Morena

Capítulo 34 "Él no es lo que parece, no te ilusiones"

Ya ha pasado poco más de una semana desde que inició el curso, las cosas no han cambiado con la excepción de que las personas me prestan más atención. A donde este, miradas me persiguen, cazando el momento en el que me equivoque, para saltar al ataque.

Creí que todo esto se dejaría del lado con el tiempo, pero más rumores comenzaron a sonar, rumores de los cuales no tenía idea, y todos basados en más hombres que compartieron conmigo más que una simple conversación, un asco, para ser justos.

Mis viejas amigas decidieron que era demasiado vergonzoso estar conmigo por lo que concluyeron firmemente en dejar de hablarme, es curioso que meses antes éramos inseparables y nos jurábamos estar juntas siempre, pero poco dura el siempre últimamente.

—Hola —Unos ojitos cafés tomaron asiento frente de mí.

—Hola —Sonreí amigable.

—Daniela, ¿Cierto?

—Danielle —Lo corregí.

—Lo siento como todos te dicen Dani, supuse que tu nombre era Daniela —Estiró su mano hacia mí, se veía completamente confiado, nada que ver con el chico nervioso de hace unos días —Soy Tristán, estamos juntos en clase.

—Claro —Tome su mano y la agite un segundo, y continúe leyendo, tenía un examen importante, pero él no apartaba la mirada —¿Necesitas algo? —Pregunte con un tono suave, no quería espantar a la única persona que me había hablado en un buen rato.

—Sí, habrá una fiesta, y vendrás conmigo —Ordeno, no fue una invitación, fue una orden en su más fiel estado.

Recargo sus codos en la mesa y sonrió coqueto.

—¿Perdón? —Levante las cejar, ¿Quién era?, ¿Y qué le hacía pensar que iría con él?

—Que iremos a una fiesta juntos —Alzo ligeramente una ceja, y sus ojos hicieron algo que podía hipnotizar, en verdad tenía unos ojos muy lindos.

—Tengo muchas cosas que hacer este fin de semana —Me excuse.

La verdad no me interesaba ir a un lugar lleno de gente que me juzgaría, suficiente tenía con la escuela.

—Perfecto, porque es hoy —Dio una ligera palmadita a la mesa.

—No hagan ruido —Susurro una chica muy molesta, pues estábamos en la biblioteca.

—Lo siento —Murmure apenada.

—¿Entonces? —Me miro Tristán muy sonriente.

—Gracias, pero no —Tome mis libros y camine hacia la puerta.

—Vamos, todos irán —Dijo mientras me perseguía a la entrada —Quiero ir y no tengo con quien —Un sentimiento de alma caritativa invadió mi cuerpo.

Vamos, ¿Qué era lo peor que podía pasar?, vale, que más sabían que fuera relévate, todos mis secretos ya habían salido a la luz.

—Bien —Suspire.

A nadie le cae mal una fiesta, quizá podía despejarme un poco de todo este drama.

—Pasó por ti a las 8 —Me rodeo y salió de la biblioteca casi corriendo.

—¡Pero... Espera! —¿Cómo sabía dónde vivo?

—Si me quedo un segundo más puede que cambies de opinión —Grito mientras se alejaba cada vez más.

Inconscientemente sonreí.

...

No sabía exactamente como vestir, no quería verme desarreglada, pero tampoco quería exagerar, Archi estaría en la fiesta y eso me ponía nerviosa, las manos me comenzaban sudar de solo pensarlo.