I M A G I N A S. #2 [EDITANDO]

The Avengers Imagina. (Steve Rogers) #1

El día había amanecido soleado. Hacía buen tiempo, lo que invitaba a dar un paseo. 

Iba caminando por la calle, disfrutando de mi día libre, cuando sin previo aviso, algo cayó del cielo. El impacto con el suelo provocó un ruido estruendoso, y el shock inicial dio paso al caos. 

La gente corría de un lado a otro sin cuidado alguno. Se empujaban entre ellos, intentando ponerse a salvo. No entendía de qué estaban huyendo, ¿qué es lo que había caído del cielo? 

Alguien se choca conmigo, haciendo que me caiga al suelo. Cuando levanto la mirada veo de lo que están huyendo. 

Un monstruo gigante ocupa la carretera, de él bajan seres que nunca había visto. 

Lo que quisieran que fuesen esas cosas, destruyen sin piedad todo lo que tienen delante. Una de ellas me ve y se acerca peligrosamente a mi. Cuando está lo suficientemente cerca de mí, echa hacia atrás su brazo y alcanza algo que tiene en la espalda. Al volver su brazo, veo que lo que ha cogido es un arma puntiaguda. 

Intento pensar con coherencia, pero no consigo moverme. Lo único que puedo hacer es cerrar los ojos y esperar que todo acabe rápido. 

Los segundos pasan, pero no recibo ningún impacto. Nada me toca, ni tampoco siento dolor alguno. Cuando abro los ojos, tengo delante al Capitán América agachado protegiéndome con su escudo. 

Una vez para el golpe, se levanta y con un movimiento de su brazo, le arranca la cabeza con el escudo. 

Miro horrorizada y con asco como lo que quería matarme cae hacia atrás. El miedo sigue conmigo incluso cuando el Capitán América me lleva a una zona segura, donde me deja con más gente que está sacando a los civiles de la zona. 

—Buen día, señorita. —Se despide con una sonrisa. 

El Capitán América se aleja de mí, y corre directo hacia donde la acción estaba ocurriendo. 

Alguien tosiendo de manera exagerada hace que vuelva a la realidad. 

Estoy en la oficina, a salvo. 

Mi jefa me mira fijamente, esperando una respuesta. Entonces me acuerdo del artículo que se suponía que tenía que entregar esta tarde para llevarlo a maquetar con el resto de noticias. 

Ella suspira, y después se sienta en la silla que tiene delante. 

—Creo que deberías tomarte unos días libres. —Dice con un tono tranquilo. 

—No puedo, tengo que terminar este artículo y tengo varios más empezados. —Contesto. 

—Termina el artículo de esta tarde y después vete a casa. —Ordena. — Soy tu jefa, pero también soy tu amiga. 

Ahora soy yo la que suspira. 

—Hace menos de 32 horas que casi te matan. —Me recuerda. — Y encima no una persona, sino un... Lo que fuese eso que nos atacase. 

Asiento, intentando bloquear los recuerdos. Ella sonríe y se levanta, antes de que salga de la oficina continúo escribiendo. 

Una hora después, termino el artículo y lo dejo en su despacho. 

Salgo del edificio, abrochándome la chaqueta al notar el viento frío. Camino sin mirar por donde voy, por eso, cuando me choco con alguien no me sorprendo tanto como lo haría normalmente. 

—Perdón. —Me disculpo levantando la mirada. 

—No te preocupes. —Contesta.

Los dos nos quedamos quietos. Al ver que ninguno hacemos el amago de irnos, decido presentarme. 

—Me llamo (A/N). 

—Steve. —Dice con una sonrisa. 

Le miro fijamente durante lo que parecen horas, y, entonces, me doy cuenta de por qué me suena tanto. 

—Me has reconocido. —Habla Steve sin dejar de sonreír. 

—Sí. —Susurro. — Nunca tuve la oportunidad de agradecértelo, así que, gracias. 

Él asiente sin dejar de mirarme. 

—¿Quieres ir a tomar un café? —Pregunta tras un largo silencio. 

Le miro incrédula. 

—Lo siento, no quería incomodarte. —Se apresura a decir. 

—No, no. —Le contesto. — Me encantaría tomar un café contigo. 

—Genial. 

—Pero invito yo, algo tengo que hacer para agradecerte que me salvases la vida, y la de muchos otros. —Digo empezando a andar hacia la cafetería que hay delante del edificio donde trabajo. 

Steve se ríe, y entablamos una pequeña conversación mientras caminamos el uno al lado del otro.