BESOS EN GUERRA (Terminada)

21. UN ERROR

Thomas.

Es la tercera vez que recojo la silla del suelo y la pongo en su sitio.

Lucas está como loco, gritando de un lado para el otro y destruyendo toda su habitación.

Olivia y yo estamos intentado controlarle aunque es lo que menos nos apetece ahora porque la ha jodido pero bien y si por nosotros fuera, se podía ir bien al infierno.

Primero por el espectáculo que formó la otra noche frente a los Miller, segundo por contarles el secreto de Lana chafando así su viaje a Hawaii y sus proyectos como cantante, y tercero porque ahora mi novia y yo lo tenemos mucho más difícil para vernos.

Julie ha estado consolando a su hermana y me ha mandado algunos mensajes contándome que tal va todo en su casa.

Por lo visto sus padres se pusieron como unos locos con su hermana y le preguntaron porque Lucas sabía algo así y ellos no.

Lana parece que esta vez no se ha callado y ha soltado toda la mierda que tenía dentro, pero eso solo ha servido para que no la dejen ver la luz del sol por unas cuantas semanas.

Lucas le da una patada a su mando de la play y coge el botellín de cerveza que tiene encima de la mesita de noche para darle un buche.

-¿Vas a romper más cosas? Lo digo porque ya no te queda nada que llevarte por delante –dice mi hermana pequeña cruzándose de brazos.

-¡Fuera! –Lucas tiene la mandíbula apretada y los ojos inyectados en lágrimas, y lleva llorando y así de desquiciado desde que fue conciente de lo que hizo.

Me acerco a él de mala manera y le quito la cerveza de la mano, haciendo que se remueva y comience a forcejear conmigo.

-¡Estoy deseando pegarte una paliza y estoy en mejor forma que tú, Dawson! Así que relájate –le agarro de las mejillas y lo miro fijamente, dándome cuenta que mi hermano está peor de lo que esperaba.

-Tienes que tranquilizarte, Lu, por favor –mi hermana se acerca a él y besa su mejilla.

Realmente no sé que se le pudo pasar por la cabeza para hacer lo que hizo, pero estoy seguro de que no estaba en sus cabales porque conozco a mi hermano y no traicionaría a alguien así por así, y menos a Lana, que aunque él no me lo haya confirmado aún, es de quien está enamorado.

Pienso que el alcohol no le vino bien y que últimamente se estaba desfasando demasiado, porque la hija de los Miller le había pedido que se alejara y él realmente no quería.

Tengo que decir  que no lo entiendo, porque si los dos se gustan y con Charlotte y Valentina está todo solucionado ¿Qué problema había en que intentaran algo juntos?

Lo que está claro ahora es que Lana no quiere ver a Lucas y que mi hermano pequeño va a tener que pelearla mucho para arreglar el desastre que ha liado.

Lucas se sienta en la cama con ambas manos en su cabeza y  comienza a sollozar, haciendo que mi hermana y yo nos miremos y nos sentemos a su lado para abrazarlo.

-Di todo lo que tengas que decir –susurra Olivia apoyando la frente en su cabeza –Di lo que sientes, cuenta porque hiciste eso, Lucas.

-Llevas sin hablar desde hace tres días, no puedes estar así.

Levanta su cabeza y veo su cara empapada en lágrimas.

-Yo... -se quiebra pero traga saliva porque necesita soltar lo que tiene dentro –La quiero.

Suspiro y Olivia sonríe satisfecha porque es lo único que estábamos esperando que dijera.

-¿A Lana? –mi hermana acaricia su mejilla y Lucas asiente.