64.- what if...?

7.3K 446 90
                                    


La guerra estaba al doblar la esquina, todos los jóvenes entusiastas por apoyar a un país que nunca los reconocería hacían filas para poder inscribirse, y dos de muchos de ellos eran James Buchanan Barnes y Steven Grant Rogers

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La guerra estaba al doblar la esquina, todos los jóvenes entusiastas por apoyar a un país que nunca los reconocería hacían filas para poder inscribirse, y dos de muchos de ellos eran James Buchanan Barnes y Steven Grant Rogers.

Los dos habían asistido al reclutamiento, sólo Bucky había pasado todas las pruebas. Era por eso que los tres nos encontrábamos en uno de nuestros concurridos locales para ''celebrar'' el hecho que Bucky partiría a Inglaterra la próxima semana.

—Encuentro realmente estúpido esto —espeté con molestia viendo como los dos hablaban sobre la guerra.

— ¿Por qué? Luchar por el país es necesario —sonrió Bucky besando mi mejilla. Steve sonrió asintiendo.

— ¿Luchar por un país que no los reconocerá si mueren? Si, demasiado cool. Tal vez es por eso que las mujeres vivimos más que los hombres, no somos tan estúpidas —señalé.

— ¡Eso es chica! —gritó una de las meseras. Las demás mujeres dentro del local también estuvieron de acuerdo. Steve sonrió.

—Oh, vamos preciosa... —Bucky tomó mi mano —. Sólo serán unos meses, luego tendrás James para rato.

Steve me miró con tristeza, sabía que a él le dolía no poder ir además del hecho de dejar ir a Bucky.

—Por lo menos estaremos juntos Steve —sonreí viendo a mi mejor amigo.

—Nos tendremos el uno al otro —concordó Steve.

— ¿No ven? No estarán solos. Prometo volver —dijo.

—Las promesas son realmente vagas en este tiempo Bucky —respondí.

James bufó y miró a Steve buscando apoyo. Rogers sólo levantó las manos no queriendo meterse en el tema.

—Bien, antes de irme me gustaría que fuéramos a la expo Stark —dijo mirándonos a ambos. Evité chillar de la emoción —. Deja de aguantarte cariño, sé que estás locamente enamorada de Stark.

Chillé de la alegría. Steve y Bucky rieron al ver mi reacción.

— ¿Dijiste eso ahora porque sabes que ella está enamorada de Stark no es así? —preguntó Steve mirando a Bucky. James le guiñó un ojo.

—Tú si me conoces amigo.

[.  .  .]

La semana se había pasado tan rápido como había llegado, en menos de veinticuatro horas James partiría junto a otros hombres hacia Inglaterra.

—Amor, deja esa cara —suspiró mientras se vestía.

Tapé mi cuerpo con la sabana y me levanté de la cama con algo de nerviosismo. No sabía cómo decirle que existía lo posibilidad que un bebé nuestro estaba creciendo en mí vientre, estaba segura que si se lo decía él era capaz de no viajar a Inglaterra para cuidarme y estar conmigo en el proceso, no quería arruinar su ilusión.

—Estoy bien... es sólo qué —me encogí de hombros mientras veía por la ventana —, es complicado dejarte ir.

—No es como si me fuera a morir amor —rió besando mi hombro desnudo.

—James... existe la posibilidad.

Él suspiró.

—Lo sé. Pero sólo serán unos meses.

Asentí bajando la mirada.

»Necesito hacer esto amor, necesito luchar por Estados Unidos contra esos Alemanes. Lo necesito antes de establecernos.

—Tal vez no haya una boda si te vas —murmuré.

— ¿De qué hablas? —preguntó alejándose —. ¿Estas dudando sobre nuestra boda?

Me quedé en silencio. No era que dudara, es más, si fuera por mí me casaría ahora mismo. Pero había algo en mí que le pedía que no se fuera, tal vez era el miedo.

—No... es sólo qué...

Bucky me observó molesto por la situación.

—No quería que mi último día en el país fuera así —negó con enojo —. ¿Sabes? Si tienes tantas duda ahora... deberíamos —su voz se quebró un poco —, deberíamos cancelar la boda.

—Sí, tal vez no deberíamos casarnos —solté casi por inercia. Tapé mi boca cuando noté lo que dije.

—Quizá no —concordó con la voz rota.

Ambos nos miramos algo sorprendidos. El silencio formó parte de la habitación.

»Mira, no te pido que lo entiendas —dijo —. No te pido que te alegres. Sólo te pido que me apoyes.

Negué mientras unas pocas lágrimas caían por mis mejillas.

—Eso quiero Bucky, ¿sí? De veras quiero, pero no puedo —negué.

— ¿Por qué no? —preguntó molesto.

—Porque me asusta —espeté —. Por eso no puedo. ¿Y si te matan o te atrapan, o si te das cuenta que yo no encajo en tu vida y esos meses se convierten en un para siempre? ¿Puedes prometerme que eso no sucederá?

—Amor...

—Si no puedes prométermelo —dije —, deberíamos separarnos ahora. No voy a esperar todos estos meses a que me destroces el corazón.

—P-Preciosa, te amo.

— ¿Puedes prometerme que no sucederá? —pregunté.

Él se quedó en silencio mientras unas pocas lagrimas caían de la misma manera que las mías.

» ¡Responde! —dije. Saqué el cabello pelirrojo que me obstruía la vista —. ¿Puedes prometerme que eso no sucederá?

Bucky me miró y se acercó para besar mis labios.

Eso no era una promesa, era una despedida.

[.  .  .]

PUEDEN TOMARLO COMO UNA PRECUELA DEL ONE-SHOT #35

Bucky Barnes »One-ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora