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Narra Cleo:

Regresamos a casa después de dos días en el hospital, los niños estuvieron sometidos a muchos chequeos y estudios porque nacieron antes de los nueve meses, pero todo está en orden y según los médicos no hay nada de qué preocuparse. Le rogué a Luke que organizáramos un almuerzo de bienvenida para los niños, pero él dijo que se encargaría de hacer algo poco escandaloso a pesar de que nuestra familia se hace cada día más y más numerosa; incluso quería que mi padre esté aquí para conocer a sus segundos nietos, quienes se apresuraron y nacieron antes de lo esperado.

Luke me ayudó a extender el mantel, él estaba encargándose de preparar la carne a la parrilla mientras yo trataba de cuidar a los niños y no perder la cabeza porque no han dejado de llorar al menos por un lapso de diez minutos seguidos. Y ambos comienzan al mismo tiempo, ambos se detienen al mismo tiempo... parecen estar sincronizados por algún tipo de fuerza sobrenatural. Asumo que es un don de gemelos.

Vestí a Eric antes que a Matheo, le coloqué un overall que su madrina le obsequió unos días atrás en el baby shower y sus adorables mediecitas, lo último que necesitamos es a uno de los gemelos enfermos porque generará el efecto espejo y todo será caos en nuestra casa. El siguiente fue el mayor de los gemelos, a quién le coloqué un adorable pijama bastante similar al de su hermanito con mediecitas repletas de ojitos; decidí envolverlos en mantitas para evitar un sermón por parte de mi madre, ella enloquecerá si ve que descuido la salud de mis bebés a tan pocos días de haber nacido.

Estoy sorprendida de lo maravillosa que puede ser la genética, sorprendida de lo que surgió después de mezclar mis genes con los de Luke. He creado arte, me siento como Nikola Tesla cuando descubrió la corriente alterna o cuando inventó el magnífico control remoto, ahora sé como debió sentirse Miguel Ángel después de crear todo ese arte. Siento que mis hijos son el tesoro más importante que tengo en la vida, ellos y Luke son mi oxígeno.

Puede que no haya descansado bien en los últimos dos días, puede que no haya pegado un ojo durante horas en un intento fallido por hacerlos descansar, alimentarlos o simplemente quitarles el hipo. Son lo mejor que me ha pasado, han cambiado mi forma de ser y de pensar... antes creía que las madres actuaban neuróticas cada vez que enloquecían por el bienestar de sus hijos, pero ahora puedo comprenderlas a la perfección, puedo comprender ese sentimiento que tienes cada vez que uno de tus bebés llora o no deja de moverse.

— ¿Quieres? —Luke me ofreció un poco de zumo, asentí con mi cabeza y tomé el vaso que estaba extendiéndome. — ¿Recordaste tomar las odiosas pastillas de hierro? No quiero que algo malo te pase.

—Nada va a pasarme, tontín —Bufé, dejando salir una risita mientras lo besaba en los labios. —Y sí, de hecho ya las he tomado hace un largo tiempo. ¿Estarás encima de mí todo el día?

—Estaré encima de ti no sólo para recordarte que tomes tus pastillas —Él habló en un tono juguetón, mordisqueando el lóbulo de mi oreja. Aprovechamos que los niños estaban quedándose dormidos y nos tomamos un tiempo para nosotros. —Sé que no hemos tenido mucho tiempo para nosotros, no quiero que sientas que estoy abandonándote o algo así... sólo quiero que recuerdes que cuando te sientas mucho mejor, volverás a llamarme daddy como en los viejos tiempos.

Volqué mis ojos.

— ¿Qué tal si no quiero llamarte daddy? —Enredé sus pequeños rizos en mi dedo índice, le permití que me colocara sobre el mesón de la cocina a la vez que nuestros labios se rozaban con pasión. — ¿Qué tal si ahora quiero llamarte Luke?

—Voy a castigarte, ¿Lo recuerdas? Las chicas buenas son recompensadas, las chicas malas son castigadas —El rubio murmuró, besando mi cuello bajando directo hacia mis clavículas. Está succionando la zona y mordiéndola, su lengua dibuja patrones circulares sobre mi piel y aquello me trae muchísimos recuerdos. —Te extraño como el infierno, Cleo. ¿Podemos llamar a nuestros invitados y decirles que no vengan porque los niños están vomitando?

daddy ; luke hemmings [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora