Please Remember Me

Esto no esta pasando

–Eres tú, mi querido lobo.– ya no lo soportaba, tenia... necesitaba.. requería tener cerca a Christopher, no podía seguir sin él, lo ama demasiado como para simplemente negarse a estar con Chris.

Por desgracia el lugar donde él había salido en boxer, gracias a la intromisión del castaño, era una simple bajada que llegaba directo al río.

También tuvo que ver que en lugar de ser civilizado y hablar con él se le había lanzado sin importar que.

No esperaba encontrar desnudo a Christopher, menos que el castaño supiera donde estaba pero ahora... ahora estaba con Christopher a su lado y lo mejor de todo era que Chris lo conocía, el sabía que existía.

Pronto se arrepentirá de alguna forma de haberse mostrado ante el hombre, su lobo demandaba estar presente en ese momento.– eres realmente bello.– menciona Chris tanteando la aspera barba del lobo, aunque la había esperado más gruesa inclusive un poco más rígida, era todo lo contrario era suave, delicada al tacto .– ¿donde has estado todo esté tiempo?– necesitaba conocer, requiere saber si el lobo vive cerca de él, había deseado tanto ese encuentro que simplemente ahora sabe que no era un sueño, que eso estaba pasando realmente.

– yo...– no quería, no podía tomar a Christopher en ese lugar, no porque se le hiciera un mal sitio, no podía permitir que Christopher pensara que era un maldito lobo sediento de deseo Carnal, que en parte lo era pero sus más bajos instintos solo le pertenecían a aquel que tenía enfrente.

Y esos solo los conocería una vez que estén juntos, sin alguien interfiriendo, sin alguien impidiéndole estar juntos.– yo lo siento..– murmura alejando su rostro del tacto de Christopher, no podia marcar algo que no le pertenecía, algo que ya estaba declarado de alguien más.

– ¿por que?.– no entendía las negativas del lobo, sus encuentros siempre habían sido más necesitados, con una necesidad de marcar... de poseer la piel del otro.– ahora estás aquí... no tienes porque sentirlo... solo tienes q...

– ¡NO!– interrumpe, no podía se iba a descontrolar.– tienes que irte yo... no... solo vete.

Podía asegurar lo que le pasaba al lobo, no comprendía el porque se contenía, el mismo deseaba que el lobo lo marcará, como tantas veces lo había dejado deseando en sus encuentros.

– ven.– menciona acercándose el al lobo, necesitaba probar... necesitaba saber si los labios ajenos eran tan exóticos como los había soñado.– eres un lobo bastante cabezota.– dice posando sus manos sobre las mejillas del lobo, necesitaba que le marcará que dejara un pequeño recuerdo de que él existe.

– por favor so... solo vete no qui...– necesitaba probar esos labios, ya no podía seguir despertando noche tras noche en espera de que él aparezca.

Necesitaba saber si ese sueño era tan real como lo sentía su cuerpo, tantas noches despertar ligeramente exitado, ligeramente deseoso de sentir el tacto de alguien sin rostro.

Ahora lo veía, era tan bello como lo había imaginado, era simplemente alguien con quien desearía pasar el resto de su vida.

Alguien que apesar de las miradas en reprobación tenga la suficiente valentía y dedicarle un "estoy aquí contigo"

Sería suficiente con esas palabras, al final serían ellos dos, al final sería un eterno comienzo.

– sabía que tus labios eran los sabían a sandía.– tantas veces despertaba con ese único sabor, sabía que ese no era propio de su esposa, tampoco de su hija con los pequeños brillos labiales.