2. Mentiras Piadosas.

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<Flashback (Freddy)>

- Anda Laura, nada más un poquito. -Se encontraba Freddy insistiéndole a su amiga-

- No. Ya te dije que no.

- Por favor. Hace mucho que no haces nada lindo por mí y se supone que somos mejores amigos.

- Sí, pero eso no lo voy a hacer. Es inapropiado.

- No seas mojigata, como si nunca lo hubieras hecho antes.

- No me digas así, baboso.

- Bueno entonces te diré Ralua por el resto de tu vida.

- Que no me gusta que me digas así.

- Entonces acompáñame.

- ¿Tú? ¿Alfredo Pacheco queriendo saltarse el resto de las clases?

- Sólo hoy y ya. Aparte vamos súper bien en estas materias, no nos va a afectar en nada una falta.

- Tú vas bien, porque le entiendes. En cambio yo con trabajos alcanzo el siete.

- No seas mentirosa. Llevas ocho y nueve porque yo siempre te ayudo a estudiar o te paso las respuestas de los exámenes. Soy buen amigo y tú no me quieres acompañar.

- Ve tú solo.

- Me da pena, acompáñame.

- Ash, te aprovechas porque te aprecio, idiota... Pero está bien Diddy.

- Yo también te aprecio, te quiero y te adoro, ahora más. Pero no me digas así.

- Diddy, Diddy, Diddy...

<Fin de Flashback (Freddy)>


Al siguiente día de nuestra primera conversación no pude evitar sentir las ganas de volverte a ver. Le rogué a Laura para que me acompañara por si no te encontraba no quedarme solo.

Yo no creo en el amor a primera vista, porque pienso que para realmente amar a una persona tienes que pasar tiempo con ella, conocerla a la perfección y otras cuantas cosas más. Pero sí creía en la atracción que sentía por ti, esa que me obligaba a buscarte hasta por debajo de las piedras si era necesario para siquiera decirte hola y escuchar tu dulce tono de voz.


<Flashback (Freddy)>

- ¡No inventes! Freddy, no inventes. ¿Ya viste quién está ahí?

- ¡No es cierto! –Exclamó sorprendido cuando vio a la persona que su amiga señalaba- ¿Sí es?

- ¡Sesé! -Gritó Laura para llamar la atención de un chico que pasaba-

- Ralua... Diddy.


Reaccionó el muchacho de mediana estatura. Era guapo con sonrisa inusual, tenía unos ojos penetrantes color café adornados con lindas y enormes pestañas, aparte de cejas tupidas. Tenía cabello café oscuro que en ese momento estaba cubierto por un gorro color negó.


- Hermano, moríamos por volver a verte. -Le dijo Freddy-

- Pue no te mueras porque ya estoy aquí de nuevo. Llegué ayer.

- Te extrañábamos, idiota. –Laura reclamó- Pudiste llamar para contarnos cómo te iba en Mazatlán. ¿Casi un año sin vernos ni saber nada de ti te parece justo?

Y a pesar del tiempo... *CD9*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora