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Me pongo de pie y me dirijo hacia Dominic.

El baño es blanco, hay una adaptación a la altura de una barra americana de desayuno más o menos, donde reposa un par de mini jacuzzis en formas de lavabos pero más grandes y más hondos, uno en color rosa y el otro en color azul, a cada lado de estos hay un cambiador donde en el suyo Dominic le está quitando la ropa a Damon, empiezo a hacer lo mismo con Sofia.

—¿Cómo sabes si la temperatura del agua es la correcta? —le pregunto.

—Estos jacuzzis para bebés son lo más nuevo en tecnología de empresas Winter en zona de electrodomésticos y novedades, hay un control remoto donde le pongo los meses del bebé y estos se llenan de agua a una cierta altura y a la temperatura adecuada.

—¿Y eso es seguro?

—Por supuesto. ¿Tú crees qué si no lo fueran los habría instalado en mi casa para nuestros hijos?

—Bueno, si tú lo dices. —Termino de quitar la ropa y el pañal desechable de princesas a Sofia y no confiando del todo toco el agua antes de meterla sosteniendo su cuerpo y su cabeza como Dominic lo hace con Damon. En lo que divide de espacio a los dos jacuzzis se encuentran varias botellas de todo tipo de productos para bebé, jabón neutro en liquido, shampoo, talco, loción, cremas, en realidad hay de todo. Emito cada movimiento de Dominic, con el jabón neutro hago espuma en la delicada piel de mi bebé y luego la retiro con agua del mismo jacuzzi, hago lo mismo con su pequeño cabello negro. Está muy tranquila disfrutando de su baño, le hablo en todo momento como si ella de verdad estuviera poniéndome atención, no aparta su vista de mí en ningún momento. Con cuidado y con práctica Dominic envuelve a Damon en una suave toalla blanca y lo acuesta de nuevo en el cambiador, supongo que Dominic ha presionado un botón para que los jacuzzis comiencen a drenar el agua.

Seco todo el cuerpo de Sofia asegurándome que no le quede humedad en su piel y eso le pueda causar alguna irritación, le pongo talco en su pecho y cuello para que huela rico, de por si los bebés ya tienen un olor peculiar pero si a esto le sumamos la cantidad de cosas de higiene personal que Dominic les ha comprado, entre todas causan un olor maravilloso en mi par de semillas de naranja. Río al recordar ese detalle, ¿por qué les diría así a mis bebés?

—¿De qué te ríes? —Le pone el pañal a Damon y este no deja de menear las manos en el aire.

—¿Sabes cómo me dijeron qué les decía a los bebés dentro de vientre cuándo aún no nacían?

—¿Cómo?

—Semillas de naranja.

—¿Y por qué así? —Suelta una carcajada que segundos después la elimina—. Ahora entiendo porque Roberto dijo de que le saludaras al par de semillas de naranja.

—Se llama Robert, y sí, por ellos lo dijo.

—Como se llame no me importa ni un pepino, pero ¿cómo rayos sabe él qué así les decías?

—Mi amigo Oliver lo ha mencionado enfrente de nosotros, por cierto ¿cuánto tiempo llevan saliendo Oliver y tu hermano?

—¿Oliver y mi qué?

—Y tu hermano. —Le pongo las calcetas de algodón blanco a Sofia, cuando regreso a ver Dominic va más adelantado y ya ha terminado de cambiar a Damon. Ya por último le pongo su pantalón que le viene ligeramente grande, es muy delgada. La casa está climatizada por ello les viene bien la ropa calentita.

—¿Qué pasa Dominic? —le pregunto para después seguirlo de vuelta a la habitación de nuestros bebés que es muy bonita, las paredes son blancas con una en excepción en color negro, pero no es pintura, es un tipo de pizarra donde alguien con gis a pintado animales quedando la pared un poco curiosa, lo que más me gusta son las cunas de madera barnizada en color chocolate, la que está pegada a la pared blanca tiene las sabanas azules y una almohadilla rectangular en la que se lee "boy" en letra cursiva, además hay un conejo de felpa con camisa azul y en la cuna que está pegada a la pared negra tiene las sabanas rosas y en su almohadilla también rectangular se lee "girl", su conejo de peluche tiene su camisa rosada.

—Ya vuelvo, voy por los biberones. —Acomoda a Damon y sale de la habitación. Sofia hace unos ruiditos con la boca luciendo adorable, los veo y me pregunto si es verdad que esas dos personas crecieron dentro de mí y si el idiota de Dominic no hubiera sido tan imbécil hubieran sido tres bebés. Dominic entra en la habitación, me pasa un biberón, el azúl, así que ahora es mi turno de atender a Damon y él a Sofia.

—Te toca darle de comer a Deker mientras yo esta vez a Kiara —dice lo que ya sabía. El ver a Damon comer es adorable, quisiera estar por siempre a su lado, observando que estén bien, que nadie los haga sufrir pero sé que será imposible.

De a poco las onzas de leche se van reduciendo y los ojos de Damon se comienzan a cerrar. Quito el biberón de entre sus labios cuando noto su pecho subir y bajar con tranquilidad, se ha dormido. Dejo momentáneamente el biberón en una repisa de madera que tiene aún grandes espacios vacíos.

Me acerco a Dominic, Sofia sólo muerde el chupón jugando con el pero no bebe la leche, con razón está más delgada que Damon.

—Kiara no quiere comer, algo me dice que hará que me salgan canas verdes cuando sea grande.

—Ya lo he visto —digo sin quitar la vista de Sofia—, préstame el biberón. —Me lo da segundos después, Sofia comienza hacer pucheros, la tomo en mis manos antes de que llore y despierte a Damon como lo ha hecho antes. Camino por toda la habitación y una canción viene a mi mente no sé de donde y la comienzo a cantar, sus ojos parpadean, una ultima vez ya no los abre, la leche a disminuido pero no como la de Damon.

—This is my life, it's good, it's real, it's perfect, I do not know about monsters, shadows, lies, I do not understand the world, but if my family is perfect, I love life, Being in this place, these are my dreams —canto esa canción una vez más, Sofia se ha dormido, camino hacia su cuna y lentamente la dejo sobre las sabanas.

N/A.

Capitulo dedicado a: Jazmine_aguila y AlienMoonJackson

Mte

Gracias por leer.

Maravilloso accidente. (Completa) (En Físico) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora