Perfecta Casualidad (CAMREN)

Capítulo 6.

Apartamento de Camila Cabello 8:15 P.M.

Un grupo de policías estaban hablando con Dinah sobre la desaparición de la mini Cabello, no habían encontrado nada en las últimas nueve horas. Desde que Shawn había encontrado a Camila en el suelo y con el teléfono en sus manos y después de llevarla con el doctor de la empresa y luego de decirle que todo estaba bien pero que debía guardar reposo, cosa que Camila ignoró, se ofreció a traerla a su casa, la latina no había mencionado palabra alguna. Estaba preocupada, sus manos temblaban. Su pequeña estaba sola por las calles. Si nunca la hubiera dejado esta mañana. Si no hubiera ido a trabajar.

No estaría pasando nada de esta angustia.

Desde que recibió la llamada de Dinah y luego de ir a su armario por un cambio de ropa y de un gran abrazo de disculpas de su amiga, salió de su casa para ir en busca de su pequeña. Todos estaban ayudando. Ally, Dinah, Shawn, vecinos de Camila y su vecina del apartamento de junto, Ariana. Los policías estaban buscando por cada rincón de la ciudad, y es que Camila pensó que no harían nada para buscarla pero gracias al Señor Geller, todos lo hicieron. Ahora había policías buscando en cada hospital, en cada tienda, mientras Dinah y los demás estaban en lugares cerca del parque donde Karla se vio por última vez.

Camila se detuvo en un árbol grande y un llanto llegó a su mente, era tan real. La tormenta había comenzado a caer y los truenos a su pequeña le asustaban.

-Dios mío, ayúdame a encontrar a mi niña, puede estar sola por algún sitio. Tiene miedo, ella odia las tormentas, le asustan -dijo entre lágrimas - ¿Dónde estás, mi amor? ¿Dónde, bebé? -miró a ambos lados pero de nuevo, no había nadie.

-¡Mila! -Shawn llegó a lado de Camila y le ofreció su chaqueta mientras la cubría con su sombrilla -vamos, te vas a enfermar.

-No puedo irme sin mi hija, está sola y puede estar asustada -le dijo entre lágrimas.

-Lo sé pero te prometo que ella está bien y está resguardada de esta tormenta, la princesita es fuerte y va a resistir como siempre le hemos dicho, Mila vamos -la ayudo a caminar -los policías están haciendo su trabajo. La vamos a encontrar, te lo prometo bonita -Camila se abrazó a Shawn derramando lágrimas sobre su camisa blanca.

Departamento de Lauren

Ahora, un grito despertó a la joven de ojos verdes, ese grito provenía de la habitación donde estaba la pequeña. Se levantó rápidamente y al ver que la energía se había ido. Encendió su iPhone y activó la linterna, fue hasta la habitación y la encontró abrazada a Nala, la sostenía como si su vida dependiera de ello. Se acercó y la niña se cubrió con la manta.

-Tranquila, soy yo -la niña quitó las sabanas -¿Qué pasa?

-Quielo a mi mami -dijo y sus ojitos se llenaron de lágrimas.

-Yo también quiero que esté aquí pero no puedo hacer eso porque no tengo idea de quien sea tu madre, ¿tienes miedo?

-Shi, no me gustan las tolmentas -su mente volvió a viajar en el tiempo, hace tres años, alguien le había dicho algo similar. Mierda, recordando de nuevo -quielo que mi mami esté aquí, llévame con ella pol favol -le dijo la pequeña con sus ojitos rojos de tanto llanto.

-Te prometo que haré todo lo posible para que estés con tu mamá muy pronto, pero por ahora no puedo hacer nada porque afuera está lloviendo ¿Me entiendes? -la pequeña asintió.

-Quedate conmigo -le dijo y a Lauren se le encogió el corazón, no sé muy bien si de ternura o de las frases que últimamente le hacían recordar tantas veces, que escuchó esa misma frase hace mucho tiempo.