Maravilloso accidente. (Completa) (En Físico)

☀

Abro los ojos dispuesta a no seguir recordando, porque duele, todo recuerdo duele, en estos también incluyo mi pasado antes del accidente automovilístico. Contradiciendo a lo que quiero cierro nuevamente los ojos, la luz del amanecer me lastima, bajo mis lentes de sol que poco pero me ayudan a tener más oscuridad, es como si el recuerdo continuara donde mismo, como de aquellas veces donde tienes pesadillas de media noche donde logras despertar y tratando de olvidar el amargo sueño buscas volver a dormir con tranquilidad y jodidamente la puta pesadilla sigue su curso donde mismo, como una jodida brujería, de esta misma manera me pasa, el recuerdo continua donde mismo:

—Lo siento Mare.

—Tu padre ha sido arrestado —susurré.

—Lo sé, eso también era parte del plan.

—¿Ah sí? ¿Y qué más Will? ¿Qué más formaba parte del estúpido plan?

—Entiendo que estés enojada.

—Lo estoy así que responde.

—El plan era simple: hacer caer a Black Widow, consistía en hacerle creer a todos que había sido suicidio, o bien asesinato, a lo que hubiera sido el estilo de «Viuda Negra» si hay algo que no soporta es que lo inculpen de cosas que no deben ir en su historial delictivo, pensamos que con esto lograríamos tener contacto con él a través de Dominic, creo que debimos pensar con anterioridad que podía aparecer en la sepultura. Y en cuanto a mi padre, él me lo prometió, entregarse, sabe que como familia hemos estado destruidos desde el asesinato de mi madre, es lo que más le duele, probablemente yo también tenga que estar en prisión, pero te juré cambiar, hacer que la mafia del jefe desaparezca, ahora simplemente me marcharé del país, ya no soy más Willmer Rowd hijo del jefe, no más Mare, ahora soy Esteban García y viviré en Colombia, no hay crimen detrás de este nombre y nadie podrá reconocerme, nadie tiene fotos mías, los policías y el forense que aseguraron ver mi cadáver no eran más que actores no reconocidos que no podrán hablar, no hay nada que me rastree a la cárcel, no más América, juramento cumplido.

—¿Te irás del país? —dije limpiando una lágrima que se deslizó por mi mejilla.

—Sí, cumpliendo mi segundo juramento a ti, un día me hiciste jurar que si no llegabas a ser la misma te perdonara y superara, recuerdo que dije que no podría cuando me pediste que me volviera a enamorar, pero lo juré, definitivamente no eres la misma, y definitivamente no me quiero enamorar nuevamente, no de una mujer que no seas tú.

—Lo siento Will ¿O debería llamarte Esteban? Yo me siento terrible, no puedo creer como tuvieron la suficiente voluntad para hacerme creer esto, tú no sabes como sentía que en cualquier momento mis huesos se romperían, que mi cabeza estallaría, y una vez más sentía que mi corazón se rompía, creo que ni siquiera tengo la suficiente fortaleza para levantarme justo ahora del suelo.

—Entonces te haré compañía desde abajo —dicho esto se sentó frente a mí y tomo mis temblorosas manos en las suyas.

—No puedo creerlo —susurré viendo su rostro tan cerca del mío, sus cinceladas facciones, sus ojos verdes, su cabello rubio.

—Te amo, te amo con toda mi maldita y jodida vida —esa fue su respuesta—. Tengo algo que mostrarte. —Sacó su camisa por su cabeza, y precisamente no era su vientre en forma de tableta de chocolate lo que quería mostrarme porque aún sentado en el suelo giró sobre sus nalgas para quedar de espaldas a mí.

—Es hermoso —subí mi mano por el contorno de la tinta que manchaba toda su piel, al tocarlo noté como su cuerpo tembló, su piel se erizó a la vista del mundo entero, su respiración se aceleró, lo sé por la forma en la que sus hombros subían y bajaban, aún así pasé las llemas de mis dedos por el contorno de la ancla gigante que abarca cada centímetro de su blanquecina piel, la ancla estaba bañada en rosas azules, rosas, amarillas y moradas que envolvían la ancla perfectamente, y justo en medio estaba mi nombre tatuado, algo espectacular y hermoso.

—¿Por qué una ancla? ¿Por qué mi nombre Will?

—Solías decir todo el tiempo que era tu ancla, me encantaba escucharlo, era la persona que hacía que recuperaras el sentido común, la paz, la cordura, la tranquilidad, la ancla que te traía de regreso a la tierra, la ancla que te ponía en orden los pensamientos y los sentimientos... Y tu nombre es por que eres el motivo de que la ancla se encuentre ahí, y también porque me voy, tú te quedas, y de esta forma te llevaré conmigo siempre, en mi piel.

—¿Te volveré a ver? —pregunté abrazándolo desde atrás, quedando mi cabeza recargada en su hombro, mi voz dio directamente en su oído, mi pecho contra la piel de su espalda, contra su tatuaje, nuestro tatuaje.

—Siempre que quieras. Siempre estaremos unidos, tenemos un pasado juntos, no lo recuerdas ahora, pero algún día lo harás. —Lo abracé más a mí, recargué mi espalda de vuelta a la pared y de ésta manera Will quedó acostado sobre mí. Permanecimos callados en un cómodo silencio hasta que la puerta fue abierta. Me alarmé pero a Will no pareció importarle, por el umbral de la puerta pasó Dominic, Alaska, Oli, Harry y Derek.

—¿Ya se terminó? —preguntó Will sin moverse ni un ápice, yo tampoco lo hice.

—Sí. Todo a terminando, cada quien a partir de ahora tendrá una vida diferente, ya sea juntos o separados, con o sin comunicación de los demás —dijo todo esto Dominic sin quitarnos la vista de encima.

—Bien —respondí—. No los quiero a ninguno de ustedes farsantes cerca de mí.

—Lo siento... —empezó a decir Alaska.

—Ahórratelo —dije cortando lo que sea que fuera a decir—. Ahórrenselo todos —puntualicé, lo que era algo jodido por que estaba abrazando a Will con todas mis fuerzas sin querer dejarlo ir, menos a un país tan lejos, creo que dentro en lo profundo de mi alma algo me decía que aún lo amaba y que no lo dejara ir, pero eso no estaba a discusión, Willmer abordó un avión rumbo a Colombia al día siguiente y sus últimas palabras fueron:

—Te regreso tus palabras mi querida América, como bien un día me dijiste: Recuérdame siempre, pero también enamórate de nuevo tan fuerte e intensamente como lo hiciste conmigo.

Mte

3/38
Mte

Gracias por leer.