CAPITULO XV "HIPERACTIVO"

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Pasamos a comprar pasta al forno y un vino para mí vieja y así dejara pasar la sacudida que acabamos de darnos con la gente de Albert

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Pasamos a comprar pasta al forno y un vino para mí vieja y así dejara pasar la sacudida que acabamos de darnos con la gente de Albert.

— Hola vieja. — de inmediato nos vio.

— Fuimos por pasta. — mi viejo siempre tan audaz.

La expresión en su rostro era como para, sabiamente retroceder, porque era evidente que trataba de contenerse unas cuantas y muy variadas frescas.

— Gamaliel... — dijo entre dientes.

— Vieja, el viejo está en forma aún, era obvio que no dejaría pasar lo que le hicieron a Ghal y me dijo, de acuerdo Fabián no lo harás solo y fue con nosotros, sometió al hijo de puta, fue genial, quiero ser como mi viejo cuando sea un adulto responsable, ahora soy muy joven para serlo ¿Vos querés pastelito? Te daré la mitad. — dije mientras me ponía en frente de ella. — Él solo me cuida che, no te enojes, es un buen viejo.

— ¿Llevaste a mi hijo para que el malparido ese golpeara, a mí hijo? — reclamó.

— Yo me di el tiro con Albert, Fabián se divirtió con los demás.

— Fue divertido, necesito otro bate, solo que el próximo dirá ¡Bum! — no es fácil ser hijo de una mujer con bipolaridad y un hombre con TEI, así que cuando hago algo como eso, me pongo frenético y no puedo parar de moverme, como hiperactividad. — Vos no te enojes, él estuvo ahí cuidando, yo hubiera ido de todas formas, vieras al pobre Ghalito, me lo hicieron mierda, che, no puedo permitir eso, Ares porque es un boludo amante de la paz, parece que el tío Tony si le llegó profundo, pero a mí no, esos pelotudos lo tenían que parar y así fue. — mi viejo me puso la mano en la cabeza.

— Tranquilo, tigre.

— No puedo, fue genial, quiero otra vez, otra vez, otra vez.

— Pero claro que no lo harás — sentenció —. Y tú — señaló a mi padre —, más te vale que no hagas esto de nuevo, ten tu tiempo recreativo con él, pero no traje a Fabián a este mundo, para que tú después lo lleves a hacer esta clase de tonterías — tomó la botella de vino —. Y si mañana encuentro sucia mi cocina, tengan por seguro que no comerán aquí.

— Vieja, vos te vas a sentar a comer con nosotros, porque acabo de tener un momento viejo y pibe y ha sido fantástico, enséñame a pelear, así como vos.

— Fabián.

— No puedo controlarme. — mi móvil sonó, era Sarah. — ¿Hola?

— Alex, supe lo que pasó ¿Estás bien?

— Perfecto, hermosa, vos tenés razón, sos lista.

— Gracias ¿Seguro estás bien?

— Si, oye, el jueves es cumpleaños de Ashton, vamos a festejar, lo arreglaré todo con las pibas.

— Duerme bien Alex.

— Vos también, preciosa. — colgué con disimulo. — Vamos a cenar, deja de mirarme así que no tengo nada, vieja, vos exageras.

✟ ɢᴀɴɢꜱᴛᴀ'ꜱ ʀᴏʏᴀʟᴛʏ ✟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora