Nuestra llegada a Seattle fue algo compleja. Si en algún momento tuve dudas sobre las emociones de la castaña, toda duda quedó despejada al ver como sus brazos me envolvieron con tanta fuerza y su voz se quebró al tener que separarnos.
Fue revelador, como diferente y agradable, sentir su necesidad de mí, sentir su angustia, escuchar el repicar desaforado de su corazón. Estuvimos sincronizados, sentí el mismo temor, ese miedo a alejarme y pensar que nunca más podríamos volver a estar así.
Ambos sabemos que tenemos todo en contra, si hay algo que jamás verían con buenos ojos, es una posible relación entre los dos, Liss es el ángel intocable de la familia Hunt, inclusive la mía también la ve como una joya invaluable que deben cuidar hasta de ella misma; en cambio, yo soy el adolescente con un pasado traumático, el cual creen que no he podido superar, cuando es todo lo contrario, lo he hecho a mi manera, con mis métodos, y aunque acepto que no son los mejores, me han servido y eso es lo único que me importa, pero ellos no lo ven así, Damon, repudia mi mundo aunque no lo diga, él sería el primero en desaprobar nuestra relación.
Cierro los ojos y el recuerdo de sus ojos mirarme con tristeza crea una sensación indescriptible en mi pecho, su mano cálida palpando mi mejilla, mientras sus ojos se grababan mi rostro, me hace estremecer. Ese lapso de tiempo fue tan diferente y único, sentí tantas cosas que me han dejado aturdido y ansioso, deseoso y desesperado por indicarle a Lucas dirigirse a la clínica, buscarla y volver a besarla como lo hice hace pocos minutos.
Abro los ojos observando los edificios, locales comerciales, restaurantes, personas y señalizaciones pasar. La lluvia juega a privarme de la vista, pero mi atención no está en el exterior del auto, lucho con mis emociones, le busco un significado a esto que siento y me es desconocido, me visualizo como mi interior ansia y me gusta, pero también siento miedo, soy sincero al aceptar que me inquieta pensar en mi futuro, uno donde la única persona que he visto ha sido a Isis y ahora.... Ella entra ahí.
Liss ha llegado a mi vida de manera inesperada. Todo nació en la jodida fiesta de su hermana, hasta ese entonces era invisible, solo la melliza de mi hermano y alguien más que visitaba la familia. ¿Cómo pudo llegar a importarme? ¿Cómo captó mi atención?
No encuentro respuesta a tantas cosas y la principal es mi renuencia a vincular a Liss a mi mundo. Estoy actuando como alguien común lo haría, olvidando las palabras que por años conservé sobre Elena y su afirmación de que el amor era algo que el ser humano utilizaba para disfrazar su deseo. Me estoy mostrando abierto a experimentar algo que desconozco y aunque temo por el camino en su total desconocido, también siento placer al hacer algo, por primera vez, que me gusta sin seguir un lineamiento.
¿A dónde me llevará todo esto?
¿Cuánto durará?
Ese es el principal y mayor de mis temores. Cómo aceptar cuando decida irse, cuando ya no desee estar conmigo. Todas las relaciones de jóvenes en un punto terminan. Bueno... Damon sería una excepción, a mi hermano los unen de por vida dos bebés, y aunque eso no le asegura estabilidad en sus sentimientos, le da tranquilidad, le permite sentir que tiene un futuro seguro junto a la madre de sus hijos mientras ellos existan. Ted también marca una diferencia, a él la vida le enseñó que un hijo no te ata a su madre, por eso, aunque lo esconda, sé que su deseo de casarse implica un lazo, busca atar la pelinegra a su vida y así obtener eso que tanto ansía, seguridad, retenerla.
Pero yo soy consciente que nada en el mundo puede darte esa seguridad. Los matrimonios fracasan y terminan, las parejas de padres en unión libre se separan, porque la realidad es esa, ningún hijo te ata a un hombre. Todo en esta vida termina y entonces empiezo a sentir esa desazón en mi pecho.
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Christopher Grey #5 (Saga sombras, Grey)
FanfictionTercer libro de los hermanos Grey en La Sombra de mi Ángel.