Money [YM][✓]

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El sol brillaba intensamente en un cielo azul claro, mientras los invitados comenzaban a llegar al majestuoso salón de bodas. Todo estaba adornado con flores frescas, luces suaves y detalles dorados que reflejaban el lujo del momento. La música suave sonaba en el fondo, creando una atmósfera mágica que envolvía a todos en un aire de expectación y emoción.

Jimin estaba en su camerino, rodeado de su amigo y familiares que lo ayudaban a prepararse. El traje que llevaba puesto era deslumbrante, un diseño único que acentuaba su figura y le daba un aire de elegancia inigualable. Se miró en el espejo, su corazón latiendo con fuerza, mientras la realidad de lo que estaba a punto de suceder lo abrumaba.

—¡Estás increíble! —exclamó Taehyung ajustando un poco su cabello.

Jimin sonrió, agradecido por el apoyo, pero su mente estaba en otra parte, pensando en Yoongi. En el jardín, los invitados se acomodaban en sus asientos. Las flores eran un espectáculo de colores vibrantes, un mar de rosas blancas y orquídeas que se entrelazaban con el verde fresco de la naturaleza. El altar estaba adornado con drapeados de tela blanca y dorada, y en el centro, un enorme candelabro brillaba como un faro de amor.

Finalmente, llegó el momento. Jimin respiró hondo y salió del camerino, tomando el brazo de su mejor amigo, quien lo acompañaría hasta el altar. Cada paso que daba sentía que el mundo a su alrededor se desvanecía, dejando solo el eco de su corazón y la anticipación de ver a Yoongi.

Al llegar al altar, sus ojos se encontraron con los de Yoongi. En ese instante, el tiempo se detuvo. Yoongi estaba vestido con un elegante traje negro, su mirada intensa y sincera fija en Jimin. Todo el lujo y la opulencia del entorno se desvanecieron, y solo existían ellos dos.

El oficiante comenzó la ceremonia, pero Jimin apenas podía escuchar. Su mente estaba centrada en la conexión que sentía con Yoongi, en cómo todo lo que habían pasado los había llevado a este momento. La promesa de un futuro juntos brillaba en sus corazones. Cuando llegó el momento de intercambiar los votos, Jimin sintió un nudo en la garganta. Abrió su corazón, compartiendo sus sentimientos más profundos, prometiendo amarlo y apoyarlo en cada paso del camino. Las palabras salieron de su boca como un susurro, cargadas de amor y sinceridad.

Yoongi tomó su turno, y sus ojos brillaron con emoción mientras hablaba. Sus palabras eran un reflejo de su propia alma, de su lucha y su deseo de estar siempre junto a Jimin. Cuando terminó, la ceremonia fue un verdadero festín de emociones, y todos los presentes se sintieron conmovidos.

—Los declaro marido y marido. —Finalmente, el oficiante pronunció las palabras que Jimin y Yoongi habían estado esperando.

Jimin sintió una ola de alegría desbordante mientras se acercaba a Yoongi para sellar sus votos con un beso. El primer beso como esposos fue un momento mágico, lleno de amor y promesas. Aplaudidos por sus amigos y familiares, se separaron para sonreír el uno al otro, sintiendo la felicidad brillar en sus corazones.

La celebración continuó en el elegante salón de recepción, donde una exquisita cena y música en vivo envolvieron a todos en un ambiente de felicidad. Jimin y Yoongi bailaron juntos, dejando que sus cuerpos se movieran al ritmo de una balada suave. El mundo a su alrededor se desvaneció una vez más, y en ese instante, solo existían ellos.

La noche continuó con risas, brindis y momentos inolvidables, cada detalle estaba cuidadosamente pensado, desde el pastel de bodas hasta los recuerdos para los invitados. Pero nada podía compararse con el amor que irradiaban Jimin y Yoongi.

Cuando llegó el momento de cortar el pastel, Jimin miró a Yoongi con complicidad. Sabía que había encontrado a su pareja perfecta, y en ese día de lujo y amor, todo lo que realmente importaba era que estaban juntos. Y así, mientras la noche avanzaba, Jimin y Yoongi se sumergieron en el brillo de su amor, disfrutando de cada instante en su día especial, sabiendo que el lujo de la vida juntos apenas comenzaba.