoon y Hoseok se encontraban reunidos en una intensa discusión. La tensión era palpable, casi tan densa como el silencio incómodo que a menudo seguía a los intercambios acalorados. Las expresiones de sus rostros reflejaban una mezcla de frustración, miedo y enojo. Cada uno de ellos estaba envuelto en una nube de incertidumbre, tratando de entender cómo su mundo se había desmoronado tan rápidamente.

—Esto no puede ser una coincidencia. —dijo Jennie, cruzando los brazos con una expresión de enojo en el rostro. —Alguien está detrás de esto, y quiero saber quién diablos es.

Su voz, normalmente suave, ahora sonaba cortante y llena de rabia contenida, Rose, sentada a su lado, miraba el suelo, con las manos entrelazadas en su regazo, apretándolas con fuerza. Aunque intentaba mantener la calma, sus ojos delataban la preocupación que sentía.

—Esto es una locura, nunca pensé que algo así podría pasar. —murmuró. —Hemos estado bajo el ojo público durante años, pero esto... Esto es personal, alguien quiere arruinarnos.

Namjoon, quien estaba de pie cerca de una ventana, con los brazos apoyados en el marco, suspiró profundamente antes de girarse hacia los demás. Su semblante reflejaba el agotamiento emocional por el que estaba pasando.

—No es solo que alguien quiera arruinarnos. —dijo con seriedad. —Es alguien que nos conoce, alguien que sabe exactamente cómo hacernos daño, esto no es un simple rumor o una acusación cualquiera; han sabido exactamente dónde golpear.

Hoseok, que hasta entonces había permanecido en silencio, finalmente explotó, golpeando la mesa frente a él con el puño cerrado.

—¡Pero quién! ¡Quién tendría un motivo para hacer esto! —gritó, su voz llena de frustración. —No hemos hecho nada para merecer esto ¡Nos están destrozando sin ninguna razón!

—¿De verdad crees que no hemos hecho nada? Piensa, Hoseok, piensa en nuestros años como estudiantes. —Jennie lo miró con una mezcla de cansancio y enojo. —Piensa en la gente que dejamos atrás, no puedes decir que no hemos tenido conflictos en el pasado.

—¿Qué estás diciendo, Jennie? ¿Cuál es nuestra culpa? —Rose levantó la vista, sorprendida por la insinuación. —Todos hemos tenido problemas en el pasado, pero... ¿Por qué alguien haría esto ahora?

—No es nuestra culpa, pero es ingenuo pensar que no hemos hecho enemigos a lo largo del camino y lo que más me preocupa es que esta persona parece tener un motivo específico. —Jennie apretó los labios, claramente molesta. —Esto no es algo que se haga por capricho, alguien nos odia, y ese odio viene de algo que hicimos, o que piensan que hicimos.

—Jennie tiene razón, esto no es obra de un simple hater. —Namjoon asintió lentamente, cruzando los brazos. —Alguien nos conoce, alguien sabe cosas sobre nosotros que no deberían saber, las acusaciones no son vagas, son detalladas, como si estuvieran reviviendo algo del pasado.

—Pero ¿Quién podría ser? Hemos trabajado con tanta gente. —Rose miró a Namjoon, con una mezcla de desesperación y miedo en los ojos. —Hemos tenido tantas interacciones ¿Cómo podemos saber quién nos odia lo suficiente como para hacer esto?

—Quizás sea alguien que le hicimos una broma pesada. —Hoseok, aún furioso, intentaba encontrar una explicación.—Quizás alguien quiere aprovecharse de este escándalo para destruir nuestras carreras.

—Puede ser. — respondió Jennie, aunque no parecía convencida. —Pero algo me dice que es más personal, alguien que nos conocía de cerca.

Namjoon frunció el ceño, como si una idea comenzara a formarse en su mente.

—No puedo dejar de pensar en alguien... alguien que siempre estuvo cerca, pero que nunca llegó a formar parte de nuestro círculo de manera verdadera. —Mencionó. —Alguien que podría haber guardado rencor con todo lo sucedido.

—¿De quién hablas? —Hoseok lo miró confundido.

Namjoon caminó lentamente por la habitación, como si estuviera construyendo un rompecabezas en su mente.

—Yoongi. —dijo finalmente, casi en un susurro.

El nombre cayó en la habitación como una bomba, los ojos de Jennie se entrecerraron.

—¿Yoongi? —repitió, incrédula. —¿Estás diciendo que Yoongi podría estar detrás de todo esto? Eso es ridículo, no tiene sentido.

—¿Realmente no? —Namjoon la miró directamente. —Piensa en cómo lo tratábamos cuando no nos veía, piensa en cómo lo excluíamos. —los vio. —él siempre fue el chico que no encajaba, lo hicimos nuestro juguete de diversión; lo tratamos mal en más de una ocasión. —suspiro. —No digo que esto lo justifique, pero... si alguien tuviera un motivo para vengarse, sería él.

—Yoongi no haría algo así. —Rose miraba a Namjoon con incredulidad, negando con la cabeza. —Lo conozco, es amable, no tiene ese tipo de resentimientos.

—Quien sí creo que es capaz es alguien más. — dijo Hoseok serio.

—¿Quién? — preguntó Jennie.

— Park Jimin. —dijo molesto. 

Money [YM][✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora