CAPITULO 2 (Callejón)

4.7K 260 16
                                    

Mía

Desde luego que lo que ha dicho esa anciana era verdad,aqui no ha venido una chica en años.

Lo primero que me recibe al entrar en los vestuarios es un fuerte olor que no se exactamente a qué,pero desde luego que es muy desagradable.Y por no hablar de la animales desconocidos que me he encontrado caminando como quieren por el suelo y las taquillas oxidadas llenas de suciedad...joder.

A la mierda-pienso con una mueca de angustia lanzando la bolsa encima del banco antes de salir corriendo de esos vestuarios malditos con mis guantes de boxeo hasta que llego a la sala y me detengo en la puerta unos segundos quedándome en shock.

Todos,son todos tios...tios que están mirándome-pienso con una incómoda tos intentando ignorar las miradas y silbidos masculinos mientras camino como si nadie me estuviera viendo sigilosamente de puntillas a un saco que veo vacío y suspiro moviéndome inquieta.No me gusta la atención.

-Parece que hay una nueva conejita en la granja!-grita uno de ellos mientras me pongo los guantes bien y suspiro manteniendo la boca cerrada para no meterme en problemas concentrándome como puedo al lanzarle al saco el primer gancho derecho.
-Morena!!-canta otro y lo miro de reojo encontrándome a un chico haciéndome señales con la mano para que me acerque a él,lo ignoro-Ven aqui anda...si sólo quiero hablar contigo!Bueno y tu número-añade con una carcajada.

-Joder-mascullo en voz baja cerrando con fuerza los ojos para respirar profundamemte intentando liberarme de todo el estrés que llevo dentro pegándole sin pausa al saco.

Paciencia Mia,paciencia-recuerdo las palabras que me decía mi madre cuando era pequeña mientras siento como me recorre la rabia por todo el cuerpo.

-Podéis callaros de una puta vez?!?!-se escucha una voz grave que hace que el silencio inunde toda la sala y paro un momento de golpear al saco para tirarme curiosa dándome cuenta de que esa voz viene de...¿cómo se llamaba?-Os juro que como oiga a otro maldito subnormal le cierro yo la boca de un puñetazo!

Aaron-recuerdo su nombre a la vez que me inclino un poco para conseguir verle la cara y quedo asombrada al observar su rostro...su mandíbula apretada,su nariz perfilada,sus labios sorprendentemente carnosos,su pelo rubio,sus ojos azules...esos ojos que...

Oh mierda me está mirando-interrumpiendo mis pervertidos pensamiento al notar como para también su lucha contra el saco y alza la cabeza clavando esos ojos azules en los mios antes de escanearme con ellos todo mi cuerpo sin vergüenza y volver a donde estaba.Aunque la verdad creo que es la primera vez en toda mi vida que no me importa que me miren de esa manera...es más,me gusta.

Mierda,¿pero en que estoy pensando?
¡Actua con normalidad Mía,solo es un tio!

-Hola-lo saludo de repente haciendo que frunza el ceño y no se me ocurre otra cosa más que levantar el brazo y saludarlo como una idiota a pesar de que estamos practimente al lado.

Dios...va a pensar que tengo un problema mental-pienso sintiéndome la persona más patética del planeta pero me sorprendo cuando este me ignora y vuelve a hacer lo que estaba haciendo como si nada.

Al menos no se ha reido de mi-me compadezco a mi misma consiguiendo apartar mis ojos de esa espalda pero lo miro una última vez por actoreflejo haciendo que se me escape una sonrisa al ver como él intenta ocultar la suya sin dejar de golpear el saco con esa fuerza sobrehumana.

Una hora después

-Ya has acabado?-me pregunta la anciana cuando salgo de los vestuarios aún sudada ya que ni de broma voy a ducharme en ese vestuario y asiento con la cabeza-Pero...sigues queriendo estar en el gimnasio?
-No ha sido para tanto-respondo sinceramente encogiéndome de hombros.
La verdad me lo esperaba mucho peor.
-Eso dicen todas al principio-se burla ella pero quita la sonrisa al ver a algo o alguien a mis espaldas-Adios Aaron-dice de repente y me giro confusa encontrándome cara a cara con esos ojos azules que no han parado de mirarme en toda la hora que llevo aqui.

-Adios Helen-se despide el también dándome un brusco empujón al pasar por mi lado y me aparto dejándole el camino libre.

Que chico más raro.

-Te he dicho que no-repito por tercera vez mientras camino de camino a casa por el mobil en la oreja-Que no Molly a las nueve quiero que estes en casa,punto.
-Pero Mía...!!Por favor me quiero quedar aqui a dormir!-me sigue suplicando como si fuera una niña pequeña justo cuando tengo que girar para entrar en un callejón y me recorre un escalofrio por todo el cuerpo.
-Te veo a las nueve-zanjo el tema colgando la llamada antes de que pueda decir nada guardando el mobil en la bolsa.

Un momento...¿ese no es?-empiezo a pensar deteniéndome en mitad del callejón cuando mis ojos se posan en una moto negra que hay aparcada enfrente de una puerta pero eso no es lo que me sorprende.

-Estamos bien jodidos...-escucho que dice un voz masculina desconocida y entrecierro los ojos viendo al chico moreno que camina dando vueltas sobre si mismo como un perrito que juega con su cola-Me apetece comer en el McDonald's.
-Eso es lo que te preocupa ahora?-resopla el otro que está apoyado encima de la moto fumándose un cigarro...Aaron,es Aaron-Eres imbécil, está demostrado.
-Tengo hambre-sigue protestando el otro con un bostezo-Entonces dices que una tia se ha apuntado al gimnasio?-añade justo cuando voy a irme y vuelvo a esconderme detrás de la pared.

¿Están hablando de mi?

-Nada de lo que preocuparse,esa en dos dias se ha desapuntado,te lo digo yo-se rie Aaron alzando la cabeza para expulsar el humo por la boca-Esa la tipica niñita pija y indefensa,además es pésima en boxeo.

¿Pero como se atreve a...?¡Yo soy la puta ama en boxeo!-tengo ganas de gritarle pero me lo reservo para mi.

-Está buena?-pregunta el moreno intrigado poniéndose el casco de la moto para subirse-Si,está buena-lo afirma al ver que el otro no contesta.
-Cállate de una vez y vamos a entregar esa mierda-cambia de tema Aaron haciendo que frunza el ceño.

¿Que tienen que entregar?

Unos minutos después la moto pasa a toda velocidad por mis ojos y la observo desaparecer por el largo callejón.

Como que me llamo Mía Miller que me quedo en ese maldito gimnasio.

-Hola!Que tal?Espero que os guste el cap!

Os adoro.








Aaron Donde viven las historias. Descúbrelo ahora