Capítulo 34 || Todo está mal.

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Liss Hunt


Todo ha sido un caos.

Desde la amarga despedida de Christopher antes de bajar del Jet, hasta la llegada a la clínica de mi tío. Jamás creí que desprenderme de él sería tan difícil, estaba convencida que sería igual que siempre, pero algo pasó en Londres, una fuerza sobrenatural me arrastra a su recuerdo, a la necesidad casi sofocante de tenerlo junto a mí, de escuchar sus palabras de aliento igual que lo hizo antes de salir del Jet, o simplemente sentir su aroma y el calor reconfortante que desprende su cuerpo.

No sé qué ha pasado, no sé cómo pasó de ser alguien a quien recordaba, a alguien que necesito. No sé si serán las circunstancias, el vacío que me generó saber que volvería aquí, entraría a un lugar donde el dolor se volvería mi propia piel y necesitaría de su tacto para apaciguar mi dolor.

¿Qué pasó? Solo compartimos una noche y es... como si solo bastara ese tiempo para unirnos de esta manera, y posiblemente sea eso, la plenitud que sentí al despertar envuelta entre sus brazos y enredada por sus piernas fue realmente indescriptible, su calor, su olor, la suavidad de su piel rozando la mía me hizo sentir tantas cosas que no las podría describir.

Admiré su rostro, acaricie su mejilla, peiné su rebelde y cobrizo cabello, deseé con todas mis fuerzas que abriera sus ojos y así verlos tan cerca, pero era más fuerte la satisfacción de verlo así, descansando, ajeno a mi escrutinio y seguramente a la mirada de fascinación y admiración que pondrían en evidencia mis profundos sentimientos.

Guardé los pocos momentos que vivimos en Londres y los nombré como los mejores que he experimentado junto a él, repetí una y otra vez sus palabras en mi mente y disfruté de las sensaciones tan abrumadoras que despiertan con solo pensarlas, me prometí dejar que todo tomara su rumbo, no volvería a ponerme límites ni intentar alejarlo cuando pude ver en sus ojos la verdad a sus emociones, y más que todo, me aseguró que no está atado a ese mundo por completo.

Preferí creerle y disfrutar de esto que empezaba a formarse entre los dos.

Ahora sé que no fue buena idea.

Familia.

Ambos pertenecemos a la misma familia, pero me apego a la idea de que es otra de las tretas de mi madre, otra de sus mentiras para mantener ambas familias en la angustia, con el temor a verdades que desconocemos unas de otras.

Ella disfruta esto, disfruta crear disputas, generar temor, infundir miedos. Amanda está empeñada en hacer sufrir a todos sin importarle que sus propios hijos se vean envueltos en sus planes. Odia que seamos feliz, le hierve la sangre saber que podemos seguir sin ella, que podemos encontrar la felicidad y pasar de su presencia e imposiciones como siempre nos mantuvo bajo sus reglas, acciones controladas y decisiones.

Esto es definitivamente un caos creado por esa mujer. Jamás había visto a Christopher de esa manera, totalmente fuera de sí. No reconocí su rostro, pensé en un principio que su estado devastado se debía a mi hermana y el estado de Ted, pero cuando se fue sobre Leyla quedé en blanco, aterrada por su actuar.

El odio y la ira que brillaban en sus ojos era escalofriante, las venas en su frente se marcaron deformando su rostro, la fuerza que posee quedó comprobada cuando Ted y Damon no pudieron alejarlo de esa mujer, y por mucho ya los considero fuertes, más Damon, quien ha hecho demostraciones de su fuerza. Solo un hombre pudo detenerlo y fue el seguridad que resguarda la entrada principal de la mansión Grey, un hombre de aspecto militar, y el cual aseguraron mató a quien intentó secuestrar a Angelique.

Christopher Grey #5 (Saga sombras, Grey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora