Sujeto por un brazo, ayudé a Neniu a llegar a la salida, y apenas sus pies cruzaron el umbral de la arboleda, la luz volvió a sus ojos, y su espalda encorvada se irguió.
— han vuelto…
Admitió cerrando los ojos, demostrando mucha paz en su rostro.
— me alegro que ya estés mejor. No sé cuánto recuerdes, pero digamos que estamos muy adelantados, nos hubiera costado todo un día atravesar el bosque, pero tal parece que llegamos al lado contrario tras solo un par de horas.
Dirigiendo la mirada hacía al frente, Neniu fijó su mirada al cielo, y como pronto va a amanecer.
— Cortamos mucho camino… Las voces hablan, las voces claman… pero ahora hay que descansar…
Asintiendo, no había escuchado una mejor idea en mucho tiempo. Aunque el tiempo que nos hubiera tomado cruzar el bosque se debió acortar cerca de la mitad por el poder del Aeon, fácilmente debimos estar cerca de 4 horas caminando muy de madrugada, por lo que tengo hambre, pero por sobretodo tengo sueño.
Mirando a mi peculiar compañero, le solté una broma mezclada con petición.
— Oye, ¿tus voces no nos pueden decir de un lugar para descansar?
— Si…
Solto el Shaman para mi sorpresa, y señalando un lugar a la distancia, pude ver la silueta de una construcción.
Avanzando en dirección a los edificios, que también era la dirección para ir a la ciudad, pude distinguir el esqueleto de un asentamiento, eran unas 5 o 6 construcciones de madera ya muy viejas y casi en ruinas, sin embargo, había una que se mantenía en un estado decente, quizás siendo usado como refugió para los cazadores.
Seguida por Neniu, entramos a la única casa que se mantenía bien, y encontrando algunas herramientas para desollar pieles, junto a varios frascos medio llenos y llenos de telarañas en la despensa, que me confirmó que efectivamente, era un refugió para cazadores y estos no habían venido en un tiempo.
Afuera, ya había amanecido, pero con lo agotada que estaba, aquel catre sucio y mohoso en la esquina del refugió, se me asemejaba a un colchón plumas.
— Quiero dormir un poco…
Le dije a Neniu, que revisaba las herramientas del lugar, e incluso el pequeño montón de huesos que había cerca de la chimenea.
— Creo que podré reponer parte de mis abalorios… pero debo revisar los alrededores por más ingredientes…
Murmuró el shaman mientras con su cuchillo, procedía a arrancarle los colmillos a un cráneo de lobo.
— Date gusto…
Le respondí al shaman mientras me tiraba en el catre. Estaba física y mentalmente agotada, por lo que no tardé nada en quedarme dormida.
***
Cuando el sonido de un relinchar me despertó, encima mío, había un techo diferente.
Si… esta frase ya es un cliché para este punto, ¿pero qué más puedo hacer cuando es la verdad?
Levantándome del catre con el cuerpo entumecido, por la luz que filtraba me di cuenta que ya debía ser más del mediodía, quizás por las 2 o las 3, por lo que habré dormido 7 u 8 horas de corrido.
Tras ponerme de pie, miré a mi alrededor para buscar a Neniu, y aunque no lo vi a él, pude ver que es lo que estaba haciendo.
En una mesa vieja y destartalada, cuya única cualidad era tambalearse, Neniu había estado trabajando, posiblemente haciendo los abalorios de los que me habló.
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Intentos Infinitos "2"
RandomContinuación de Reencarne como una villana con Intentos Infinitos.
