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Dylan

Toda la noche anterior no logre dormir ni un poco por los nervios que sentía y que se veían reflejados en mi manera de moverme o de actuar. Las palabras que me había dicho papá se habían quedado grabadas en mi cabeza "No busques ser como todos". ¿Pero como podía ser yo mismo si ni siquiera sabía a ciencia cierta que mi manera de ser le gustaría?. Esta mañana pensé muchísimo en si dejarme el arete o quitármelo, en si debía de usar mis anteojos normales o los pupilentes. No tenía en verdad la menor idea de que hacer al respecto con mi vida.

-¿En verdad no piensas decirme lo que te dijeron tus padres?

Mire a Freddie con fastidio. Desde que llegamos a la escuela no ha dejado de insistir. Incluso desde anoche ha querido averiguar pero no he dicho nada al respecto. Debo decir que mi primo y mejor amigo era un tantito chismosit

-Ya te dije que solo me dio el permiso para usar lo que quisiera

-!Eso es genial! Pero quiero todo el chisme-se cruzó de brazos

-Tenemos clase ¿si?, te veo en el receso

-Espera-me detuvo de inmediato-Suerte con Linnet. Ve a por ella, conquistador

Guiño un ojo para después irse a su salón. Comencé a temblar un poco más. ¿Le gustaría mi cambio? Bueno, no es que me haya traído ropa casual, es la escuela y debo cumplir con un uniforme. Lo hice, solo arregle mi cabello, me puse el arete y los pupilentes. Yo no era como mi hermana de rebelde, odiaba meterme en problemas porque no quería darles dolores de cabeza a mis padres. Suficiente tienen con Darcy.

Entre al aula aún temblando de miedo, aunque logre controlarme para evitar verme como un tonto. Hoy solo tenía esta clase con ella por lo que debía hacerme notar. Linnet ahora si debería verme. ¿Lo haría?.

Mamá en la mañana solo beso mi frente con algunas cuantas lagrimas en sus ojos para después darme la espalda. Papá dijo que no tenía nada que ver conmigo, que estaba en su periodo aunque no le creí. Intuía que era por mi.

-Hola, Dylan-Vianey se lamió los labios al verme

No era la única, la mirada de las demás chicas del salón estaba por todo mi cuerpo, lo que me hizo sentir terriblemente incómodo. ¿Esto le gustaba a mi padre cuando era joven? Yo odio la atención. Las ignore justo como lo hice con mis pensamientos  y continúe caminando hacia mi asiento. Linnet aún no llegaba, su lugar se encontraba solo.

La maestra estaba por cerrar la puerta, cuando aquella luz que irradiaba Linnet se hizo presente. Me acomodé mejor en mi lugar y le di una gran sonrisa; ella ni siquiera me miró.

Estaba por bajar la mirada decepcionado cuando mientras se sentaba en seguida de mi, ella me observó. Sus ojos se reflejaban en los míos, aquel intenso color café era el motivo de mis desvelos, y ni hablar de esa sonrisa que tenía. Misma sonrisa que poco a poco fue borrando mientras más me veía. ¿Que ocurría?

De un momento a otro esa pequeña conexión que creí habíamos tenido, se esfumo. Su cara mostraba confusión, a la vez que algo de ¿decepción?.

Sentí que el aire no llegaba a mis pulmones. Las paredes se cerraban a mi alrededor. Todas las miradas estaban en mi, pero se sentían demasiado lejos. De un momento a otro perdí la noción del tiempo, así como de la conciencia.

Para cuando la recupere ya me encontraba en la enfermería. Golpe mi cabeza contra la almohada porque había tenido un ataque de asma.

-Veo que ya vas despertando. ¿Como te sientes?

Styles II [H.S] Terminada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora