Capítulo 41 "Los rumores no te hacen justicia"

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Jamás sabría explicar lo incomoda que me sentí en este momento, estábamos los 2 desnudos boca arriba con las respiraciones pesadas. No había sido lo que esperaba, y no me malentiendan, no fue malo, solo que él era demasiado brusco, y está bien, era la primera vez, quizás teníamos que acoplarnos a lo que cada uno disfruta. En algún momento le pedí que bajara el ritmo, y lo hizo, pero pocos segundos después regresaba y me daba algo de vergüenza volverlo a pedir, por lo que decidí dejarlo.

Dio un suspiro largo y todo se volvió más pesado.

¿Quería que me fuera?

¿Que tenía hacer?

¿Me iba? o ¿Me quedaba?

¿Había cambiado algo?

Gire la cabeza para verlo, él solo se inclinó y saco un cigarrillo de la cómoda.

¿Fumaba? No se supone que los deportistas no fuman.

Mi asma y yo definitivamente no éramos buenos amigos del cigarrillo, por lo que me aparte un poco, apenas fue perceptible mi movimiento.

—Ya recibiste lo que querías, ya puedes irte —Dijo de pronto sacándome de mis pensamientos.

—¿Que? —Me enderece para verlo.

—Pírate —Repitió muy lento, gesticulando exageradamente

—Yo ... —Intente hablar, pero me interrumpió enseguida.

—¡Coño !, que estoy cansado —Dio un golpe alado de su cama.

Me levanté de inmediato y comencé a vestirme, quizá le parecí muy santurrona, o no le gusto, o no lo hice bien.

Muchas ideas rondaban mi cabeza, una peor que la otra, que se suponía que estaba esperando, ¿Una relación ?, como es que siempre soy tan estúpida y no me doy cuenta de las cosas. Siempre debo meterme en líos.

—Espera —Dijo en cuanto toque la manija de la puerta.

Esperaba que dijera algo más, no sé, dentro de mí algo nació, esperanza, esperanza que me dijera que me quedara y me abrazara, me mimara hasta quedarnos dormidos, pero eso definitivamente eso no fue lo que paso.

—Los rumores no te hacen justicia, follas muy bien —Lo mire, sus brazos estaban cruzados tras su cabeza y una cierta sonrisa lo acompañaba, no a la común, esta era de superioridad —Después me dices cuanto te debo.

Solo apreté los labios para no llorar, no iba a llorar, ¿Por qué lloraría ?, no me estaba tratando peor que las personas, a lo mejor las cosas están así de aquí en adelante.

Asentí ligeramente y salí de la habitación.

Me quede paralizada, me sentida como un pedazo de carne más, un maldito pedazo de carne.

"Los rumores no te hacen justicia"

No paraba de escuchar sus palabras, solo era eso para las personas, un rumor a comprobar. Carajo, yo sé que fue mi error, asumo mi culpa, nadie me obligó a nada, pero nada le costaba dejar las cosas claras desde el principio.

Estaba dejando claro que todo lo que se decía de mí, era verdad, yo sola estaba dando el sello de validación de que todos tienen razón. Y quizá era cierto.

—¿Estas bien? —Me pregunto Pilar que se fue a un lado de mí.

Ni siquiera la había notado.

—Si —Asentí.

—¿Quieres que te prepare algo? —Tomo mi mano con delicadeza.

Negué con la cabeza —Estoy bien.

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