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Darcy

Despertar cada vez me resultaba más agotador. El solo abrir los ojos me pesaba en el alma, por el simple hecho de que cualquier día de estos podría entrar a esta casa la intrusa hija de Harry. No me dejaba dormir, me ponía de malas. Ahora para rematar, Harry me aborrecía como su hija prefiriendo a la otra. Pues al menos ya tendría quien le limpie el culo cuando sea más anciano, porque yo no lo haría. 

Limpie mis lagrimas mientras caminaba por las calles de la ciudad sin rumbo alguno. Solo no podía quedarme más tiempo en casa para escuchar los sermones de mamá pidiéndome que perdonara a Harry o esa bola de estupideces. Era ahora cuando deseaba no tener una maldita familia y estar sola en el mundo.

Mi celular sonó y vibró en mi pantalón. Quise ignorarlo porque posiblemente sería ella, pero al ver la insistencia decidí checar.

Sonreí entre lagrimas

—!Justo necesitaba una señal!

—¿Señal de que, idiota?—hablo Peyton del otro lado—¿Por qué no me contestabas? ¿Qué tal si me estoy muriendo?

Rodé los ojos

—Hierba mala nunca muere, y tú serás eterna

—Pues está hierbita está en el hospital, así que ven de inmediato

Ni tiempo me dio de responder cuando ya habíamos cortado. Asustada salí corriendo hacia el hospital que estaba cerca, desafortunadamente era el de _____.

Al llegar volteé hacia todas direcciones tratando de no encontrarme con Harry o con _____. Ya había tenido suficiente de ambos el día de hoy, y eso que recién eran las diez de la mañana.

Camine por todos los pasillos hasta llegar a urgencias, donde se encontraría Peyton

—!Cuánto te tardas!—reclamo cuando llegue—¿Por qué vienes de incógnito?

—Larga historia—bufé. Su pierna se encontraba suturada—¿Ahora donde metiste el pie?

—Papá estaba haciendo un trabajo en el garaje, pase y no me fije en un alambre. Ahora tendré una hermosa cicatriz—ironizo

—Tan tonta—bromee—¿Ya te dieron de alta?

—El guapo doctor se fue a comer. Dijo que cuando terminara me podía ir—rodo los ojos—Aunque no tengo problema. ¡Todos aquí son hermosos! ¿Qué es un requisito para trabajar aquí o qué? ¡Parece serie!—rio mirando hacia todos los enfermeros y doctores que pasaban

—No suelo fijarme mucho en eso cuando vengo

—Ya me di cuenta. Bueno, te llame para que vayas a la cafetería a traerme algo de comer. ¡Me estoy muriendo!

—¡No me hagas esto, Pey! —exclame cansada

—Tranquila Dar, solo es ir por comida

—La cuestión es, que no quiero toparme a alguno de mis progenitores. Esta mañana fue un horror con ellos

Trate de controlar las lagrimas para no verme tan patética

—¿Y que te hace pensar que ellos están aquí?

—¡Hola, mamá trabaja aquí! —dije irónica—Y Harry viene a cuidar a su maldita hija

—Pero será rápido, por favor. Te aseguro que no te los vas a topar

Luego de rogarme por algunos minutos, termine aceptando y yendo a la cafetería por algo para mi amiga. Se lo entregaría y la esperaría afuera en alguna banca, porque no quería estar en el maldito hospital ni un segundo más. Aunque para mi maldita mala suerte, tras recoger su comida, en una mesa lejana se encontraba Harry con una señora que le tomaba de la mano.

Styles II [H.S] Terminada Donde viven las historias. Descúbrelo ahora