I M A G I N A S. #2 [EDITANDO]

Teen Wolf Imagina. (Scott) #4

La primera vez que Scott me dijo que podíamos quedar cuando yo quisiera menos los días de luna llena me hizo gracia. 

Pensé que era una broma hasta que vi su cara seria. 

Después de un año saliendo con él, todavía tenemos esa norma de no vernos en luna llena. 

Siempre bromeo con que es un hombre lobo y que si nos vemos me dará un mordisco. 

Y al igual que la primera vez que bromeé sobre no quedar los días de luna llena, fui la única que se echó unas risas. 

Llamo a la puerta y ésta se abre. Frunzo el ceño y saco el móvil por si tengo que llamar a alguien. 

—¿Hola? —Digo mirando con cuidado a todos los lados. 

Paso al salón, a la cocina y por último subo por las escaleras. 

Parece ser que Melissa se ha ido a trabajar y Scott al salir se ha dejado la puerta abierta. 

Aún así, decido pasarme por todas las habitaciones por si a caso. Las puertas están abiertas menos una, la de la habitación de Scott. 

Trago saliva y abro la puerta con lentamente. 

Cuando entro a la habitación lo que veo no es lo que me esperaba. 

—¡No es lo que parece! —Dice Scott mirándome 

Me le quedo mirando fijamente. 

Mi novio está sentado en el suelo, al lado del radiador. Sus manos están puestas de tal forma que no puede soltarse ni aunque intente quitarse las esposas. 

—Osea que no quieres quedar conmigo en luna llena porque te dedicas a atarte a radiadores. —Digo seria. 

—¡No! —Grita. — Esto ha sido idea de Stiles. 

—Oh, y ahora Stiles y tu tenéis una especie de affair en los días de luna llena. —Bromeo. 

Intento mantener la expresión seria, me encanta la cara que tiene Scott ahora mismo. 

Él intenta explicarse y yo empiezo a reírme. 

—Tranquilo, no va en serio. —Le interrumpo. —Pero me tendrás que explicar el por qué de eso... —Susurro señalándole. 

—Vale, sí. —Me contesta medio sonriendo. — ¿Me ayudas? —Pregunta mirándose las manos. 

Busco la llave pero no la encuentro. Así que me acerco a él y me siento a su lado.

—Pues va a ser que hasta que no venga Stiles no vamos a salir de aquí. —Digo riéndome.