daddy ; luke hemmings [1]

043.

Luke vendó mis ojos y me obligó a caminar con esto puesto, decidí confiarme de él y sus fuertes brazos los cuales estaban rodeando mi cuerpo. Aqua descubrió que mis vómitos habían sido causados por algún tipo de comida que ingerí en mal estado y me dio unos cuantos analgésicos para quitar la inflamación que había dentro de mi estómago.

— ¿Recuerdas que una semana atrás me dijiste que San Valentín no era algo importante para ti? —Me preguntó, asentí con mi cabeza a la vez que fruncía mi ceño. —Bueno, espero que estés lista para tener una cita conmigo por San Valentín a la luz de las velas en la ciudad de Miami.

Él apartó la venda de mis ojos, permitiéndome una vista perfecta al océano atlántico, las lejanas estrellas en el cielo azul oscuro y su bonito rostro detrás de la tenue luz. Estaba apenada por vestir tan desfachatada para una cita tan especial como esta, él había conseguido que me sintiera especial en la última semana de nuestras vacaciones... antes de que todos debamos regresar a la monótona y aburrida rutina.

Calum y Aqua habían ido a cenar por su aniversario, tal parece que ellos dos estaban a punto de comprometerse o eso fue lo que conseguí oír por parte de él. Me mantuve los últimos días diciéndole a Luke que no me parecía para nada interesante San Valentín, porque es una cosa comercial que no te hace mejor o peor pareja por ignorarlo... aunque muy en el fondo estaba esperando una sorpresa por su parte.

— ¿Y bien? —Él me preguntó, destapando el champán. Le obsequié una sonrisa, indicándole que no me sirviera demasiado. — ¿Te han gustado las vacaciones?

—Han estado geniales —Contesté, apoyando mis manos sobre la mesa. —No creí que conocería tantos estados en tan poco tiempo... ¡Estados Unidos tiene mucho para dar!

—Lo sé, adoraría vivir aquí o comprar una casa para escabullirme de la rutina cuando sea necesario —El rubio soltó, bebiendo de su copa. —Hay momentos en los que sólo quisiera huir con mi chica lejos del resto.

—Pero eso es técnicamente imposible con nuestros trabajos y familias —Bufé, haciendo un puchero con mis labios. —Sin contar que tendrás que comenzar con las cosas del ADN una vez que tu hijo con Azealia nazca...

—No tengo ánimos para hablar sobre ese tema, Cleo —Se quejó, una mueca de disgusto se dibujó en su rostro y me sentí terrible por haber arruinado nuestro preciado momento pero algún día tendríamos que discutir sobre esta situación. —Me siento mucho mejor ignorándolo por completo y tratando de olvidar mis errores. Tan solo desearía morir y que todos dejaran de echármelo en la cara.

—Lo siento, bebé. Pero necesitamos tener una conversación sobre esto cuanto antes —Exclamé, acariciando sus nudillos. —Si ese niño llegara a ser un Hemmings como todo el mundo dice, no tendría problema alguno en el que tú te hicieras cargo de él. Es tu hijo después de todo, ¿Por qué crees que esto arruinará nuestra situación? Te amo y te amaré sin importar lo que ocurra, cualquier individuo puede cometer errores.

—Te amo muchísimo princesa y sé que no te importará, pero las cosas no se sentirán iguales entre nosotros si un bebé llegara a mi vida —Él confesó, desviando la mirada hacia el mar. —Siempre soñé que tendría hijos con mi esposa no con una de mis ex novias.

—Lucas, escúchate —Bufé. —Suena como si no confiaras en mis palabras, te amo más que a nada en el mundo... y si el niño fuera tu hijo no puedes abandonarlo así como así por mi culpa. Tienes que ser un padre y hacerte cargo de él, es lo mínimo que aceptarán tus padres.

—Dos cosas —Él me interrumpió. —No estamos seguros de si será un niño o una niña, y segundo... no estamos tan seguros de que es un Hemmings.