I M A G I N A S. #2 [EDITANDO]

Spiderman Imagina. (Peter -Andrew-) #2

Mi día había empezado mal. El despertador no sonó, me desperté de milagro media hora antes de que empezasen las clases y al llegar el profesor de ciencias no me dejó entrar en su clase. Y, por si fuera poco, durante esa clase iban a resolver dudas para el examen del viernes.

Pensé que mi día no podía ir peor. Qué ilusa.

Durante el descanso Ashley, una compañera de la clase de ciencias, me estaba dando los apuntes que había tomado sobre las dudas del examen hasta que mi mejor amiga Rita apareció corriendo junto a más alumnos a la cafetería.

—¡Tenemos que salir de aquí! —Gritó Rita cogiéndome de la mano.

El caos no tardó en llegar, y todos los alumnos que estaban disfrutando de sus almuerzos, se levantaron presas del pánico y siguieron a los demás fuera del instituto. Ashley y sus apuntes incluidos.

—¡Para! —Grité mirando como mi esperanza de aprobar ciencias salía por la puerta de la cafetería.

—¡(A/N)! —Dijo Rita. — ¡Hay un maldito lagarto atacando a todo el que se le pone por delante!

Y así, es como he llegado a la situación que estoy viviendo ahora mismo.

—¿Que hay el qué en el instituto? —Pregunto sin dejar que Rita tire de mí hacia la salida.

—Un lagarto gigante. —Responde desesperada. — ¿Quieres quedarte a verlo?

—No, pero sí que quiero coger mi libro de ciencias.

—¿Estás loca? —Grita.

—Tampoco, pero necesito aprobar ciencias, y el libro está en mi taquilla. —Me defiendo.

—Salgamos de aquí, ¡ya!

—Ve, espérame fuera. —La animo. — Seguro que no me encuentro con ese lagarto gigante.

—Olvídate del libro.

—Sal fuera, yo te sigo en cuanto tenga el libro. —Digo mirándola.

Rita me suelta, dándose por vencida. Después me abraza y corre hacia la salida de la cafetería.

Corro hacia el pasillo donde está mi taquilla. No es que no me crea lo del lagarto, pero el lagarto solo va a estar un día en el instituto, a mi me quedan cuatro meses más para terminar el curso y si ciencias cae yo no me gradúo.

Además, seguro que el lagarto es una serpiente gigante que alguien ha confundido presa del pánico.

Llego a mi taquilla y la abro sin demorarme ni un segundo más.

Y aquí es cuando llega lo peor del día.

Oigo muchos golpes, como si alguien o algo se estuviese chocando contra las paredes.

Decido darme prisa, porque no voy a ser yo la que muera a manos de una pitón.

Cojo el libro y cierro la taquilla, entonces, cuando me giro para correr hacia la salida, lo veo. Resulta que sí hay un lagarto gigante en el instituto.

—Hola. —Saludo sin saber por qué.

El lagarto no responde, como era de esperar. Pero sí que chilla, o lo que sea que hacen los lagartos gigantes.

Doy media vuelta y empiezo a correr Dios sabe a dónde.

Miro hacia atrás para ver si me está siguiendo. Puedo oírle, pero no verle. Cuando vuelvo a mirar hacia delante, me choco con algo.

Grito con todas mis fuerzas, asustada de que sea el maldito lagarto gigante.

—Tranquila, soy Spiderman.

Levanto la mirada y en efecto, es Spiderman.

—Oh, gracias a Dios. —Susurro. — Hay un lagarto gigante, no una pitón.

—Claro... —Murmura sin entenderme. — ¿Estás tú sola?

—Sí, estoy sola.

—Voy a lanzarte por la ventana.

—¿Qué? —Pregunto notando como coloca sus manos sobre mis caderas.

—Una, dos y... ¡Tres!

Al terminar de contar, me lanza por la ventana tal y como había dicho. Grito como si no hubiera un mañana. Cierro los ojos, pensando que Spiderman acaba de lanzarme por una ventana sin pensar que lo que me espera es el suelo y no una cama.

Pero, para mi sorpresa, acabo colgada de unas telas de araña a escasos metros del suelo.

Update 2020: he reescrito este imagina, tiene la misma idea principal que escribí allá por el 2018/2019, con la diferencia de que creo que este está mucho mejor que el anterior.