Cuando salieron de la enfermería y comenzaron a caminar por el pasillo hacia la salida, varios reclusos se les quedaron mirando.
Todos hubieran deseado estar en el lugar de Tyler y poder salir de aquel lugar aunque solo fuera durante algunas horas.
Se sentía un poco incómodo caminando con las manos esposadas hacia atrás, pero no tenía mas opción que soportarlo. Mientras que la doctora Keller caminaba a su lado, el oficial de policía los seguía a ambos un par de pasos mas atrás, observando al castaño con atención.
Al mas mínimo movimiento brusco de Tyler, el oficial estaba preparado para hacer lo que fuera necesario para evitar cualquier intento de escape.
Pero el castaño no era tonto, no tenía pensado irse a ningún lado. Hubiera sido imposible correr lo suficientemente rápido con las manos esposadas en la espalda y el policía también estaba armado. Ni siquiera tendría sentido intentarlo.
Justo antes de la salida, había varios oficiales y una amplia oficina. La doctora entró en ella y volvió a salir varios minutos después, seguida por un oficial con varias condecoraciones en su uniforme. Probablemente tuviera un rango mucho mas alto que la mayoría de los policías que habían allí.
El hombre observó a Tyler de arriba abajo con seriedad. Toda su postura, tan erguida y correcta, inspiraba respeto.
El castaño tragó saliva, nervioso.
El comisario pareció notarlo, pero su gesto no cambió. Quitó la vista de Tyler y la posó sobre uno de los policías que se encontraban frente a la gran puerta de metal sosteniendo un arma de alto calibre, y le hizo una señal con la cabeza.
El policía asintió rápidamente, y abrió la puerta, haciéndose a un lado.
Los rayos de sol alcanzaron la cara de Tyler, quién entrecerró los ojos. Hacía varios días que no veía la luz del sol por lo que la repentina exposición a la claridad del día hizo que sus ojos dolieran.
La doctora agradeció a los oficiales con una de sus acostumbradas sonrisas, y salió de la prisión seguida por Tyler y el policía.
Caminaron por un sendero hasta una gran reja de hierro, que se abrió con un ruido metalico luego de un par de segundos, al parecer manejada remotamente desde algún otro lugar.
Fuera, había una camioneta esperando.
El policía subió en la parte del conductor luego de encerrar al castaño en la parte de atrás, y la doctora ocupó el lugar del acompañante.
Aunque no había ventanas en la parte trasera de la camioneta y a pesar de los barrotes que lo separaban de la parte de adelante, Tyler aún podía observar el camino por el parabrisas.
La prisión estaba en un lugar alejado de la ciudad, por lo que solo logró ver muchos árboles y campo al principio, pero pronto comenzó a ver casas y, un poco mas tarde, edificios.
Treinta minutos casi exactos les tomó llegar al hospital, que se encontraba en la zona céntrica de la ciudad.
Al descender de la camioneta, no pudo hacer mas que observar fascinado los alrededores. Había olvidado lo que se sentía estar en medio de tantas personas. Todo lo que se podía ver eran edificios y casas a diestra y siniestra, ni un solo centímetro de campo.
Algunas personas que pasaban por su lado lo miraron de forma extraña. Tyler distinguió un destello de miedo en sus ojos.
No los culpaba, él también tenía miedo de sí mismo.
La doctora dio un par de pasos en dirección a la puerta del edificio, pero se detuvo cuando notó que el policía tenía planeado acompañarlos.
—No es necesario que vengas —aseguró— Está esposado de todas formas, estoy segura de que no intentará nada.
—Lo siento doctora, pero es peligroso y tengo órdenes de no quitarle la vista de encima —informó el policía.
—Lo entiendo, pero yo puedo hacerlo —dijo, cambiando su tono amable por uno mas frío— No quiero causar incomodidades entre los pacientes, y las personas tienden a ponerse nerviosas cuando ven policías.
—Kate... —El policía la llamó por su nombre, con cara de desaprobación.
—Es doctora Keller. Y solo necesito que esté aquí en dos horas, cuando termine con los exámenes. Puede hacer lo que quiera mientras, tómese un café, haga algo interesante, yo puedo encargarme de esto sola —espetó ella con firmeza y comenzó a caminar hacia la puerta del hospital, sin permitirle decir nada más.
Tyler observó la expresión derrotada del policía y siguió a Kate, entrando por la puerta detrás de ella.
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Capítulo dedicado a tysh_muke por adivinar la referencia en el cap anterior 💕
En este no hay referencia, así que no busquen :v
Disfrutenlo, nos leemos en el siguiente ❤
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Abuse [JOSHLER]
FanfictionTyler es inocente. O eso es lo que él afirma, una y otra vez. No importa cuantas veces le describan con exactitud cómo mató a aquella chica, él no lo recuerda. Sigue insistiendo en que el culpable es el otro, el que toma control de su cuerpo cuan...